Tomala...

Capitulo 12 - Alejandro

Capitulo 12

Alejandro

Angela no hablaba con nadie, estaba muy triste y no me ha dicho por qué, espero que no sea nada malo aunque últimamente no tengo tiempo para ella, la banda me esta exigiendo que nos reunamos mas seguido y que ensayemos más, todos mis colegas de la banda están angustiados porque en poco tiempo llega el festival “the wolrd tour Aresta” donde se presentan muchas jóvenes y nuevas bandas para ser patrocinados por la gran empresa y para darse a conocer ya que es transmitido por la televisión y muchos de los grandes productores musicales son invitados para sus búsquedas de talentos, este acontecimiento es esperado por todos inclusive muchos géneros a parte del Rock, Metal, Hardcore y Pop intentan participar y traen a multitudes de personas para que vean el concierto, todos enfocan su atención en este acontecimiento y nuestra preocupación es mostrar lo que hemos avanzado ya que todas las veces nos presentamos, nunca hemos ganado pero el solo hecho de escuchar a toda esa gente es una gran recompensa, las emociones explotan en tarima y la adrenalina sube, todo es perfecto cuando tocamos no existe nada mas en ese momento y cuando son mis solos de guitarra mi cuerpo entra en un nivel único de sensaciones las cuales nunca antes había sentido antes de tocar la guitarra, el show es genial y siempre traen a una banda reconocida para abrir el espectáculo, todos gritan y diría que es lo mejor que pasa en esta ciudad, existen otras atracciones que abren todos los días y otras que solo vienen casualmente pero entre todas esas la mejor es el “the wolrd tour Aresta”.

La banda progresa cada vez mas, todos practicamos y nos apoyamos para estar bien preparados para el evento, lamentablemente todos están muy tensos y algo irritables lo cual le ha quitado un poco de diversión al ambiente, mi preocupación crece por saber que esta pasando con Angela pero no tengo tiempo ni de dormir, estoy ensayando un solo para el final pero es muy difícil y no he podido interpretarlo, mis dedos se resbalan constantemente lo que nunca me había pasado y me pregunto si es por los nervios o es por mis preocupaciones por Angela. Todos los días por las noches lleno la tina y me relajo, este es el único momento que tengo para disfrutar el tiempo, me pongo a pensar en Angela y que le habrá pasado, a veces no puedo ni dormir pensando en ella, cuando me levanto intento tomar café para dispersar mi mente con la cafeína, además me pone activo y eso me permite soportar el día, todos estos días son duros, me levanto llego al instituto y practico guitara, apenas salgo voy almorzar y vuelvo para seguir practicando, generalmente llego a la casa horas antes de la media noche, lleno la tina con agua caliente y intento hacer que mi cuerpo descanse; mis compañeros también sufren lo mismo, pero casi nadie se queja ya que todos deseamos con ansias la presentación que puede significar todo el futuro de nuestra carrera musical, a veces me encuentro con Angela por fuera del instituto pero la sigo viendo muy triste y yo no soy capaz de decirle nada, quisiera motivarla pero no quisiera meterme en sus temas ya que no me ha contado, si me contara intentaría ayudarla pero definitivamente no ha de ser de mi incumbencia.

Hoy llegue tarde al instituto ya que otra vez no paso el transporte y el carro de victoria estaba fallando, deje el carro en el estacionamiento y cuando mire el reloj me di cuenta de que llevaba media hora de retraso así que decidí no asistir a la primera parte de las clases, camine por los alrededores del instituto y me encontré a Alejandro que estaba fumando en el suelo, me senté al lado de el y le pregunte: - ¿Por qué tan solo? El me miro y respondió: - ¿Solo? Y cuando termino de decirlo se empezó a reír, no entendía por que se reía pero decidí quedarme callado, el me miro y dijo: - Todos creen que necesito compañía cuando en realidad no se dan cuenta que estoy completamente acompañado. Yo respondí: - Entonces me retiro, veo que no necesitas de mi compañía. El dijo alegremente: - Por fin alguien que lo entiende. Me levante y mire hacia los lados diciendo: - Definitivamente aquí no hay nada que hacer. Camine hacia el salón donde practicábamos, cuando entre note que no había ningún ruido, el salón estaba en condiciones perfectas para practicar mi solo, tome mi guitarra y la conecte al amplificador, tome mis audífonos y me los puse, empecé a practicar y cuando llegaba a la mitad se me resbalaban los dedos, continuamente seguí intentándolo pero casi siempre se me resbalaban los dedos, cada vez que lo intentaba era mas frustrante, cuando me canse me dirigí a apagar el amplificador y Alejandro dijo: -  ¿Qué haces? Lo mire y le dije: - Practico guitarra El: - Si, eso ya lo se, me refiero a por qué quieres apagar el amplificador. Yo: - Porque ya termine. El: - No me parece, te he estado viendo y aun no has terminado. Yo: - Pero ya me canse. El tomo una silla y se sentó mirándome y dijo: - Vamos tienes que practicar la presentación es en poco tiempo y tú estas flojeando. Yo: - Bueno es cierto hay que intentarlo otra vez. Empecé a ejecutar el solo pero siempre que llegaba a la mitad se me resbalaban los dedos y cuando alguien te esta mirando es aun más frustrante, lo intentaba y lo intentaba hasta que el dijo: - Ya veo. Yo: - ¿Ya ves qué? El: - Pues cual es tu error. Yo: - Y ¿Cuál es? El: - Que eres muy acelerado. Yo: - pues el solo tiene esa velocidad. El: - Lo se, pero me refiero a que debes ejecutarlo más lento, así no se te resbalaran los dedos. Yo: - Pues para hacerlo empecé lento pero al subirle la velocidad pasa esto. El: - Sigue intentando en lento y veras. Lo intente pero al igual me canse y me descolgué la guitarra, el me miro y dijo: - Préstamela. Yo le di la guitarra y empezó a hacer unos ejercicios de calentamiento, algo básicos para alguien que se osara a cuestionar mis métodos de estudio, duro así alrededor de 10 o 15 minutos y me dijo: - Solo necesitas relajarte un poco. Solté una sonrisa de superpotencia y el empezó a tocar mi solo, no lo podía creer, lo miro una vez o eso creo y ya lo esta interpretando, y lo peor es que le modifico unas partes, estoy sorprendido pero lo peor de todo es que suena mejor. Me empecé a concentrar en lo que el tocaba y el los cambios que le había hecho y me siento bastante sorprendido, es genial como suena sin que se resbalen los dedos!, demonios cómo lo hizo.

