Estaban en casa de Julieta arreglando las invitaciones que debían entregar. La abuelita amenazo a Eduardo de no estar a solas con su nieta hasta que se casaran. Este refunfuño pero acepto si más reproches.
— Aun me siento culpable que tus padres te odien por mi culpa.
Eduardo la atrajo a su cuerpo y la abrazo — Tú no eres culpable de nada.... Ellos solo querían que su hijo hiciera mejor las cosas.... Siempre me consintieron más que a mis hermanos, tal vez por eso siempre dicen que soy el consentido, pero a mí no me importa, si ellos me odian.... Quiero estar contigo y mi hijo. No los volveré a dejar solos.
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El día de la boda llego y Julieta lucia hermosa con su vestido.
Julieta sentía su corazón salir de su cuerpo, mientras caminaba por la pasarela. Al final de ese camino de rosas estaba el hombro, al que le ha dedicado sus suspiros, sus sueños, anhelo e ilusiones, todo el amor que hay en su cuerpo siempre seria solo para esa persona.
Los padres de Eduardo se tragaron un poco su orgullo y asistieron a la ceremonia.
En el banquete Lucas se acercó a su hermano — Felicidades Eduardo, me siento orgulloso de ti.... Espero que con esto asientes un poco tu cabeza y madures como se debe.
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Inevitable
Teen FictionJulieta es una adolescente de 16 años romántica, la cual se a enamorado de su apuesto y sexy vecino 10 años mayor que ella. Daniela una joven quinceañera, con sueños de ser una bailarina de ballet. Lucas un hombre de 30 años divorciado, pero que aun...