|Un Amor del Pasado.| Harry y tú | {ADAPTADA}

Capítulo 11

Maratón 2/3

Narra Harry Styles

Los chicos planearon lo de ir a su instituto para ver a ______ y la idea era que yo me quedaría a comer con ella y con Tracy, para que yo estuviera más tiempo con ______ y la verdad no me molestaba la presencia de Tracy, pero el dolor de estomago que tuvo fue muy raro, no sé porque siento que fue otro plan de los chicos.

-¿Cómo te gusta la pizza?-le pregunté.

-Con salsa de tomate-reímos-Lo siento, me gusta mucho la romana.

-A mi igual-sonreí-Pediremos esa-asintió.

-Oye, ¿y si la pedimos para casa?

-¿Qué?-la miré-¿Acaso no quieres estar conmigo?

-¡No!-dijo rápido-Por Dios como puedes decir eso-le sonreí-Solo que no tengo nada de ganas de sentarme aquí a comer. Comamos en mi casa.

-¿En tu casa?-la miré.

-Sí, ¿pasa algo?

-No sé... Con tus padres... Ellos no me conocen demasiado y no quisiera importunar-rió.

-Mis padres salieron hoy de viaje, la casa está vacía.

-¿Vacía?-pregunté nervioso-Entonces mucho menos ¿Y si tus padres se enteran? ¿Y creen otra cosa? No, no. No podría con eso-ella solo rió.

-Tranquilo Hazza. No pasará nada, los chicos siempre van a mi casa cuando no están mis padres y no pasa nada malo. A mi madre no le importa, ella los conoce.

-Pero a mí no-volvió a reír.

-Pero te ha visto, y si eres amigo de los chicos, pues confiará en ti. Ninguno es malo. Vamos Hazza-suplicó.

-Está bien-suspiré. Me acerqué a pedir la pizza romana para llevar, luego caminamos de vuelta al coche, le ayudé a montarse y luego me monté yo para arrancar hacia su casa.

Narra ______ Blair

Me pareció demasiado raro eso de Tracy, todo eso de sentirse mal, pobrecilla, me dio cosa dejarla irse así. Luego entré en la pizzería con Hazza y pedimos una romana. Le convencí de ir a comer a mi casa, no me gusta mucho sentarme a comer en público.

Al llegar a mi casa me ayudó a bajarme del coche y luego yo me adelanté para abrir la puerta y le dejé pasar primero. Él llevaba la pizza.

-Traeré un par de vasos con Coca-Cola, acomódate donde quieras-él asintió. Yo entré en la cocina y serví unas latas de refresco en dos vasos.

Saqué un par de servilletas y las llevé al salón. Hazza estaba sentado sobre el sofá viendo la televisión esperando mi llegado.

-Hola- dije sentándome junto a él. Me sonrío y tomó los refrescos de mi mano para colocarlos en la mesa. El abrió la caja de la pizza y tomó el primer pedazo ofreciéndomelo.

-Primero las damas-sonreí y tomé el pedazo de pizza.

-Um…-dije mordiendo el primer bocado-Está deliciosa-asintió y comenzó a comer él también. Mientras comíamos hablábamos de muchas cosas. Era tan divertido hablar con él…

-Recuerdo el día de la resaca-rió-Te levantaste paranoica creyendo que…-cayó unos segundos. Comencé a reírme.                                                                                                                                        -Creyendo que me había acostado contigo-completé por él riendo por lo bajo.

-Vaya eso fue difícil de escuchar-reímos.

-Sí, pero no pasó.

-Exacto-me sonrío. Nuestras miradas se volvieron a encontrar.

-Y-volví a tierra- ¿Tan bonita es Italia?

-Hermosa-dijo tomando otro pedazo de pizza-Es muy hermosa, de verdad. Todo allí me parece tan perfecto-sonreía mientras lo escuchaba-¿Sabes? Siempre he soñado en llevar a la mujer de mi vida allí. Un viaje para nosotros dos.

-Qué hermoso eres-le dediqué una gran sonrisa. Él rio por lo bajo-Y cuando dices eso, ¿hablas de la chica de cuando eras pequeño?-no sé porque al decir eso me desanimé por completo. Extraño, ¿no? Él asintió.

-La verdad... Sí. Siempre he soñado con ir a vivirme a allí con ella.

-Genial-dije muy sarcástica, un escalofrió recorrió mi cuerpo. Me sentí mal de repente.

-¿Sabes? Aún no olvido que debo llevarte a Roma-sonreí inmediatamente.

-Claro, siempre y cuando sigas soltero porque si no esa chica se molestará-él rió.

-Te puedo jurar que ella no se enfadará-acomodó un mechón de mi cabello detrás de mi oreja. No pude evitar sonreír.                                                                                                                                 - Tienes una sonrisa hermosa, ______.

-Gracias-me sonrojé-Tú también-él rió por lo bajo.

-Gracias-le sonreí y luego me levanté y llevé la caja de pizza a la cocina con los dos vasos vacíos. Luego volví a sentarme junto a Hazza.

-¿Quieres ver una película? ¿O quieres irte?

-¿Querer irme? ¿Por qué querría irme? Lo estoy pasando muy bien-yo mordí mi labio inferior. Era tan hermoso... Me aproximé a colocar una película.

-¿Cuál quieres ver? Tengo varias.

-¿Tienes ‘’A tres metros sobre el cielo’’? 

-Sí, claro que sí. Es mi película favorita.

-¿En serio? La mía también.

-Genial-la tomé y la coloqué en el DVD.

Luego me senté en el blanco sofá para ver la película. Mientras la veíamos yo me iba acomodando más junto a él, hasta que me permitió que pusiera mi cabeza sobre sus piernas, recostándome yo en el sofá mientras él me acariciaba el cabello.

Narra Harry Styles

Conversé un gran rato con ______ mientras comíamos la pizza, ella era muy hermosa, es perfecta. La quería mucho. Ella sugirió poner una película y tenía “A tres metros sobre el cielo” Es mi película favorita, ¿y qué mejor que esa película para verla con la chica qué más quieres? Dejé que acomodara su cabeza sobre mis piernas y yo le acariciaba el cabello mientras veíamos la película… 

-Que final más bonito, ¿no?-dije al terminar la película.

-Sí, es muy hermoso-dijo levantándose mientras se estiraba un poco.

Cuando por fin se sentó bien quedó muy cerca de mí. Nuestras respiraciones se sentían, no había prácticamente distancia entre nosotros. Tengo que admitir que el deseo que tenía de besarla era muy fuerte. De verdad, demasiado fuerte.