Capítulo 12: Condenada por mil años.

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Alejandro:

El afanado día llegó. Sinai cuándo apareció pegó un fuerte grito para que supieran que estaba ahí. En eso el ejercito que estaba en frente de ella avanzó mientras el otro grupo corriendo se escabulleron detrás de ella hasta montarse en su pie y empezar a escalar. Mientras Sinai asesinaba al ejército, el grupo luchaba para subir ya que ella se movía mucho, varios caían y morían por lo largo de la caída. De 20 hombres que subieron solo 4 pudieron llegar al cuello. Cuando estábamos dispuestos a cortarla le dio comezón y con sus uñas sin darse cuenta destrozó a dos de los hombres. Solo quedábamos un soldado y yo. Con todas nuestras fuerzas comenzamos a serruchar el collar.

Al cabo de media hora lo logramos, el collar cayó y justo en ese momento ella había acabado con todo el ejército, poco a poco empezó a encogerse hasta quedar del tamaño de mí.

Sinai estaba confundida y asustada. El hombre que cortó conmigo fue corriendo a matarla pero lo asesiné antes de que llegara a ella. La gente corría eufórica a ver que la gigante estuviera muerta pero Sinai se encontraba sin ropa ya que se encogió sin ella. Tomé un pedazo de tela de la que ella tenía, la vestí y tomé el collar. Rápidamente busco algún caballo sobreviviente para huir de ahí.

Luego de días cabalgando los dos observábamos el rastro de muerte y destrucción que ella había dejado. Sinai se encontraba molesta conmigo pero a la vez agradecida porque la salvé. Al llegar a la costa nos montamos en un pequeño bote y Alejandro me dispuse a llevarla a su isla.

-Mejor mátame. No quiero ser una humana. Me da asco.

-Ese será tu castigo, ser lo que tanto odias.

En eso Lancé su collar al mar y este se hundió hasta perderse de vista.

Dejé a Sinai en su isla y me retiró condenándola a ser una humana para siempre.

1000 años después...

Un grupo de adolescentes se graduaban de la secundaria y para celebrarlo decidieron hacer un viaje en yate a zonas exóticas del mar atlántico. A uno de ellos llamado Leonardo le encantaba hacer buceo y un día frenaron en un claro y él se puso a bucear. En unos corales encontró un extraño collar que con una gema de color verde. Al subir lo escondió y continuó disfrutando con sus amigos.

Esa misma noche unatenebrosa lluvia los atrapó haciendo que el barco se tambaleara y quedará a laderiva. A la mañana siguiente el barco llegó a una isla y los 30 estudiantes sesorprendieron al ver que en la isla todo era gigante

TembloresWhere stories live. Discover now