iconic ; enzo fernandez

0047 | fidelidad

omnisciente
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Martina en Barcelona y Antonela en París tratando de hablar con su hija, Leo sabiendo donde está pero cubriéndola y Enzo sin enterarse de nada.

–Tu hija no tiene la ubicación activa —Antonela mira a su marido.

–Está con Madison, tranquila.

–¿Entonces por qué saca la ubicación? Yo ni siquiera sabía que iba ir a Barcelona, pensé que iba directamente a Londres... ella hace lo que quiere y solo te lo comunica a vos.

–Yo que sé, déjala en paz... con tal de que me avise, listo.

–En paz nada, no tiene porque mentirme a mi... yo solo quiero saber dónde está.

Antonela abre la aplicación de Air tag y el lugar que vé no concuerda con ninguna dirección que ella conozca así que peor se pone.

–Te digo yo que está con Madison, también con Gavi si ellos dos son como mellizos que todo el tiempo juntos... dejala —Leo la mira.

–Llamo a Gavi para preguntarle —señala a su esposo agarrando su teléfono—. Porque si llamo a Madi ella la cubre.

–¿Y que te hace pensar que Gavi no?

–Gavi jamás va a cubrir a Martina si se está mandando alguna, él si piensa... no como las otras dos inconscientes.

Al primer tono Gavi la atiende ya entendiendo el porque de la llamada y ya sabiendo que no va a mentirle bajo ningún termino.

–Perdón por molestarte pero Martina me está ignorando, no me contesta y es solo conmigo —dice al teléfono mirando a su marido—. ¿Sabes dónde está?

–Hoy estuvimos juntos toda la mañana, almorzamos y eso... pero después se fué.

–¿Con Madison?

Él no va a cubrirla pero tampoco va a mandarla al muerte. Así que un poco si iba a mentir.

–Debe ser, ellas siempre están juntas... debe estar con ella en casa de alguien.

–¿A vos te responde?

–Si.

–Bueno, decile que me responda a mi o la mato... gracias.

–Hecho, se lo digo.

Apenas la llamada corta Antonela empieza a creer que si está con Madison y su hija simplemente no quiere hablar con ella así que deja de molestarla.

Caen las nueve y media de la noche en Londres y Martina llega a la casa de Enzo, dónde Olivia la recibe con un abrazo fuerte y diciéndole cuanto la extrañaba.

–Oli, la vas a ahorcar si la abrazas asi.. hola Mar —Marta la saluda con una sonrisa.

–Hola, ¿Enzo?

–Está por venir... pero con Oli y Raúl nos vamos a cenar.

–Y... ¿Nosotros?

–Enzo dijo que no... pasen un rato juntos.

Martina asiente y ella le saca a Olivia de encima para ya irse y dejarla sola acomodando sjs cosas, y un poco los juguetes que la nena deja por toda la casa, hasta que llega Enzo con su mejor cara, nótese el sarcasmo.

–¿No que llegabas al medio día?

–Llegué recién.

–¿Y dónde estabas?

–En Barcelona, fui al entrenamiento, almorcé con Gavi, fui con Madison y unas amigas... ¿Por qué?

–¿Con Gavi? —Martina asiente—. ¿Y por qué tú mamá ni siquiera reconoce la dirección en la que estuviste toda la tarde?

–Porque no conoce la dirección de mis otras amigos... ¿Vas a seguir con el interrogatorio o vas a saludarme?

Se acerca y le da un cortisimo beso que ni siquiera lo siente de tal manera.

–¿Que te pasa, Enzo?

–Te encanta que esté atrás tuyo haciendo lo que querés, que no te contradiga, que te trate como reina y tenerme comiendo de tu mano... te encanta saber que me tenés siempre y hagas lo que hagas.

–¿Todo esto es porque fui a Barcelona?

–Esto no te interesa, lo nuestro... no te importo yo y solo te importa que alguien te haga sentir algo.

–¿Cuantas veces te tengo que decir que no es así? Dejá de pensar eso.

–¿Con quién estuviste en Barcelona?

–¡Con Gavi, Madison, Héctor, Fermín! —Martina levanta la voz mientras Enzo la mira fijamente—. ¿Cuantas veces tengo que decírtelo?

–No estuviste con ellos.

–¿Queres ver el chat con mi papá diciéndole dónde estoy? ¿O para más confianza ver las fotos que saque hoy?

Martina tira su celular desbloqueado sobre la mesa del comedor y Enzo lo ignora completamente.

–Para lo único que servís es para coger porque después sos una mierda... y hasta eso te lo enseñé yo.

–Yo no voy a tolerar que me trates así —lo señala negando con el dedo—. Me pedís perdón ahora o no me ves nunca más... y te juro que jamás vas a volver a encontrar a alguien como yo, todas las que te rodean son cualquiera.

Enzo solo la mira mientras ella espera alguna reacción o palabra de él la cual no sucede, así que vuelve a agarrar su celular y camina hasta la habitación para agarrar sus pertenencias.

–Perdón, me pasé —Enzo la agarra del brazo y hace que la mire.

–Si, te pasaste.

–Martina, perdón.

–Espero que todo lo que proyectas en mi, no sea lo que vos estás haciendo.

–¿Posta crees que te haría algo así?

Martina se encoje de hombros mientras abre los brazos bajo la mirada de Enzo.

–Ni siquiera somos novios igual, nadie tiene por qué serle fiel a nadie.

–¿No lo sos?

–No tengo por qué.

–¿Podemos olvidarnos de todo lo que acaba de pasar?

–¿Y vas a cambiar esa cara?

Enzo le sonríe, con esa sonrisa totalmente compradora, que hace que cualquiera le perdone lo que sea y Martina no es la excepción.

–Vuelven en como tres horas —Martina le sonríe.

–Mas que suficiente.

Enzo la toma en brazos para proceder a lo que se basaba su relación, lo único en lo que parecían entenderse y lo único que más compartían.

Aunque ella misma le aclaro, indirectamente, que no tenía porqué serle fiel y que, en realidad, no lo era él no creia que podía estar con otro porque él no lo estaba ya que no tenia la necesidad y no necesitaba a otra mujer porque con la que tenía le era más que suficiente.

Martina sabía que Enzo tenía razón en todo, pero la manipulación que tiene esa mujer es mucho más fuerte que todo, la capacidad de envolver a cualquiera y de hacerles creer su propia mentira es más que todo lo que podía sentir por Enzo si, obviamente, se animaba a sentir y se sacaba la coraza que la rodea.

Pero como siempre sucede, no se dan cuenta de lo que tienen hasta que lo pierden.

otra vez yoooo🫶🏻

que les parece? ya se que la odian, pero juro que va a cambiar

y Enzo si sigue así realmente va a terminar en el psiquiátrico