Después de una interminable disputa con mi subconsciente, de ir o no ir al instituto, decidí que lo mejor sería enfrontarme a Josh. Aunque palidecía tan solo recordar lo que había hecho en aquella odiosa fiesta. Al ver el reloj de mi habitación, me puse mi uniforme y salí corriendo al instituto.
Tuve que llevar mi cepillo de dientes y mi peine, para acabar de alistarme allí, ya que no disponía de mucho tiempo.
Al llegar al portal del instituto me encontré con un chico; con una sonrisa adorable, que moría tan solo verlo; un pelo sencillamente alborotado y una postura de despreocupación de lo más sexy. Ese era mi futuro chico. Mi Dios Sexy.
-Jessica tenemos que hablar- es lo que me dijo apenas entré, le sonreí, pero no podía hablar con él ahora.
-Hablamos luego ahora tengo que ir al baño- me escabullí de allí, y cuando iba de camino al baño me encontré con Kate que estaba hablando con unas chicas. La agarré del brazo y literalmente la arrastré al baño conmigo.
-Casi me arrancas mi hermoso brazo- dijo Kate toqueteándose su brazo.
-No seas exagerada, que no ha sido para tanto-
-¿¡Qué no ha sido para tanto?! ¡Si tango la marca de tu mano incrustado en mi brazo!- exageró.
-No digas burradas, y ayúdame a arreglarme- al decir esto, Kate empezó a sacar mi cepillo, la pasta de dientes, el peine del pelo, y un poco de maquillaje.
-Pásame primero el peine- me mojé un poco las puntas de mi cabello y empecé a desenredar mi melena.
-¿Y ya has hablado con Josh?- me preguntó Kate.
-Sí, hace un rato pero huí...pero tú- la señalé con el dedo- no me llamaste esperé a que me llamaras, pero nada.
-Lo siento, estuve en casa de mi abuela y no pude- se disculpó.
Cuando terminé de cepillar mi pelo, cogí mi cepillo de dientes y la pasta, deposité un poco de pasta al cepillo.
-¿Viste que bien se os veía juntos?- dije antes de introducir el cepillo de dientes en mi boca.
-Sí, pero Adam no ha dado indicios de querer hablar conmigo...-suspiró- además en la otra foto también se os veía bien a Josh y a ti juntos- me atraganté con la pasta de dientes, y sin acordarme que aún tenía la pasta en una mano, lo estrujé. Todo la pasta de dientes salió disparado y como si pasara a camara lenta cayó sobre mi cabeza.
-¿¡Quéé?!- grité como pude. Me negaba a creer que hubiera una foto en internet de Josh y yo, besándonos.
-Esto...era...una...broma- suspiré, pero me acordé de que aún tenía pasta de dientes en mi cabeza, mi cara empezó a enrojecer de la ira, y Kate al ver en el estado que estaba intentó escapar.
-Tú no te libras- le cogí del brazo y la obligué a que estuviera al lado mío- no puedo salir con pasta de dientes en la cabeza.
-Tendremos que lavarte el pelo
-¿De cuánto tiempo disponemos?- pregunté.
-Mierda, tenemos tan solo un minuto antes que toque el timbre.
Intentamos quitar toda la pasta que había en mi cabeza, peo era imposible, parte de aquella pasta se estaba secando y era imposible quitarlo del todo, la pasta empezó a mezclar con el resto del pelo y ya no había nada que hacer.
-Jess no tenemos otra solución que salir así- me dijo Kate, examinando mi pelo- ¿Y si te haces una moño?
-No puedo mi pelo está muy tieso- empecé a ponerme nerviosa.
YOU ARE READING
Simplemente: eres odioso
Teen FictionJessica Brooks es la chica más complicada del mundo. Todo empieza con su obsesión con el "Dios Dexy", que hará lo que sea necesario para conquistarlo ¿Tendrá consecuencias? Jessica Brooks y su mejor amiga, son la alma de la fiesta, y nun...