La sultana Sharazad

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Narra Aysel

Días después volvimos a la capital y los días transcurrieron con normalidad.

El sultán no solo anuncio que Murad gobernaría una provincia, también anuncio que Mehmet lo haría también.

Al correr las noticias muy rápido la sultana Beyhan visitó la capital para felicitar a sus sobrinos.

Pero alguien más también tuvo la intención de visitar la capital.

-Mirate nada más, eres el príncipe mas apuesto de todos, no me sorprendería que las muchachas del Harem fueron torturadas por tu presencia-

Beyhan no paraba de elogiar a mí hijo y yo solo me limitaba a reír, ya que Murad se estaba sintiendo avergonzado.

-Madre debo irme, prometí a Selim y Bayaceto que los ayudaría con el arco-

Ante esas palabras mí hijo se retiró de mis aposentos y yo me dispuse a hablar con Beyhan.

-Debes estar muy orgullosa de el-

-Por supuesto que si y el lo está también-

-Tu has estado bien? Escuche que fueron al palacio de caza, te dije que si seguías por el mismo camino traería beneficios-

-Atención, la sultana Sharazad está aquí!-

Ante ese anuncio quedé petrificada.

La sultana Sharazad, tercera hermana del sultán suleiman y la más cercana a Mahidevran y la sultana Hatice.

Me asome al balcón de mis aposentos y efectivamente la sultana Sharazad estaba en la entrada del palacio, bajando del carruaje dirigiendo al interior del palacio.

-Que hace ella aquí?-

-No lo sé, probablemente Hatice o Mahidevran le hallan pedido que viniera- dijo Beyhan mientras miraba a su hermana.

Debido a ciertas circunstancias del pasado, mí relación con la sultana Sharazad no era muy buena, al menos nos respetamos y no era mí enemiga.

La sultana Sharazad entro en mis aposentos, Beyhan y yo nos levantamos pero solo yo me arrodille ante ella.

-Beyhan, Aysel, me alegra mucho verlas después de tanto tiempo- se notaba que lo que estaba diciendo no era verdad y esa sonrisa en su rostro era falsa.

-Que te trae a la capital hermana?- pregunto Beyhan.

-Hatice me invitó a visitarla a su palacio, pero antes quería pasar por aquí para ver al resto de mí familia, sobretodo a mis sobrinos, por cierto como estás tu Aysel, me enteré que Murad pronto será gobernador de una provincia, Allah lo cuide y lo protega del mal-

-Allah mediante sultana-

La sultana Sharazad no se quedó mucho tiempo en mis aposentos, ya que debía irse con la sultana Hatice.

-Sigue igual que siempre- dije con notable desprecio, olvidándome de la presencia de la sultana Beyhan.

-Si, ella no cambia, pero debes cuidar tus palabras Aysel, mí hermana por desgracia tiene más poder que tu, y tu no eres...-

-Hurrem, si, lo se-

-Aysel no quería iba a decir eso-

-Por favor sultana no sé intente engañar, se bien que no intenta herirme con sus palabras pero esa es la verdad-

La verdad era despreciable, pero debía aceptarla, Hurrem tenía más poder yo y tenía más posibilidades de enfrentarse a alguien de la dinastía y salir ilesa qué yo.

Al caer la noche, Azra me estaba ayudando a prepararme para dormir, pero tocaron la puerta y Furkan entro.

-Que quieres Furkan?-

-Sultana lamento molestarla a estas horas pero la sultana Sharazad desea verla-

Me quedé sorprendida por las palabras de Furkan.

-Dile que entre y vallanse ambos-

La sultán Sharazad estaba frente a mí con una expresión neutra.

-Que la trae aquí sultana?-

-No vendría aquí si no fuera importante Aysel, vine aquí ha pedir tu ayuda-

Eso sí que me tomo desprevenida, de todas las personas en este palacio, la sultana Sharazad pedía mí ayuda.

-Sultana no sé ofenda, pero por qué yo brindaría mí ayuda a la persona que intento matarme?- dije, recordando en una ocasión que por desafiar a la sultana, por órdenes suyas, un sirviente intento acabar con mí vida y no hubiera salido ilesa de no haber sido por Furkan.

-Se que hemos tenido nuestras diferencias en el pasado, pero no te lo pediría si no estuviera desesperada, Hatice ya solo se enfoca en destruir a Hurrem por la muerte de Ibrahim, Mahidevran no tiene poder alguno ya que ya no es más la directora del Harem y solo tu puedes ayudarme-

-Si usted no hubiera llenado la cabeza de la sultana Hatice con palabras llenas de su rencor, no hubieran pasado todas las cosas horribles que la atormentan y si le hubiera dado a Mahidevran su apoyo talvez le sería útil, pero ahora viene aquí pensando que podrá controlarme, solo porque soy una esclava y usted una miembro de la dinastía otomana-

-Te daré lo que quieras a cambio de ayudarme, puedo incluso ayudarte a que tu hijo llegue al trono-

Al escuchar tales palabras salir de la boca de la sultana, incluso prometiendo eso, me di cuenta que sus palabras eran sinceras pero yo no confiaba en serpientes.

-Me temo que la ayuda que busca, deberá buscarla en otro lugar y con otra persona, no me importa tener otro enemigo en esta guerra sultana si eso es lo que planea hacer por no ayudarla-

Yo solo la mire sería y la sultana con ojos suplicantes intentaba convencer de cambiar mis palabras.

-Guardias!-

-Si sultana?-

-La sultana Sharazad se retira-

Al escuchar mis palabras Sharazad se retiró de mis aposentos y luego llame a Azra y Furkan.

-No quiero a la sultana Sharazad cerca de mis hijos, y si vuelve al palacio quiero que me lo digan inmediatamente para tomar las medidas necesarias contra ella, entendieron ambos?

-Como ordene sultana-

La Sultana Olvidada Where stories live. Discover now