62-Más antojos

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*Dani*

Las pataditas de Aitana llevaban días siendo más constantes, y aunque por un lado me encantaba sentirla, por otro me asustaba por el tema de que ya estaba encajada y eso significaba que seguramente sería prematura.

Estaba deseando tenerla en mis brazos, pero quería que tardará lo máximo posible en nacer para que no hubiese ninguna complicacion.

Los chicos habían venido a casa, acababan de acabar la gira de verano por Estados Unidos y antes de que empezasen los entrenamientos en unos días habíamos hecho una barbacoa en casa.

Mientras que pedri y ferran seguían comiendo, fermin y Pablo se hacían unos largos en la piscina y yo estaba sentada en la piscina con los pies en el agua para coger un poquito de color mientras hablaba con Carla.

-Entonces pues me ha dicho que mejor el viernes-me dijo y yo asentí escuchándola.

-¿Y qué tal con Ferran?-Le pregunté y ella sonrió de forma efímera.

-Muy bien-me dijo y yo sonreí mirándola.

-Muy bien-la imité poniendo voz de boba y ella rió dándome un golpe en el hombro- estas enamoradisima-le dije.

-Habló la que va a traer una mini Gavi en un mes y medio-me contestó y yo reí a carcajadas al escucharla- Por cierto, ¿ya sabes que vas a prepararle por su cumpleaños?-me preguntó y yo negué haciendo una mueca.

-No se que regalarle, es que tiene de todo el capullo-me quejé y ella miró mi panza bajándose las gafas de sol.

-Ponte de parto ese día y regalo asegurado-me dijo y yo reí asintiendo.

-Si, como si yo pudiese decidir cuando va a salir Aitana-le dije irónica.

Gavi se acercó a nosotras nadando y se alzó un poco con los brazos apoyados en el bordillo para besar mi barriguita.

-¿De qué habláis tanto cacatúas?-nos preguntó y Carla le tiro agua en la cara ofendida-Amor, defiendeme que soy el padre de tu hija-me dijo Gavi volviendo a mojar a Carla y esta pegó un grito ofendido.

-Pablo Martín Páez Gavira voy a dejar a tu hija huérfana de padre, ¡que no me quería mojar el pelo!-se quejó echándole agua mientras Pablo reía.

-No vas a dejar a mi niña huérfana-le dije a mi amiga y ella me miró haciéndose la ofendida.

-¿Estás conmigo o contra mi?-me preguntó y yo reí mirándola.

-Está conmigo, que por algo soy el padre de su niña y su futuro marido-zanjó Gavi rodeando mi cintura y una sonrisa ñoña apareció en mis labios.

-Me voy con los chicos porque me parece muy fuerte-dijo Carla de broma saliendo del agua y dejando un beso en mi cabeza dejándonos a Gavi y a mi solos.

-¿Qué te apetece cenar hoy, cariño?-me preguntó Pablo y yo cerré los ojos pensando, aunque llevaba días con un antojo enorme.

-Almejas salteadas-dije relamiendome los labios y el frunció el ceño, porque no es que me gustasen especialmente.

-Pero si nunca te han hecho gracia-me dijo él sorprendido y yo me encogí de hombros.

-Parece que Aitana se parece a ti-le dije peinando su pelo y el sonrió orgulloso.

-Pararé a comprarlas y te las preparo-me dijo y yo sonreí asintiendo.

Nos salimos del agua y jugamos un rato a las cartas en el Jardín todos juntos, me encantaba que pasáramos tiempo todos juntos.

Los chicos acabaron yéndose a casa casi a la hora de cenar, y Gavi acercó a Pedri y a Fermin ya que no habían traído coche y ferran y Carla habían venido en el dos plazas de Carla.

Yo aproveché ese rato para ducharme y relajarme en el sofá, los últimos meses de embarazo se me estaban haciendo cuesta arriba y con cualquier cosa que hiciese me cansaba muchísimo.

