-Ya está-

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Así que... ¿Esto es lo que se siente? ¿Esto se siente cuando una parte de tu corazón, la mayor que has tenido jamás, se separa para siempre? Estas lágrimas, estas ganas de desfallecer, este afán por querer sentir algún otro tipo de dolor para silenciar el que llevo dentro... ¿Así que esta es la explicación a todo? Hoy no me he despertado sabiendo que no podría dormir. Sabiendo que te vas. Sí, tú. Te vas y es un "adiós", ni siquiera un "hasta pronto". Ni nada que se le parezca. He actuado mal, ¿de qué me quejo? He provocado esto. Todo se ha torcido por mi manera de ser, o por mi testarudez. Te quiero y te pierdo. Ahora sí. Ya está. De hecho ya lo noto, ya lo siento... Dentro de mí la sensación es de que me estoy muriendo un poquito más deprisa que los demás. Empieza el pozo. Ni siquiera lo veo, ¿te lo puedes creer? Me has llevado tan alto, tan arriba que cuando miro hacia abajo sólo veo lo que hemos construido. Y total... ¿Para qué? Algunas fotografías, muchos recuerdos, miles de palabras juntos... ¿Dónde quedan? Allá abajo no. Arriba tampoco. Están (estaban*) a nuestro nivel, creciendo con nosotros, hundiéndose con nuestras caídas. Pero ahora yo debo descender porque así lo necesitas. No, no quiero escaleras, tranquila. Saltaré, saltaré cerrando los ojos y con suerte al llegar al suelo termine con mi vida alguna profunda herida. O con mala suerte, caeré justo en el pozo. Ese pozo que dejé tan cómodamente adaptado debido a la larga estancia en él. Ese pozo que si me vuelve a absorber... Bueno. Desaparecerá lo que se sabe de mí, lo que se conoce, lo que soy y lo que fui. Lágrimas. Dolor. Tristeza. Estoy mareado escribiendo esto, y no es broma. Siento que de repente el mundo sigue dando vueltas pero yo no, ya no. Ya no sigo el ritmo, ¿para qué? ¿Para quién? Respirar, sí... ¿Para qué otra vez? ¿Para quién otra vez? No voy a salir de esta y ni siquiera he entrado. Quisiera el control sobre la voluntad de vivir pues es mi total voluntad no seguir adelante, no ahora, no así. No quiero caminar si tengo que hacerlo sin ti. Espero que la gente sea feliz viviendo. Yo... respiraré. Sólo respiraré hasta el último aliento, esperando que llegue pronto mientras cruzo los dedos.

Libro de poemas.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora