Athene Noctua (EN EDICIÓN)

Capitulo 2 - Más que palabras

La puerta cerró detrás de Melissa que se encontró sumergida en una gran habitación rectangular; a un lado en la pared habían múltiples hileras de gavetas con números y del otro camillas de acero inoxidable, algunas vacías y otras con…el cuerpo se le estremeció: cadáveres, cubiertos con una manta blanca; aun podía recordar claramente la primera vez que ella tuvo que visitar la morgue durante una clase en la universidad; cuando había una persona muerta en la calle no le importaba pero en ese lugar, con tantos olores juntos le ponía los pelos de punta.

 Continuó su recorrido con la mirada y vio una puerta a un lado, se obligó a caminar hacia allí y abrirla, solo era un cuarto de mantenimiento "¡Perfecto! Me encontraba sola", se dijo y caminó deprisa hacia la salida pero su bolso se enredó a una de las sabanas y dejó al descubierto a un hombre sin parte del rostro y con mucho sangre que había tomado un color negruzco, dio un grito ahogado y corrió esta vez hacia la puerta, pero por dentro no había manilla solo la cerradura, intentó empujarla pero no abría, el pánico se apoderó de ella, comenzó a gritar y llorar mientras golpeaba la puerta

- ¡Auxilio! ¿Alguien me escucha? ¡Hola! Alguien me ayude -la puerta se abrió y llevó sus brazos a aquel que se encontraba del otro lado, apoyando su cabeza en su pecho mientras sollozaba.

Howie se quedó estático al abrir la puerta y casi ser tumbado al abrazarle aquella chica; llevó su mano derecha hacia su cabeza a modo de consuelo y pudo ver ese cabello castaño tan familiar, era la misma chica de ascensor- ¿Te encuentras bien? –ella subió la mirada y se apartó rápidamente de su lado, Howie solo se limitó a sonreírle.

-Sí, yo…-Melissa estaba tan apenada, el cuerpo le temblaba por lo ocurrido- No sabía que la puerta no se podía abrir por el lado interior –se secó las lágrimas con la manga de suéter.

- Sí, es una medida de seguridad, no queremos que los muertos se escapen ¿o sí?  -la chica abrió los ojos de par en par, y Howie supo que el chiste no era el mejor- Lo siento, no soy muy bueno para hacer sentir mejor a las personas.

-Está bien -miró un momento alrededor y fijó de nuevo su mirada en él- Creo que no me he presentado, soy Melissa Miller –estrechó su mano- el supervisor Cobb me envió con usted doctor Dorough.

Howie rió un momento y le devolvió el saludo- No son necesarias tantas formalidades, puedes llamarme Howie si lo deseas.

-Ok… Howie

-Vamos, entremos a mi oficina, te daré un poco de té para que tranquilices –ambos entraron por la puerta que estaba a un lado, el interior tenía una gran sala, Howie le señaló uno de los muebles grandes para que se sentara y se dirigió a una pequeña mesa donde había una cafetera y una tetera- aquí tienes - dijo entregándole la taza.

Luego de entrar en aquel lugar, Melissa quedó asombrada al ver lo moderno que era todo, nada comparado con el pasillo y mucho menos con el otro cuarto, se sentó en uno de los muebles- Gracias –tomó la taza que le pasó Howie- disculpe mi comportamiento de hace unos minutos.

- Veo que te afectan estos lugares - dijo ocupando un lugar a su lado

- Si, un poco, pero solo dentro de la morgue, cuando veo personas muertas en otro sitio no me produce nada.

- Ya veo, es curioso que estés estudiando una carrera como esta; vas a tener muchos encuentros con estos ambientes.

-Lo sé, estoy tratando de afrontarlo –se puso de pie para llevar la taza a su sitio, pero Howie que había visto como se levantaba, hizo los mismo movimientos interfiriendo en su camino deteniéndola

- Permíteme –sostuvo la taza tocando accidentalmente sus manos, estaban a centímetros de distancia, él pudo detallar  su rostro y esos dos ojos grises hermosos, sonrió casi por instinto y cuando lo notó, cambió la mirada y se volvió hacia la mesa dejando la taza; tomó luego una bata blanca de laboratorio de un perchero y se la pasó a ella- Toma, creo que esta te sirve; hoy tengo que hacer tres autopsias de casos todavía abiertos.