*Gavi*

-Mamá, ¿como se hacen las almejas salteadas?-Le pregunté a mi madre desde el teléfono después de soltar a los chicos en su casa.

Mi madre rió a carcajadas al escucharme.

-¿Tú vas a cocinarlas?-me preguntó con ironía y yo rodé los ojos,¿por quién me tomaba? Desde que estaba con Dani había mejorado mucho mis dotes culinarios.

-Pues claro, Dani tiene antojo asique he parado a comprarlas-le dije.

-Ay madre mía Pablo, quien te ha visto y quien te ve cariño-me dijo con voz de emocionada y yo sonreí mirando a la carretera.

Tenía toda la razón del mundo, quien me ha visto y quien me ve.

-Mira, te comento....-empezó a explicarme como podía hacerlas.

Y al final, cuando llegué a casa Dani estaba sentada en el sofá con el portátil acabando algo del trabajo y yo me metí en la cocina siguiendo las instrucciones de mi madre al pie de la letra.

-Cariño, a comer-le dije a Dani cuando ya estaban listas.

-Voy-me dijo con la vista fija en el portátil mientras pasaba unos documentos al ordenador.

Termine de poner la mesa, y Dani seguía pegada al ordenador.

-Amor, vamos-me quejé y ella asintió mirando el portátil, asique tuve que optar por acercarme y cerrarle la tapa del portátil haciendo que me mirase ofendida.

-¡Pablo!-se quejó.

-A comer he dicho, mañana lo acabas-le dije y ella resopló, pero al final se levantó se la silla.

Trabajaba demasiado, me encantaba que fuese así de trabajadora pero sabía que se le iba a hacer raro cuando diese a luz a la pequeña y tuviese que darse de baja.

Se sentó en la mesa apartándose las almejitas y se metió una en la boca probándolo.

-Mmm...¡que buenas!-dije tocándose la tripita y yo sonreí como un bobo viéndola disfrutar-venga como tu también-me pidió y yo asentí empezando a comer, aunque con verla a ella haciéndolo yo estaba mantenido.

                              *******

-Si hubiese sido niño, ¿como te hubiese gustado llamarle?-le pregunté a Pablo acariciando su pelo mientras el estaba apoyado en mi pierna acariciando mi barriguita.

Ya estábamos metidos en la cama, y me encantaba el momento de intimidad que siempre compartíamos al meternos en la cama después de todo el día. Podíamos hablar sobre cualquier cosa en calma.

-Mmm..Hugo-me dijo-¿y tú?-me preguntó y yo sonreí.

-Martín-Le dije y el levantó la cabeza mostrando una sonrisa.

-¿Cómo yo?-me preguntó y yo reí negando.

-Tu eres Pablo-le dije.

-Y Martín-contestó él y yo sonreí acariciando su mentón.

-Me gusta Martín-le dije encogiendome de hombros y el sonrió mirándome.

-Pues lo siento, pero va a tener que esperar, porque después de Aitanita yo quiero otra nena-me dijo él y yo abrí la boca negando.

-Ni hablar, después de Aitanita más te vale que tengamos un niño-le dije señalandolo con el dedo y el negó riendo-¿Pero qué piensas hacer tu rodeado de mujeres haber?-le pregunté alzando las cejas.

-Disfrutar de MIS chicas-dijo señalándose a si mismo y yo reí rodando los ojos-sois mis niñas, lo más bonito y preciado que tengo, y si algún día os pasase algo creo que enloqueceria-me dijo acariciando mi mejilla.

-No va a pasarnos nada, Amor-le dije abrazandome a él y el asintió abrazandome más fuerte sin llegar a apretarme demasiado.

-Lo sé Amor, pero quiero que sepas que daría mi vida por la vuestra sin dudarlo-me dijo y yo sonreí robándole un beso.

-Te quiero-le dije y el sonrió.

-Te amo, mi vida-me dijo entrelazando nuestros labios en un cálido beso.

(CONTINUARÁ...)

¡Os leo!❤️🫶

JURAMENTO ETERNO DE SAL-PABLO GAVIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora