Capítulo 15: El nuevo mundo

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Sinai:

Tomé a las chicas que tenía escondidas en mi ropa y las lancé al mar para que así nadie se diera cuenta y como eran como hormigas nadie las vería.

Pasaron varios días navegando hasta que por fin pisamos la civilización, estaba impactada por lo mucho que había cambiado todo, nada era como antes, la gente vestía diferente, las calles no eran como las que vi cuando los ataque hace cientos de años, incluso habían extraños objetos que rodaban con personas dentro de ellas.

Leonardo:

La expresión de Sinai no era normal ante todo lo que observaba. Se mostraba asustada e insegura por todo lo que veía, cosa que me hacía preguntarme ¿Cuánto tiempo llevaba en esa isla?

Antes de ir a mi casa, la policía nos recibió ya que llevábamos más de un mes perdidos y que apareciéramos era un milagro. Hicimos los trámites en la policía y Sinai afirmó que no recordaba nada, sólo su nombre.

Luego de salir de ahí ella notaba que la gente la veía raro pero era justamente por como vestía, ropa rasgada y descalza. Así que la llevé a un centro comercial. Al entrar ella estaba asombrada por las luces, los televisores, la gente con sus teléfonos, no entendía nada pero por vergüenza no quería preguntarme. Ya en la tienda de ropa, un vendedor se le acercó con la intención de atenderla pero Sinai se asustó y por poco lo golpea pero justo antes de hacerlo se detuvo. El vendedor estaba tenso pero me reí y me lo tomé con humor.

Luego de eso llegó una vendedora y le pedí que la ayudara a elegir ropa y calzado.

Sinai:

El cuerpo de los gigantes es mucho más caliente que el de un humano y a pesar de que tenía tamaño de humana, aun mi cuerpo funcionaba como el de un gigante, por ende mucha ropa me incomodaba así que entre las prendas que elegí, la mayoría eran shorts, sandalias y blusas abiertas.

Después de comprar y ya estando vestida fuimos al apartamento de Leonardo. Era un apartamento promedio, no tenía nada en especial.

-Hogar, dulce hogar -Dijo Leonardo.

-¿Y vives solo? -Pregunté.

-Así es. Mis padres murieron en un accidente y bueno...

-Mis padres también murieron...

-¿En serio? Pero creí que no recordabas nada.

Me asusté pero supe salir de esa situación

-Quiero decir que murieron por que llevo muchos años en esa isla y no sé dónde están.

-No te preocupes. Pronto averiguaremos de donde y quien eres.

Luego de eso fuimos a comer y luego a dormir.

Leonardo me enseñó donde dormiría. Antes de acostarse él me dijo que pasarían por la ciudad para que conociera Londres y yo solo afirmé con la cabeza.

Luego de eso cerré la puerta de mi cuarto y me acosté a llorar. No sabía si era porque extrañaba a mis padres, extrañaba ser gigante o que en el mundo de los humanos hay demasiadas cosas. Me sequé las lágrimas y pensé en mi mama y me empezó a dar mucha rabia, sin darme cuenta una mariposa entró por la ventana y cuando la toqué se encogió al tamaño de una hormiga, esto me ayudó a comprender un poco más que mis poderes estaban ligados a mi ira y deseo de venganza.

TembloresWhere stories live. Discover now