s i e t e

133 30 10
                                    

Desperté sintiendo los rayos del sol sobre mi rostro. Habían unos brazos agarrándome suavemente por atrás. Una respiración sumamente relajada chocaba con mi nuca, causándome un poco de cosquillas; Reí tratando de no despertarlo. Sentí como se movía y gruñía despertándose, se acercó más a mí y rió.

-Estás despierto.- Comenté.

-Nah.. Sigo dormido.- Habló cerca de mi oído y un escalofrío pasó por mi cuerpo. Ambos reímos.

-¿Qué quieres hacer hoy?.

-Salgamos.- Propuso.

-Está bien.- Me dí la vuelta para verle a la cara.- Yo invito.

-Okey, pero en un rato más.- Sonrió y me abrazó fuertemente, haciéndome reír de ternura.

-Eres muy tierno.- Le devolví el abrazo cálidamente. Hay momentos en la vida que no quisiera olvidar nunca, éste es uno de ellos.

-Lo soy?.- Hice un sonido de afirmación y él rió. Ocultó su rostro en mi cuello, causándome más ternura.

Recién me estaba dando cuenta; Yo gustaba de Brendon, él gustaba de mí, me besó, dormimos juntos, pasó todo muy rápido. Alucinaba? No. Y esa era la mejor parte. No podía analizar correctamente todo lo que ha pasado estos últimos días. Claro.. Mi cerebro funcionaba para imaginar millones de cosas pero no podía procesar algo tan simple como eso. Qué contradictorio. 

-Quieres comer algo?.- Preguntó acariciando mi mejilla con una de sus manos.- Porque yo sí.

-Nah, prefiero morirme de hambre..- Dije riendo y él rodó los ojos mientras sonreía.- Bueno, vallamos si eso quieres.

Él se levantó de la cama y agarró mi mano para que lo siguiera, me hice el pesado y él se empezó a reír. Yo me reí de él porque era muy débil, a si que lo agarré y lo atraje a mí, haciendo que cayera sobre mí en la cama, abrazándolo.

-Idiota.

-Tú más.

Nos reímos, pero esta vez si nos levantamos de la cama, yo caminando y el colgado de mi cuello desde atrás mientras arrastraba sus pies. Le pedí que se sentara en la mesa y yo hacía el desayuno, aunque se negó y quería hacerlo él mismo, terminó por convencerme.

-Bien. Pero te ayudo.

-No, no!.- Me empujó hasta sentarme en la silla.- Tú siéntate cómodamente. Yo hago el desayuno.- Sonreí rodando los ojos y él me lanzó un beso para después desaparecer por la cocina.

Vaya chico que tuve que conocer. Sonreí por lo bajo pensando en lo rápido que pasó todo. Sigue siendo algo chocante para mí ser tan cercano a alguien, y además, así de rápido. Después de tanto tiempo de soledad, él llegó a revolverme la vida, la cabeza, el corazón. Qué loca puede llegar a ser la vida a veces.

Hallucination .ᐟ RydenWhere stories live. Discover now