1.-El comienzo

1K 40 4
                                    

Pov. Victoria
Me encontraba en mis clases de manejo de la espada, se preguntaran por qué siendo mujer se me permite, bueno la razón es que cuando mi padre sea llamado a la presencia del Altísimo yo tomaré el trono y tengo que conocer de todo, no puedo permitir que me consideren débil ante los enemigos, y no es por alardear pero cuando hago algo me gusta ser la mejor.

Ana: Mi princesa -Dijo mientras hacía una reverencia -Su majestad solicita su presencia en la sala del Trono.

Victoria: Gracias Ana, iré ahora mismo, creo que hasta aquí termina clase.

El maestro de espada hizo un reverencia y se retiro del lugar, mientras que yo me quite el equipo de protección que utilizaba, me encamine a la sala del trono acompañada por Ana unos pasao por detrás de mi, le hice una seña con la mano para que se acercara.

Victoria: ¿Por qué su majestad solicita mi presencia?

Ana: No me han informado, lo único que se es que llego una carta del palacio Topkapi, luego de leerla su majestad se puso como loco y pido hablar con la Reina, y ambos decidieron llamarla a usted.

Asentí mientras me adentraba en el salón, ahí estaban mis padre esperando por mi, hice una reverencia al llegar, su majestad pidió que salieran todos para luego hablar conmigo.

Edmund: Mi bella y adorada Victoria, la luz de mi vida y la alegría de mi existencia. -Dijo acercándose a mi.

Victoria: Padre. -Dije con una sonrisa- ¿Qué ocurre? Te noto preocupado.

Edmund: Recibí una carta del Palacio Topkapi -Lo miré e hice un asentimiento para que continuará.- El sultan me ha dado dos opciones, la guerra o una alianza. -Dijo girando dándome la espalda.

Victoria: Nuestras tropas son buenas, pero el Sultan tiene aliados y su ejército es mayor, y bueno también cuenta con el apoyo de todos sus hijos -Dije viendo a mi madre que se mostraba inexpresiva. -Lo mejor para nuestro pueblo es crear una alianza.

Edmund: Conoces la forma de crear alianzas.

Victoria: Bueno, por mi pueblo haré lo que sea, es mi deber.

Edmund: No voy a obligarte a que te cases con uno de sus príncipes.

Victoria: En algún momento debo de casarme y si esta unión es importante. -La voz de mi madre me interrumpe.

Elizabeth: Ellos no tienen una sola mujer, no serás la única, habra más, tendrá hijos con otras, nosotros no somos así, tú no eres así. -Dijo viéndome a los ojos.

Edmund: Quiero que estés preparada, lo más probable es que no vuelva de esta guerra y deberás asumir el trono.

Victoria: Podemos evitar la guerra, déjame intentarlo, si no estoy cómoda, prometo volver e ir a la guerra contigo.

Edmund: No lo se, no estoy seguro, no quiero obligarte a hacer nada.

Victoria:No lo haces, yo quiero hacerlo. -Me di la vuelta y me acerque al ventanal. -Responde al sultan y dile que iré ahí, que intentaremos la alianza, cuando este ahí hablaré con él y le haré conocer nuestras condiciones. -Dije con voz segura.

Elizabeth: No hay manera de convencerte ¿Cierto?

Yo solo negue, mi padre se dirijio al escritorio, tomó un trozo de pergamino y tinta y comenzó a escribir una respuesta, era oficial viajaría a Topkapi.

Pov. Victoria
Apenas dos semanas después me encontraba viajando al palacio Topkapi con Ana como mi única acompañante, mi padre y el sultan habían llegado a un acuerdo, pasaría desparcibida las primeras semanas dentro del palacio, conmigo viajaban cuatro guardias, y tres de mis damas, ellos se quedarían en una casa en el pueblo mientras que solo Ana (Mi más leal dama e incluso diría que mi mejor amiga) me acompañaría, todo estaba planeado llegaría como si fuéramos unas esclavas compradas por la Sulta Hurrem, única esposa del sultan, para el harén de alguno de los príncipes.

Solo el sultan, la sultana y yo conoceríamos mi origen, todo con el fin de que las demás sultanas no tratarán de aprovechar mi posición para atacarse entre ellas, cuando me enteré de esto lo único que pude hacer fue rezar a Dios por no meterme en problemas.

5 minutos después el carruaje se detuvo a unos metros de la entrada del palacio donde uno de los agas (Como los llaman ellos) me esperaría para llevarme dentro de lo que para mi se convertiría en un jaula.

La Princesa Heredera (Mehmed Y Hümaşah)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora