12. ¿Qué tipo de chico eres?

219K 10.1K 2.6K
                                    

Escogí lo primero que encontraba en el armario, no estaba de ánimos para decidir algo que para mi era más que irrelevante. Una simple blusa negra con unos vaqueros negros eran más que suficientes, los zapatos eran unos vans que mi madre me regaló hace un año, decidí mantener mi cabello sin peinarlo hasta esperar que se secara por completo. Me arreglé lo más que pude, pero la cara de zombie no se me quitaba ni con eso.

-¿Estás lista?-la cabeza de Evan apareció justo detrás de mi puerta dejando ver un poco de su camisa blanca.

-Ya casi-dije insegura, sin esperar autorización, Evan se adentró a mi cuarto y se tiró de un salto a la cama. Lo miré confundida-¿Qué diablos haces, Valois?, nadie te ha dado autorización para entrar, ni mucho menos estar en mi cama, largo-dije con una señal de manos.

-No-murmuro, dió un giro sobre si para que su cabeza querdara pegada a mi almohada, escuché como inhalaba lentamente, no ví su sonrisa pero la percibí-Delicioso aroma.

Dando pasos largos llegué a su lado y tiré de la almohada haciendo así que su cara cayera directo al colchón, escuché un gruñido de su parte.

-No era necesario.

-Sí, si lo era. Muévete.

A regañadientes, Evan se puso de pie para desaparecer completamente de mi habitación. Me analicé de pies a cabeza tratando de encontrar algúna cosa fuera de lugar. La puerta volvió a sonar, por la irritación que sentí en ese preciso instante, alcancé un fransco de perfume y lo arrojé hacía el.

Cuando unos gemidos de dolor se escucharon supe que había cometido un pequeño error. Ups.

-¡Oh, dios mío! ¡Cuanto lo siento, Xav!-me acerqué a el para analizar su nariz-la cual había golpeado-que se encontraba completamente roja. Me sentí horrible, el solo mantenía sus manos en la herida, soltando gruñidos por el dolor tomé una de mis vendas y se la dí para que contuviera la poca sangre que salió de ella-Disculpame, pensé que eras...

-Evan, sí. Lo he notado.

-No sabes cuanto lo siento-dije tratando de convencerme que estaba bien.

-Mantente tranquila, solo ha sido una fractura de nariz permanente pero estaré bien-golpeé su hombro de modo juguetón, el esbozó una sonrisa carismática-No disculpame tú a mi. Vine aquí porque Evan estaba aquí y digamos que el no es muy santo que digamos.

-Comprendo...

-Espero lo hagas-cuando bajó su mano para liberar su nariz, pegué un salto de último momento cuando noté en la parte superior una marca lineal en ella de un rojo intenso. Parecía rodolfo el reno. Reí inconcientemente.-¿Qué?-preguntó al ver mi expresión, negué con la cabeza conteniendo las lágrimas.

-T-Tú...-la risa llegó a mi de tal forma que me corté a media oración, Xav en tres pasos llegó a mi espejo y gritó como nunca antes, mi risa se volvió más asentuada.

-¡Mi nariz!-aulló.

-¡Chicos, tengo a Rodolfo el reno en mi cuarto, vengan! ¡Y con una cámara!

Cuando llegamos a aquella fogata me sorprendí, más de treinta estudiantes logré observar. Animados, cantando de todo un poco, pero lo más importante: tenían burritos.

Los gemelos corrieron hacia unas chicas que se encontraban solitarias cerca de un árbol. Evan se quedó junto a mi, de la nada escuché murmullos extraños de su parte, cuando lo observé noté que su mirada se centraba en una de las mesas de comida.

-¿Hambre?-pregunté. No pasó ni medio segundo para verlo comerse todo el inventario.

-Hombres-dije resignada, sentí la mano de Xav deslizarse por mi espalda.

Lords & Ladies in Conflict  [MAMP#3]Where stories live. Discover now