Simplemente: eres odioso

Kate, la matona

*Aquí os dejo un pequeño resumen de lo que ha pasado por si habéis perdido el hilo de la historia*

Kate actuaba a de una forma extraña con Jess. Marie, la madre de Jess, le pide que le lleve a Will al pediatra. Después de que casi semidesnudarse enfrente del doctor, vuelve a casa. Allí Kate le manda un mensaje diciéndole que encienda las luces de su casa (extraño) los enciende y se encuentra con mucha gente allí...

(Leer la nota final)

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-¿Qué hacéis en mi casa?- pregunté en voz alta, sujetándome de la barandilla.

De pronto vi que Mel se abría paso entre toda la multitud de gente y puso sus dos manos sobre mis hombros.

-Jessica despierta- me miró fijamente- sabes perfectamente que día es hoy.

-No, no lo sé.

-¡¿Es una broma, verdad?!-gritó a lo lejos Kate.

-No- volví a contestar- ¿Qué diablos pasa?

-Hoy es tu cumpleaños- me informó Mel, sacó su móvil del bolsillo y me muestró el calendario

Estamos en diciembre, si hoy es mi cumpleaños hoy es día 7. Y eso también significaba que también es el cumpleaños de mi abuela.

-Oh, Dios...mu...muchas gracias- les agradecí a todos, después de haberme enterado que era mi cumpleaños ¿Genial, no?

Un rato después cogí mi móvil, era muy raro que no sonara el aviso que informava que hoy era mi cumpleaños...Estaba desactivada ¿Pero cómo?

Todos los años me ponía una alarma para que no se me olvidara de que hoy cumplía años junto a mi abuela. Todos estos años poniendome una alarma, para nada, que asco de memoria.

Y lo que más me extrañaba era que nadie se había dignado a felicitarme en mi instituto.

-Feliz cumpleaños guapa- me dijo Josh a escasos centímetros de mi rostro.

-Gracias...- le dije de la misma forma, pero lo aparté delicadamente con mi mano- ¿Se puede saber por que el señorito aquí presente no me había dicho que hoy era mi cumpleaños?- se giró y miró a Kate.

-Kate me amenazó que me callara y no fui el único... amenazó a medio instituto para que no te felicitara hoy- me dijo.

-Aish muchas gracias feo- le di un abrazo de oso que me correspondió con gusto, hasta que alguien se aclaró la garganta.

-Hija querida- me apartó papá de Josh con sigilo (padre protector) me reí - te queremos dar tu regalo.

Me entregaron un regalo enorme, en forma de rectángulo, me agaché y después de haberlo abierto vi que era una maleta, los miré.

-Mira dentro de la maleta- me indicó mamá.

Apenas lo dijo miré dentro de la maleta ¿Un sobre? Lo abrí y mis ojos no daban crédito a lo que estaba viendo ¡Un billete para Hawai! Levanté mi vista y me abalancé hacia ellos para agradeciéndoles el regalo.

-Gracias, gracias, gracias- los besé en toda la cara sin importarme que estaban contaminados de gérmenes no identificados, vale ahora si que me da asco.

-Bueno, se lo tendrías que agradecer a tu padre que ha sido él quien me ha convencido- me dijo mi madre.

-Gracias papi- le besé en la mejilla.

-De nada mi niña...pero no creas que mi hija de dieciséis años estará sola por Hawai, nosotros también iremos pero tu serás libre para descansar sola-me contestó.