Apenas término me dio la guitarra, prendió un cigarrillo y se fue; me senté a practicar con mas calma y vi como progresaba con mayor eficacia, pero cada vez que lo intentaba era recordando como el lo hacia, quede muy impresionado y pues ahora no me parece tan difícil el solo; practique como siempre hasta altas horas de la noche, encendí el carro y me dirigí a casa, mientras conducía pensaba en el solo y en las modificaciones que obviamente tome en cuenta, cuando estaba por llegar a la casa el carro se apago, lo intente prender de una y otra forma pero no fue posible, me baje del carro y mire que en mi bolsillo había un cigarrillo, sin pensarlo dos veces supe que el lo había colocado en mi bolsillo, también dejo un cerillo el cual frote contra el suelo para que se prendiera y así logra encender el cigarrillo, me senté en el suelo y fume un poco, despeje mi mente y me acorde de Angela, me pregunte como seguiría y como la ha afectado su situación, creo que ella es fuerte y soportara su dolor, ella tiene que tener su mente fija en los estudios y no debe preocuparse por nada mas; El cigarro se apago por la fuerte brisa y como no tenia mas serillos lo bote, me levante y sentí una fuerza en mi interior que me llevo a empujar el carro, no se porque surgiría pero pienso que seria por Angela, posiblemente me inspiraría lo que pensé de ella y esa fuerza que surgió era tan fuerte como para empujar el carro hasta la casa; Llegue a la casa y me fui directo a la cama, ya que me sentía muy cansado, no alcance ni a quitarme la ropa cuando caí en un profundo sueño.

Estaba en un cuarto lleno de humo y habían muchos fumadores, todos flacos y acabados, algunos cuando se les acababan los cigarrillos se fumaban las colillas que estaba tiradas en el suelo, era un lugar horrible de vicio y muerte, me fui abriendo paso entre ellos intentando buscar una salida, pero no podía ver nada, decidí irme por las paredes así encontraría alguna puerta mas rápido y con mayor facilidad, después de caminar 10 metros me canse por el humo que respiraba y empecé a toser, Salí corriendo intentando escapar de humor y colisione con una puerta, me levante del suelo y la abrí, parecía que no había humo así que entre, escuche un ruido de bisagras oxidadas y la puerta se cerro, empecé a mirar hacia todos los lados haber si encontraba a alguien pero el lugar estaba prácticamente vacio, no habían muebles no habían ventanas, no había gente solo existía una puerta detrás de mi, no intente abrir la puerta porque supuse que si se cerro “sola” alguien quería que estuviera en este lugar y no creo que dejara la puerta sin seguro para que yo me escapara, además prefiero estar aquí ya que puedo respirar con tranquilidad, de un momento a otro apareció una silueta de un hombre excesivamente flaco, escuche una voz en mi oído que decía: - Hola, mi nombre es Jonas. Gire agresivamente teniendo la esperanza de ver a quien me hablaba pero solo vi la puerta, entonces me toco el hombre y dijo: - Por qué tan nervioso? Gire mi cabeza para mirarlo, era un hombre que estaba cerca de ser un esqueleto, su tez era pálida y sus ojos negros, tenia poco pelo y era tan flaco que su piel dejaba notar sus huesos de una manera brusca y marcada, era como poner papel adhesivo sobre un tuvo; quite su mano de mi hombro y le dije: - Bueno si vienes a asustar a alguien no pretendas que este tranquilo. El Sonrió y asistió: - Bueno es cierto, pienso que te llevaste un gran susto ya que ese truco de que la puerta se cierra sola es uno de los mas efectivo para hacer que la gente pierda el control. Yo: - La puerta no me asusto de hecho me previno de tu venida y por eso no me asuste cuando te revelaste. El: - Un joven bastante inteligente pero no por mucho; estas en la habitación del “hijo perdido”, todos los que vienen aquí están destinados a vivir eternamente en este lugar. Dije con una sonrisa: - Menos mal que estoy de visita. El: - Piensas que bromeo? Yo: - No, pero no pienso quedarme aquí. El: - Bueno idiota entonces como piensas salir? Yo: - Venciendo al imbécil que tengo al frente. Los dos nos pusimos en posición de pelea y acercándome le mande un puñetazo que el bloqueo y me dio un derechazo el cual me noqueo…