Lucha | Teen Wolf #2|

Capitulo VI: Lo que la verdad esconde

No había visto a Derek desde la noche en la que el mato a su tío, había mantenido sus distancias por una razón, la tenia que aceptar el hecho de que el único familiar que le quedaba vivo, estaba muerto.

Y lo peor, es que el había tenido que matarlo. A veces, Scott se preguntaba si el seria capaz de hacer algo así, si Stiles se volviera malo, no se podía ver matándolo. Nunca.

No se creia capaz de poder eliminar a alguien tan importante para el de su vida, esa era la razon por la que todas las noches se preguntaba cual era ese precio que debia pagar Stiles al estar vivo. El sin duda lo pagaria por el, no tenia la menor duda de que daria su vida por la de Stiles.

La casa Hale, o lo que quedaba de ella, se veía tan espeluznante como la ultima vez que había estado allí. Junto a Lydia, luego de que ella encontrara el cuerpo de Kate Argent. Ese día fue en el que había descubierto que ella no era simplemente normal, pero no fue hasta  cuando casi perdió a Stiles, que descubrió lo que era. Una Banshee, la mujer que lamenta.

Derek también había parecido conmocionado por ese hecho, alegando que nunca había oído hablar de nada igual. Luego había desaparecido.

El interior de la casa era igual de espeluznante de cómo la recordaba, podía oír a Derek arriba, haciendo quien sabe que.

Hace unos meses atrás, el había hablado sobre la idea de mudarse a un apartamento debido a que el estado había tomado la casa hale. Este había prometido a ayudarlo, pero luego todo se había complicado y entreverado enormemente.

—¿Derek? —llamó mientras subía las escaleras

—¿Qué quieres? —preguntó, Scott abrió la puerta y entro a la sala. Al parecer allí había sido la habitación de Talía Hale, debido a que Derek pasaba horas y horas allí.

El se encontraba sentado en una vieja silla, con un libro a su lado, parecía viejo y antiguo. Se pregunto que seria.

—Ha pasado algo —dijo este— alguien nos ha atacado a Stiles y a mi...alguien que me ha estado llamando estas semanas.

—¿A que te refieres? —preguntó este, de repente atento.

—No lo se —dijo Scott pasándose una mano por el cabello—, este tío, Derek, dijo que todos a los que amaba morirían... ¿mataste a Peter cierto?

Derek asintió firmemente

—Lo hice —dijo este— lo que significa que alguien más quiere que estés muerto. Lo cual no es sorprendente.

—Vaya gracias —dijo Scott sarcásticamente— ¿Qué puedo hacer? ¿Cómo vamos a solucionar esto?

Derek se quedo en silencio

—Si el no se acerca es imposible, Scott —dijo Derek— somos hombres lobo, no la CIA.

Este suspiro y se sentó

—¿Cómo esta Stiles? —preguntó Derek luego de un silencio

—Esta bien, su padre le ha dicho que hoy no fuera a clases  y el me mando un texto—le dijo— esta viendo los vengadores y comiendo palomitas.

Derek rio

—¿Lydia? —preguntó, el no se había relacionado para nada con ella, lo cual resultaba curioso el hecho de que preguntara.

—Bien —dijo este— no nos juntamos, solo que fuimos a esa cita con Jackson, Allison y ella. Fue cuando recibí esa llamada y esa criatura que se parecía a un lagarto me ataco.

—¿Un lagarto? —repitió Derek— nunca dijiste que se parecía a un alagarto.

—Bueno, ahora te lo estoy diciendo —dijo este

Derek frunció nuevamente el ceño, concentrado en algún pensamiento que estuviera invadiendo su mente.

—Estoy seguro de que a esta criatura la conozco de algún lado, de pequeño —dijo este— pero no recuerdo de donde.

Scott se quedo sentado procesando también ese hecho.

—¿Crees que de alguna forma esa criatura este relacionada con la llamada de celular? —preguntó este

—No lo se, Scott —dijo este— si Peter aun estuviera vivo y no fuera un maniaco asesino, le hubiera preguntado a el. Pero esta muerto, así que eso dificulta un poco...

—Pero hay alguien a quien podemos preguntarle —dijo Scott.

—¿Quién? —preguntó este— Deaton?

—No, Talía Hale —dijo este— tu madre.

Ambos se quedaron en silencio

—Es imposible,  y lo sabes —dijo este— Peter escondió las garras de mi madre, no tengo idea de donde se encuentran.

—Existe alguien puede contactar con ella, alguien que la ha visto antes y que ya ha hablado con ella —dijo Scott

—Lydia —concluyó Derek

Lydia les había contado como ella había conseguido hablar con la madre de Derek, aun sin saber que era la madre de Derek.

—Siempre me pregunte como es que tanto Peter como mi madre podían hablar con ella —dijo Derek confundido— ella no los conocía, sin embargo, ambos fueron a ella.

—Talía para protegerla, y Peter para destruirla —dijo Scott— quizás, Lydia tenga alguna clase de relación tu familia.

—Tenemos que hablar con ella  entonces, ¿sabes donde esta? —pregunto Derek

Scott asintió

—En el único lugar en el que siempre esta cuando Stiles sale herido...junto a él.

Derek asintió.

—¿Por qué están separados? —preguntómientras tomaba su chaqueta de detrás de la silla— se que puedes verlo, ella se preocupa por el. Y le quiere.

Scott suspiro

—Hay algo que le he estado ocultando a Stiles todo este tiempo —dijo él

—¿Qué? —preguntó Derek

—La razón por la que Lydia y el no han estado juntos —dijo este— hicimos un pacto ese día en el hospital, una promesa. Una promesa que podría hacer que Stiles me odie para siempre. Y la cual podría destruir nuestra amistad.

Derek se detuvo en la puerta

—Entonces no tanda que enterarse nunca ¿no? —no era una pregunta, ambos lo sabían, Derek nunca lo traicionaría contando la verdad. Ni Lydia, ese secreto se mantendría por siempre entre ellos.

¿No?

........

Ninguno sabía que entre las oscuras y frías profundidades del bosque, dos pares de ojos los observaban mientras se subían al coche.

Uno de ellos, no era humano. Pero el que si lo era, ardía en un fuego lento de venganza, que estaba seguro de que cumpliría.

Aunque tuviera que morir en el intento.

—Tú espera, Scott McCall —susurro— dentro de poco, pagaras el precio de lo que eres...tú y toda la gente a la que aprecias. Me asegurare de eso.