10

3.2K 136 1
                                    

Un recuerdo de aquel día vino a mi mente como una ráfaga

Ops! Esta imagem não segue as nossas directrizes de conteúdo. Para continuares a publicar, por favor, remova-a ou carrega uma imagem diferente.

Un recuerdo de aquel día vino a mi mente como una ráfaga.

En aquella mesa, había un hombre con 2 chicas muy atractivas, el me miro de manera seductora, su vista era llamativa, tenia unos ojos muy cautivadores que no te dejaban apartar la vista tan rápidamente. Asentí y agradecí, sonreí amable al hombre y decidí tomar el trago, cuando la tome no tarde en sentirme mareada, no sabía que estaba pasando. Todo comenzó a verse de color azul y pocos segundos después cuando abrí los ojos estaba de nuevo en la entrada del restaurante, pero estaba con ese hombre.

Mire a las chicas a mis costados, una era rubia y de ojos color café, tenía una peculiar sonrisa y la otra tenía pelo negro, tan oscuro como la noche y unos ojos color avellana. Quise preguntarles que estaba pasando, pero todo fue tan rápido, que ya nos encontrábamos sentados en una mesa que estaba en medio de todas las demás.

De nuevo volví a la realidad, todo tenia sentido, todo era culpa de Caroline.

— Claro, ahora lo recuerdo todo, é es el Diablo y era mi esposo— mire a Evan

— Así es, Lauren— asintio con tristeza

— ¿Porque nunca me lo dijiste?— cuestione con la voz entrecortada

— Mi trabajo es mantenerte a salvo y siempre a sido ese desde el día que te conocí, yo soy tu Ángel guardián, y me enamoré de ti, lo admito, no pude resistir no poder protegerte de él, así que borre tu mente cuando pasó todo— confesó Evan

— Sabes que tengo que volver con él, ¿Verdad?— lo mire pensativa

El negó.— No es tan facil como crees, Lauren. Para eso tienes que hablar con el Consejo y ya que soy tu Ángel tengo que ayudarte y hacer lo mejor para ti, así que... te facilitare las cosas. Ven toma mi mano, yo te llevare— Evan me extendió su mano, al instante me transportó a un lugar muy hermoso, donde había algunas personas que parecían ser importantes

— Hola Dioses, Diosas— Evan hizo una reverencia

— ¿Que es lo que necesitas Ángelical Evan?— cuestionó una de las Diosas con tono serio

— Diosa Mildra, necesito que escuche a alguien que viene conmigo— él me miro

— ¿Acaso te atreviste a traer a un mortal a nuestros aposentos?— él semblante del hombre se torno enojado

— Yo... Dios Lucas, ella tiene sus motivos— justificó Evan

— Déja hablar al muchacho Lucas, tiene sus motivos, ya lo escuchaste— pidió la otra Diosa en tono alegre y sonriente

Evan asintió.— Gracias Diosa Celeste. Como mi deber de Ángelical, traje a mi protegida a hablar con ustedes, ella necesita de su ayuda y ya que tienen más poder, son los únicos que pueden ayudarla— comentó apartandose de mi para que pudieran prestarme atención

— Hola,  mi nombre es Lauren y yo fui una de las esposas de el Diablo, para ser exacta fui la que acaban de cambiar, pero no fue por que quisiera, yo lo rechace porque fui amenazada por su actual esposa— confesé mirándolos

La Diosa Celeste me miro confundida.—¿Y porque ella hizo algo asi?

— Ella...— solté un suspiro— Ella descubrío que llevo al hijo del Diablo en mi vientre— solté sin más, provocando que todos los Dioses presentes quedaran helados

— Pero eso no puede ser posible, es algo nunca antes visto— dijo la Diosa Milda bajando de su silla

El Dios Lucas giro sus ojos.— No exageres Mildra, claro que ya ha pasado eso, solo que no en muchas ocasiones, es algo inusual. Pero esto es algo bueno, porque nos demuestra que por primera vez en mucho tiempo alguien amo al Diablo— Lucas me miro— Asi que te ayudaremos, pero tenemos que hablar con otro Dios que aún no está aquí

— ¿Alguien hablaba de mi?— cuestionó un hombre apareciendo— ¿Quien es está linda chica?— tomo mi mano y la beso

— Ella es Lauren, era una de las esposas del Diablo y está embarazada de Kian, ella quiere volver con él, ya que su actual esposa la amenazó y todos sabemos que eso está contra las reglas— le explicó la Diosa Celeste

El Dios Tristan asintió.— Cierto eso va contra las reglas, asi que tu no te preocupes nosotros arreglaremos todo

— ¿Y como planeas hacer eso Tristán?— cureosio la Diosa Mildra

— La pregunta no es ¿Cómo?, si no ¿Donde?, mira Lauren, nosotros no tenemos la autoridad de que con sólo chasquear los dedos hagamos que vuelvas con Kian, pero si él aún siente algo por ti y nos pide un cambio de esposa, tendremos que hacer el mismo ritual de siempre, ¿Te parece bien?— Tristan me miro

Asentí.— Si Dios Tristán, pero, ¿Como y en donde será?

— Nosotros hacemos un baile cada cierto tiempo, ahí te lo toparas, pero tienes que hacer que el te reconozca, ya que será una mascarada, y por cierto ¿Cuántos meses tienes de embarazo?— indagó Tristan

— Tengo 2 meses— mire mi vientre

— Muy bien ya está todo listo, será hoy por la noche— aseguró la Diosa Celeste— Esto es emocionante, siempre quise hacer esto

La Diosa Mildra la miro con una ceja levantada.— ¿Que? ¿Un baile?— preguntó riendo

— No Mildra— la Diosa Celeste giro los ojos— Hablo de juntar a dos enamorados

— Basta de charlas, Diosas— pidió Tristan— Ya todos sabemos que hacer, ¿Verdad?— miro a los demás y asintieron

— Manos a la obra— dijeron los cuatro al unísono

La Esposa del Diablo¹ [Saga Sangre Maldita]Onde as histórias ganham vida. Descobre agora