Capítulo 33

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Un simple gracias fue mi respuesta esa tarde

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Un simple gracias fue mi respuesta esa tarde. No me permití llamarla, ni tampoco transcribir las palabras que se acumulaban en mi cabeza. No me lo permití por muchas razones, la principal fue que a pesar de mi avance aún no había llegado al nivel que necesitaba para dejar de lado cosas tan básicas como esperar que el otro diera el primer paso. Y ahora sé que esperar que los demás decidan sólo tiene como resultado que una se queda estancada. Debí hacer las cosas como me dictaba mi corazón, sin buscarle tanta lógica a mis acciones y arriesgarme a lo que yo creía necesario. Pero no lo hice.

Natalia le envió el mensaje sin agregar más frases al respecto, aunque yo sabía que quería decir de todo, y prefirió cambiar de tema después del aire de melancolía para no arruinar lo que restaba del día. Sin embargo, a pesar de no demostrarlo, la idea de reencontrarme con ella con una invitación mía de por medio se sembró en mi cabeza sin darme tiempo de negarme a ello. Ya había esperado demasiado, estaba llegando el momento de cerrar ese capítulo en mi vida.

Sólo necesitaba un poco de valor. Un poco de valor y ya.

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La motivación que inyectó la entrevista y los números que causó fueron un factor muy importante para que las palabras posaran frente a mí sin mucha dificultad.

Avancé tanto como pude y los últimos capítulos no me dieron tantos dolores de cabeza. Creo que tener todo planeado ayudó a no hacerme bolas por la emoción y regarla. De igual manera no hubo recurso que me hiciera sentir satisfecha cada vez que publicaba en la plataforma, porque ver la historia irse entre mis manos no era como lo imaginé.

Mi mayor problema no era crearla sino sobrevivir a ella, darle un desarrollo coherente y un final digno. Y es que al verme tan cerca de la meta las cosas se complicaron, era como si me encariñara más con ella, se resistía a la despedida. No podía ponerme a quejarme por ello, ya tendría días enteros para hacerlo después, si es que el sentimiento nacía.

Una mezcla de emociones se encargó de hacerme sudar cuando me senté frente a la pantalla con el título del final. No sabía si estaba lista para cerrar un ciclo de esa magnitud, para decirles adiós a seres que tanto amé y me hicieron tanto bien, no quería volver a lidiar con no saber a dónde caminar. Sí, definitivamente no estaba preparada, y para ser honesta no lo estaría nunca.

Uno jamás está listo para poner el punto final a algo que te robó tanto y que te devolvió mucho más. Este libro era un antes y después en mi vida. Aquellas líneas se habían convertido en mi motivación para ponerme de pie cada mañana. ¿Qué haría con mi vida sin tener que encontrarme con ese mundo que me regalaba tanta paz?

Pero había que dejarlo ir, más allá de quererlo o no. Nada es para siempre y mientras más prolongues la despedida es más difícil dejar el barco. Y pese a que por decisión propia yo podría haberme quedado haciendo lo mismo todo lo que me restaba de vida, tuve que darme cuenta de que había llegado el momento de cambiar la hoja. Yo no era la dueña de las vidas de las personas involucradas en esa historia y no podía decidir arruinarlas por un capricho.

Margaret perdida en WattpadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora