Tomala...

Capítulo 17 - Día Uno

Capítulo 17

Día Uno

El sonido de la campana del instituto taladraba mi cabeza, me pesaba caminar y estaba totalmente desarreglado, con lentitud y con pasos inconstantes después de ser superado por el tiempo, llegue al salón, tomando asiento y luchando por mantenerme despierto escuche la voz de Angela, no tengo idea de que diría pero la salude con una sonrisa, un golpe en la ventana realmente muy suave llamo mi atención, Alejandro estaba golpeando el vidrio con su anillo, al fijar la mirada en el me hizo la seña para que saliera, aún no había entrado el instructor así que salí sin problemas, al llegar donde estaba Alejandro, no lo encontré, siempre se pierde de un momento a otro, no me sorprendí y me dirigí al gran árbol, me recosté y escuche: - Llegaron los ochentas! Salte lo más lejos posible, caí acostado en el suelo, Alejandro llego con mi bicicleta y dijo: - ¿Por qué estas acostado en el suelo? Me levante y dije: - ¿Hoy no trajiste el bate? Alejandro reía sin parar y de un momento a otro se detuvo, me miro seriamente y dijo: -No pero traje la bicicleta en la que saltaste. Mire mi bicicleta y dije: - Pero no tengo tiempo para ella, tengo que practicar ese solo. Alejandro se bajó de ella diciendo: - Por eso, necesitaras un poco de adrenalina ya que no se van a presentar a un público hasta el gran concierto, el máximo y muy reconocido “the wolrd tour Aresta”, por lo que se ha estado entrenando todos los días sin parar, por el cual has dejado de entrar hasta tus obligatorias asistencias, por ese evento que te hace trasnocharte y con el que sueñas día a día. Sus palabras no tenían precedente, eran únicas e inspiraban, eran como música que convencía, llenándome de emoción dije: - ¿Y qué estamos esperando? Alejandro se montó en la bicicleta y dijo: - Sígueme. Me llevo hasta un garaje y se bajó de mi bicicleta diciendo: -“tómala”. Al poco tiempo la puerta del garaje empezó a levantarse y a medida que se iba abriendo se esparcía un humo blanco que no permitía distinguir silueta alguna, el portón del garaje quedo completamente recogido y entre la niebla salió un carro, Alejandro me miro sonriendo y levanto su mano en la cual sostenía una cuerda, freno y dijo: - Vamos a darle más velocidad que antes, de seguro esta vez si llegas al segundo piso, ruedas por todo el pasillo y tomas la escultura. No tenía planeado tomar la escultura pero no es mala idea, sería una buena venganza por todo ese tiempo recogiendo basuras; Alejandro amarro un extremo de la cuerda a la defensa trasera del carro y después a mi bicicleta, me baje de la bicicleta y la guardamos en los asientos de atrás, subimos al carro, Alejandro acelero y nos dirigimos a una gasolinera, me baje a comer algo mientras Alejandro llenaba el tanque, compre dos tazas de café y una galletas, al volver Alejandro estaba esperándome en la salida de la gasolinera, entre al carro y le dije: - Vaya! tenemos afán. Alejandro: -Obvio, esta proeza pasara a la historia del instituto, afirme con la cabeza y dije: - Acelera! Alejandro piso el acelerador con fuerza y en un par de segundos llegamos a un tipo de choza al pie de la carretera, en donde nos encontramos con unos amigos de Alejandro, tenía rampas, bicicletas, cascos, cámaras, y otras cosas que utilizaríamos en esta "proeza histórica", me baje del carro y me lanzaron un casco, Alejandro bajo la bicicleta y me puse un kit de protección, casco, rodilleras, y cosas así; ya estaba listo para saltar, tome la bicicleta y le hice una seña a Alejandro para que acelerara, el piso a fondo el acelerador y en cuestión de segundos nos encontrábamos aproximadamente a diez minutos, pasamos por un “punto de control” en el cual salieron ciclistas a acompañarnos, muchos de ellos amigos de Alejandro, aunque se empezaron a quedar atrás por la velocidad a la que estaba siendo remolcado, cada vez se quedaba más y más lejos, la bicicleta aceleraba y la adrenalina empezaba a correr por mi cuerpo, se sentía el aumento de los latidos de mi corazón, cada vez estaba más cerca, en el horizonte se empezaba a ver la rampa por la cual iba a saltar, apreté con fuerza el manubrio, mis piernas comenzaron a temblar, el sudor que bajaba por mi frente era tan frio como el hielo y...

Esta bicicleta es la última tecnología, tiene los mismos frenos que un carro, tiene la aerodinámica de un avión, es tan liviana como un radio y los materiales que la conforman soportan la velocidad del sonido.

Muy interesante, pero ¿para que sus materiales soportan la velocidad del sonido?

No tengo idea, seguro esto es solo para decir que resiste mucho, quizás para que alguien que practique algún deporte extremo con una bicicleta.

¿Un deporte extremo?

Bueno, pues el ciclocrós, el BMX, entre otros…

La verdad esta interesante su modelo aunque me falta un poco de dinero.

Joven creo que esta de suerte porque este modelo tiene el 30% de descuento.

Algo se ha pegado en mi cara, siento una fuerte migraña, ese golpe fue como si estuviera en un cuarto oscuro y prendieran la luz, acerco mi mano con mucho cuidado de no perder el equilibrio y busco palpándome es objeto que me golpeo, lo llevo ante mis ojos y ¡valla! Es una simple hoja. ¡Monten más soportes! Gritaron, miro a frente y como un golpe en la cara veo que estoy a solo unos metros de la rampa, mi corazón late tan rápido que siento como si se me fuera a salir, escucho que cortan la cuerda y lentamente siento como las llantas cambian de rodar en el cemento a rodar en la madera, una presión empuja mi cuerpo contra la bicicleta mientras subo por la rampa, escucho cada crujido que genero al pasar por la dura madera intentando volver al suelo con mi peso, estoy volviendo a tomar velocidad y salgo disparado como un misil hacia su objetivo, la llanta trasera por fin sale da la madera y ahora me empuja a girar, veo mi manos tomando el manubrio con fuerza y el cielo azul, es como si hubiese salido con un ángulo de 90%, el sol me ciega y…

Muchachos ya se que necesitamos hacer para entrar en la lista negra.

¿En la lista de los inmortales destructores del instituto?

Sí, tenemos que hacer que alguno de nuestra banda salte una rampa en bicicleta para que llegue al segundo piso.

¿El que está abierto al frente de la zona 1?

Sí, el que salte llevara en su espada la bandera de nuestra banda y la izara.

¿Quieres decir que entramos al “balcón” del director y cambiaremos la bandera del instituto por la de nosotros?

Exacto.

De un momento a otro me detengo, he chocado con el borde del segundo piso, me desprendo de la bicicleta como el cartucho de una bala, ella sigue rayando la baldosa y yo me desplomo alejándome cada vez más de mi objetivo.

Bueno amigo, ¿estás listo?

Creo que nunca he estado más preparado.

Ok. Esto es lo que aremos esperaremos a que todos salga a comprar y caminar por la zona 1, en ese momento pedalearas con toda tu fuerza, bajaras por la rampa de los discapacitados, y finalmente tomaras la rampa que hemos instalado para que saltes.

 Entendido.

Suena un gran golpe, ¡sí! ha dolido y todo se está nublando, no sé que vaya a pasar pero ya me estoy arrepintiendo…

Vamos ya es hora.

Lose, lose ya estoy pedaleando.

Necesitaras más fuerza.

No creo, déjenme así como voy, en la bajada ganare la que me hace falta.

¡Miren! a la velocidad que va. Creo que se caerá. Tiene como objetivo subir la rampa. Bla bla bla… (Murmullos)

¡Que Viva Up And Down Pick!

O por Dios! No alcanzo, llamen al director o a una ambulancia.