Temblores

Capítulo 8: La última gigante

Alejandro:

Luego de que la madre de la hermosa gigante destruyera gran parte de la ciudad, detrás de ella llegó un ejército de gigantes listos para devorar a los humanos, hasta la reina comenzó a comer humanos ya que les encontró el gusto, pero obviamente debía comer más por su tamaño.

Pasaron los años y obviamente los gigantes llevaron a los humanos al borde de la extinción, pero poco a poco empezaron a encontrar maneras de vencer a los gigantes más pequeños con mi ayuda, así poco a poco me convertí en un asesino de gigantes experto.

Después de vencerlos a todos solo quedaba la reina. Para ella preparamos una súper trampa ideada por mí.

Los últimos humanos supuestamente estaban escondidos en una isla que era lo suficientemente grande que permitía que la gigante pudiera entrar completamente, pero en realidad todo el piso era falso y la hundiría poco a poco hasta la muerte.

El gran día llegó y el plan funcionó pero mientras la reina se hundía pegó un enorme grito diciendo "¡Sinai!" Quién sabe si lo escuchó. Algo sorprendente que pasó mientras se ahogaba casi muerta es que su enorme collar se le desprendió del cuello, esto provocando que su tamaño bajara al de una persona común y corriente, pero eso no evitaría que muriera ahogada. Tomé el collar antes que cualquiera lo tomara y lo rompí para evitar que la persona equivocada usara ese poder.

Sinai:

Ya habían pasado años y no sabía nada de mi madre, pero ella suponía que ya había tomado todo el reino y que los gigantes ya estaban apoderados de todo. Decidí ir al reino e ir a ver lo que mi madre había logrado, pero cuando por fin llegué.

No había rastro de mi mama, todo estaba destrozado como había imaginado pero habían gigantes muertos; Algo imposible de creer ya que las personitas no tenían el poder suficiente como para destruirlos. Seguí buscándola pero noté que tampoco había personitas en el reino. Me encontraba muy confundida, no sabía lo que había pasado. Continué caminando hasta salir del reino y crucé el mar, hasta que por fin encontré una isla.

Sentía como mis pasosgeneraban temblores; Cosa que me daba noción de tener más poder, a lo lejosvisualicé una civilización, cosa que me extrañó ya que daba por sentado que nohabía más humanos, así que decidí entrar y destruir todo, hasta encontrar a mimamá o una respuesta sobre su paradero