Capítulo 14: Nuevo poder

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Pensé en usar a esos chicos como una oportunidad para escapar de la isla y quizá buscar una manera de recuperar mi tamaño, llevaba miles de años con este tamaño y repudiaba ser gigante.

-Yo llevo aquí unos meses. Naufragué ya que mi barco se chocó y soy la única sobreviviente y nunca he entendido por qué las cosas son gigantes. Pero son bienvenidos a quedarse –Les dije amablemente.

Leonardo aceptó mi invitación, mientras los otros seguían desconfiados.

Pasaron los días y las mujeres del grupo comentaban entre ellas lo mucho que desconfiaban de mí y los hombres se burlaban de mi vestimenta, solo Leonardo se sentaba a hablar conmigo, trataba de hacerme reír y demás. Al parecer le llamaba la atención, pero yo casi siempre mostraba una actitud fría, muy pocas veces me mostré alegre y era normal, aun sentía mucho rencor hacia los humanos.

Un día estaba en mi casa y unas 5 chicas fueron a molestarme haciéndome comentarios chocantes e hirientes. Yo solo las ignoraba y una de ellas en un arranque de ira ya que yo no le prestaba atención me empujó y muy molesta la golpee. En eso las 5 chicas molestas se dispusieron a agredirme pero cuando las toqué las 5 se encogieron a un tamaño muy pequeño. Tan pequeño como hormigas. No podía creerlo. En mi existía un poder que me devolvía las esperanzas de vengarme.

Me incliné, las tomé y las guardé en los pliegues de mi ropa, ya que no quería que me descubrieran, luego me encargaría de ellas.

En eso el barco estaba listo y nos dispusimos a partir. A las 5 chicas las buscaron por varios días y nunca aparecieron.

Leonardo me preguntó donde vivía y le confesé que perdí la memoria y no recordaba nada de mi pasado. El me ofreció la posibilidad de quedarme en su casa hasta que averiguaran de donde era y acepté.

Mientras andábamos, solo pensaba en mi venganza y en eso recordó a las chicas que tenía guardadas en su ropa.

TembloresWhere stories live. Discover now