Bang Chan se creía un chico malo.
Hasta que su corazón comenzó a ser conquistado por un chico que desborda ternura.
―Soy el tipo de chico por el que tu mamá lloraría.
―¡Hyung, no haga llorar a las señoras!
⌯ bangchan top, felix...
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―Tienes que estar bromeando Lixie ―Jisung miraba incrédulo a su menor, este negó sonriendo mientras comenzaba a dar saltos hacia su casillero―, no es una buena idea.
El pelinegro abrió su casillero sacando rápidamente su libro de literatura, es la misma clase que comparte con Bang Chan―. Es una buena idea hyung ―asomó su cabecita sobré la pequeña puerta de su casillero viendo a su hyung―, así ayudo a Bang Chan a ser más educado y yo consigo un nuevo amigo.
Antes de que Jisung pudiera decir algo en contra de ese plan, Felix se fue dando pequeños saltos hacia su aula.
Después de ver que Bang Chan si dijo gracias aún cuando se negó mucho pensó que podría hacerse amigo del más alto pero eso si, tendría que ayudarle a ser más amable. Tomó asiento en su lugar, estaba claro que no lo cambiaría además sentarse junto a Bang Chan ayudaría a que se hicieran más cercanos.
Diviso al castaño entrando al aula, apenas lo vio levanto su mano para saludarlo. Bang Chan solo frunció el entrecejo confundido por la actitud del menor.
―Buenos días Bang Chan-ssi ―saludó tiernamente el pelinegro.
¿Se cayó de la cama hoy? Pensó el mayor―.Hola.
―Tiene que responder con un "Buenos días"
―¿Vas a llorar si no lo digo?
Felix formo un puchero y cubrió su rostro con ambas manos―. No es algo que puedo controlar ―Siendo honesto, al pelinegro le fastidiaba eso de él, no quería ser un llorón, quería ser un hombrecito fuerte y valiente.
―Buenos días ―Bang Chan quería evitar a toda costa hace una escena provocada por el llanto del menor, además de no querer volver a experimentar ese horrible sentimiento al ver los ojos del menor llenándose de lágrimas.
―¡Falto la sonrisa! ―algunos de los demás alumnos voltearon a ver al dúo por el pequeño reclamo del pelinegro, los rumores no tardarían a comenzar al ver a Bang Chan interactuar con alguien que no es su grupo de amigos, sumándole el hecho d que esa persona era la más tierna del instituto―.Tiene que sonreír.
Ni siquiera comprendía porque no podía negarle algo al pelinegro, aún con su llanto no debería importarle si lo hace llorar, no debería sentirse la peor persona del mundo por ver los ojos de Felix llenándose de lágrimas, no debería ser ni siquiera su compañero de asiento―. ¿Si sonrió te callarás y no me molestaras más? ―la respuesta emocionada de Felix no tardó en llegar.
Bang Chan suspiró cansado de la situación, lo haría solo para ya no soportar al menor -Buenos días Felix-. Y como el menor pidió, una linda sonrisa adornó su rostro notando la sorpresa en el rostro del más bajo -¿Ahora dejarás de molestarme?
Felix asintió con sus mejillas sonrojadas llevando su vista hacia su cuaderno -Ya no lo molestaré, por el resto de la clase.
