Tras La Puerta Del Infierno [Remastered]

Capítulo 11.

*Aiden Marsh en la foto*

La ciudad de New Hollow no era como William la recordaba. Quizás, porque jamás la había visto por la noche. Quizás, porque jamás había estado en aquella zona de la ciudad. Quizás, porque había crecido y tenía una perspectiva diferente de cuando era más pequeño.

El club nocturno era bastante bohemio para el gusto de William. Aun así, la música estaba bastante bien. Ahora que no huían de Almas guardianes de internados sobrenaturales, los muchachos echaron un vistazo a la vestimenta de las brujas. Éstas llevaban vestidos de noche abiertos por la espalda y tacones de mediana altura. Iban preciosas. Eso no podía negarse.

- ¡Vamos a entrar! -Exclamó Duke, levantando los brazos.

- ¿Quieres esperarte? -Olivia negaba con la cabeza, a pesar de no poder dejar de reír- ¿Cómo quieres entrar con nuestras identificaciones?

- Oh, cierto... Casi se me olvida.

Olivia y Katia cogieron las identificaciones de los muchachos y cambiaron mágicamente la fecha de nacimiento, haciéndolos mayores de veintiún años. Ahora ya podían entrar. Una vez adentro, se dirigieron a la barra, donde se tomaron un vaso de Martini blanco con limonada. Después de celebrar su escapada, se dirigieron a la pista de baile.

La música meneaba las extremidades de los muchachos como si de la compulsión de los vampiros se tratase. Las copas fueron volando y la ebriedad se hacía latente en los muchachos. Pero, entonces, William le vio. Ahí. Mirándolo con sorpresa. Mirándolo con esos ojos que tanto lo enamoraron una vez. William se tensó, comenzando a hiperventilar. Y las luces del local comenzaron a parpadear.

La gente empezó a emitir un fuerte entusiasmo. Los encargados del local fueron a verificar qué iba mal con las luces, ya que no debían parpadear. Duke fue el primero en darse cuenta del estado de shock de William, mirando hacia dónde el castaño estaba mirando. Al ver al muchacho, recordó la fotografía que William le había mostrado unas horas atrás.

Varias horas atrás...

- Sé que salimos para olvidarnos de Aiden, pero... ¿Podrías contarme más sobre él? ¿De qué lo conoces? ¿Por qué saliste con él? ¿Cómo descubriste que te gustaba?

- Es un vecino del pueblo que siempre ha cuidado de mi. Tiene diecinueve años actualmente y, bueno, está en la Universidad de New Hollow estudiando literatura. Un día, me peleé con un compañero de clase y, cuando algunos de nuestros compañeros se pusieron de su lado para pegarme, Aiden los zurró a todos, sacándome de allí. Mientras me limpiaba la sangre de mis heridas, la cercanía de nuestros cuerpos, la calidez de su voz y su torso desnudo, ya que estaba usando su camiseta de trapo, creó una corriente eléctrica que sacudió mi cuerpo. En ese momento, lo besé. Y, resultó que él también llevaba tiempo queriendo besarme. Así que salí del armario, oficializando nuestra relación. Mira, esta foto es de hace 16 meses y 20 días... Nos la hicimos antes de que lo pillara con el otro chico.

Duke observaba al muchacho junto al castaño. Éste tenía el cabello castaño claro y los ojos azules. Además, tenía una barba afeitada de varios días. Sonreía ampliamente, mientras abrazaba a William, quien besaba su mejilla. Ambos parecían felices y enamorados. ¿Por qué se liaría con el otro chico, entonces?

En el presente...

- Maldita sea... De todos los locales que hay en New Hollow, tenía que estar en este...

- ¿Qué ocurre? -Preguntó Olivia, mirando hacia donde William y Duke miraban.

El cambiaformas se interpuso entre el brujo y el que parecía ser el amor de su vida, empezando a hablarle.