Capitulo 53: ¿Abrazos?

209K 9.1K 5K
                                    

(Tyler )

Haley me observaba atenta, esperando a que me dispusiera a hablar. Pero no sabía cómo comenzar.

—Mira, un día Simon y tú, perdón, el primer día de clases, yo y tú... —nuevamente no sabía cómo seguir—. Tú y yo...

Sin poder llegar a mi punto me callé, intentando ordenar las ideas en mi mente. Esperé que Haley me gritara que continuara, pero esta seguía con la misma expresión en su rostro. No quería decírselo. En realidad, no quería hablar del tema. Había sido hacía más de un año atrás, y lo único que iba a producir ahora serían más problemas para Haley. Y no quería verla peor de lo que ya estaba. Con todo el valor que pude, se lo dije.

—Haley, no puedo.

Esta frunció levemente el ceño y luego miró al suelo en un largo silencio.

—Lo necesito, Tyler, y lo sabes —susurró, sin atreverse a conectar mis ojos con los suyos—. Necesito saber el porqué, aunque duela.

La tensión en el aire era notoria, y no sabía qué responder, qué decirle. Yo mismo me había metido en esto solo, no me había podido aguantar de afirmarle a Haley que recordaba nuestro primer encuentro, que no la había olvidado, tal y como ella creía. Imbécil. ¿Y ahora qué?

—Tyler... por favor —me suplicó ahora con los ojos fijos en mí.

Podía ver un brillo de ansiedad en ellos. Haley no iba a dejar esto de lado. Lo único que estaba haciendo era retrasar una verdad que iba a salir tarde o temprano. Pero mi problema era otro.

—Decírtelo ahora solo va a empeorar las cosas, Haley.

Un silencio. Esta abrió la boca para decir algo, pero justo Marie entró a la habitación sin siquiera mirarla. Tomó su cartera, que estaba encima de la cama, y se dispuso a buscar algo dentro. Haley tenía la mirada en el suelo, esperando que la castaña se largara de la habitación. Pero yo aproveché para irme de ahí.

—Voy a salir —fueron mis últimas palabras, y no me atreví a mirar a Haley, porque sabía que ella quería matarme en ese momento—. Lo siento.

Pero lo prefería así.

(Haley)

Al irse Tyler de la habitación solté un suspiro, echándome hacia atrás y cayendo en la cama. Todo era un enredo en mi cabeza. Aún no me creía que Tyler recordara nuestra primera y última conversación cuando estaba vivo. Por un lado, quería sonreír, pero por el otro me angustiaba no saber qué era lo que escondía. Mientras repasaba en mi mente toda nuestra conversación ya por cuarta vez, la voz de Marie llamó mi atención.

—¿Te sucede algo?

Levanté la vista negando, con la cabeza, conectando mis ojos con los suyos, que me miraron un segundo para luego seguir buscando en la habitación seguramente el CD perdido. Noté que este era el momento perfecto para intentar suavizar las cosas entre nosotras, así que lo aproveché. Necesitaba normalidad en este momento.

—¿Le preguntaste a Martha si lo vio?

Marie se bastó con asentir. Nuevamente un silencio inundó la habitación. Solo el sonido de los papeles, libros y lápices de Marie se notaban mientras ella buscaba entre sus cosas, bastante nerviosa.

—¿Dónde fue la última vez que lo viste?

Pensé que no iba a responderme, pero después de un momento lo hizo.

—En el jardín.

Ya lo sabía, pero me había sorprendido el hecho de que no me mintiera. Mi sorpresa fue evidente, así que Marie no tardó en proseguir.

Mi Ángel Guardián II: La mentira mataKde žijí příběhy. Začni objevovat