CAPITULO 1

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Rex

Estaba de camino a la institución, miraba por la ventana de la limusina que me llevaba, el cielo azul completamente despejado me llenaba de satisfacción, al igual que ver un día nublado y con una brisca refrescante. 
Ya me encontraba a pocos kilómetros de la preparatoria, mis padres están bastante emocionados ya que faltaba tan poco para que terminara la preparatoria, y futuramente la universidad, y ya tenía en mente la carrera que quería elegir, psicología, siempre me ha encantado, desde pequeño preguntaba cualquier cosa relacionada a esta, y con facilidad me enamore.

- Ya estamos cerca joven Rex, tome su mochila de mucho favor. 

Asentí con la cabeza, mirando por el retrovisor al chófer, su nombre es Damian, un perro ovejero de bastante edad, pero siempre ha sido muy cortes y responsable. 

- Gracias Damian, nos veremos pronto, vaya a casa con cuidado.

Salí de aquella limusina, mirando como partía rumbo a mi hogar, para luego posar mi mirada a aquella enorme preparatoria que no dejaba de sorprenderme siempre que la veía, tan grande y majestuosa, cualquiera podría confundir a esta con una mansión, o incluso un gran hotel, pero no, era la preparatoria de mayor demanda de mi país, gracias a mi ingenio pude ganarme un merecido puesto aquí... Pero antes, les explicare un poco sobre mi vida... Vivo en una zona altamente millonaria, cualquier persona que camine por aquí es por el echo de que es millonario, incluyendome a mí y a mi familia, la cual solo esta conformada por mis padres, y yo... Y claro, las personas que trabajan allí, haciendo los labores de la casa, entre otras miles de cosas más.

Ah, por cierto, soy un tiburón de una estatura promedio, 1.78. Soy uno de los alumnos con mayor promedio e inteligencia de la academia, además de ser el líder de un equipo de voleibol, conformado únicamente por alumnos de mi aula. Hemos competido contra otras escuelas cercanas, y siempre hemos salido victoriosos, gracias al esfuerzo de todos.
Mientras en mi personalidad... Suelo ser muy humilde y cortes, no crean que soy el típico ricachon abusivo, qué cree que es mejor al resto de gente. Aunque haya tenido la suerte de tener esta vida, siempre he sido humilde con todos, inclusive a los lugares que he viajado, pero la gente a veces nos observan como los "dueños del mundo", diciendo cualquier cosa de indirectas hacía mi familia.

Dejando de lado las presentaciones, estaba ya cerca de mi aula, esta no quedaba tan lejos de la entrada de la escuela, lo cual agradecía, ya que es fácil perderse por aquí.

Al entrar, mire como había una bola de estudiantes murmurando algo. Entre sus murmuros escuche "el chico nuevo" y "no es igual que nosotros", ¿chico nuevo? ¿No es igual a "nosotros"? Sinceramente decidí dejar todo eso de lado, y simplemente ir a mi butaca, y esperara a que las clases dieran inicio.

- ¡Hey Rex! ¿Ya te enteraste del chico nuevo que vendrá? - era mi amiga Diana, venía entusiasmada como siempre. Ella era un linda lince.

- No del todo. Al entrar sólo escuche unos pequeños murmuros de eso. ¿Ya saben de quien se trata? - me negó con la cabeza. 

- Aun no se sabe nada de él, pero tenemos la suerte de que se integra a nuestro aula.

- Pues vaya suerte, ¿eh?

Ante ese comentario echamos una pequeña risa. Diana y yo siempre no la pasamos juntos, ella sabe a la perfección cada pecado y delito que he cometido, claro, es una forma de decir, al igual que yo sé cada cosa de ella, y siempre estamos por ahí diciendo cualquier tontería que se nos ocurra.

Después de un rato, las clases dieron su inicio, el primer profesor llego, pero junto a él se hallaba el ya famoso chico nuevo del que tanto se ha hablado. Me sorprendí un poco al verlo, era un gran león, y no miento con lo del gran león, porque realmente era grande, fornido y con una gran melena, típica de ellos.
Además, pude notar que el uniforme que portaba era distinto al resto, este se veía de una tela más sencilla a la que portamos, al igual los colores azul y negro eran más claros.

- Buen día alumnos, como ya sabrán, hoy se integra un nuevo alumno a esta institución, y ustedes tienen la suerte de tenerlo en el aula. Por favor, sé amable de presentarte. - dijo el profesor, se le notaba lo entusiasmado.

- Un gusto a todos, mi nombre es Leonardo. Espero que seamos buenos amigos de hoy en adelante.

Todo el salón estaba lleno de murmullos, entre ellos se escuchaba: "se nota que es diferente a nosotros", algunas chicas simplemente decían: "¡Que guapo! ¡Un gran felino al fin aquí!" Entre otras muchas más que de verdad no quiero ni mencionar acaso.

- Muy bien Leonardo, ahora toma asiento por favor, la clase comenzara en breve. ¡Ah! Y consigue los apuntes. 

El león observo en el aula en busca de una butaca vacía, y para mi fortuna, justamente detrás mío se hallaba una, y la única que había. Suspire, viendo como se acercaba hasta que se ubico detrás mío, aunque antes de eso, ambos chocamos miradas, un poco extraño e incomodo para mí.
Saque lo necesario para esta clase, por suerte tengo a Diana a mi lado, esta sólo me miraba y soltaba una risa burlona, ella sabe perfectamente que no me gustan estas situaciones, me incomoda muchísimo. 

...

La clase había dado a su fin, algunos se levantaron de su lugar y fueron a hablar con sus amigos, yo sólo me recargue en la butaca, esperando con mucha tranquilidad la siguiente clase, pero ante tanta relajación, alguien decidió interrumpirme, tocando mi hombro. Voltee la mirada, y me sorprendí, había sido el nuevo quien toco mi hombro, ya había olvidado su presencia. 

- Un gusto... - al decir eso, pude notar algo de vergüenza y pena en su mirada. Tan grande pero penoso... Puede que me agrade - Me preguntaba si podías pasarme los apuntes que tienen; sé que son unos cuantos, pero si me los prestas prometo terminarlos pronto - no respondí ante dichas palabras, regresé mi mirada al frente, pude escuchar un leve quejido de "decepción" deduzco, pero como dije antes, soy o suelo ser humilde con todos. 

- Ten, son las primeras que necesitaras - regrese la mirada al felino junto con algunas libretas - Y no te preocupes, tomate tu tiempo, son bastantes, y será mejor que los tengas cuanto antes - ante dicho acto, al león se le alzaron las orejas de alegría - Aparte, soy Rex, un gusto chico nuevo. 

Sonreí al decir lo ultimo, Leonardo se apuro en anotar unas cuantas cosas, mientras yo, me volví a relajar en la butaca, esperando al profesor, pero una pregunta se vino a mi mente... ¿A qué se refieren con "diferente" a nosotros? Pff... Será mejor no tomarle importancia, es algo que a mí, me da igual.

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¡Nueva historia! Espero que les guste este inicio. 
He estado pensando un poco en la historia, y si todo sale como lo tengo estructurado, sé que les gustara tanto como a mí escribirla. 
Además, ya saben, problemas con las portadas que muy pero muy lejanamente se corregirán ( ya saben, no somos capaces con las portadas ) Pero en fin... Espero que les haya gustado, si es así, voten y comenten. Un saludito, ¡adiós!




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Entre mundos distintos. ( Furry/Gay )Where stories live. Discover now