𝑬𝒏𝒄𝒉𝒂𝒏𝒕𝒆𝒅. 𝐷𝑒𝑠𝑐𝑒𝑛𝑑𝑎𝑛𝑡𝑠

Primer capítulo

Había una vez hace mucho tiempo, bueno hace unos 20 años, Bella se casó con Bestia, así que en vez de ir de luna de miel, la Bestia intento unir a todos los reinos, dos o tres reyes se alejaron de los Estados Unidos de Auradon, Bestia se nombró rey, atrapando los villanos y sus secuaces, y los envío a la isla de lo perdidos, donde no hay salida.

Estoy segura que se preguntan, ¿Andalasia en donde quedó en esta alianza?, definitivamente el rey Edward se negó a encerrar en condiciones poco amigables a villanos, por más malvados que fueran.

Aquel mundo mágico confiaba y creía plenamente en la bondad del mundo, aún después de cada tropiezo, sin embargo a pesar de la diferencia de opiniones entre reinos, la princesa Amalie confiaba en el príncipe Ben, solo por ello consideraba a Auradon como un lugar en el cual terminar sus estudios.

— Hola...— Un pequeño niño castaño se acercó a una niña que lloraba silenciosamente abrazando a un enorme lobo; la chica se escondió en el animal y el animal gruño en respuesta ante la cercanía del niño.

— Soy Ben — La chiquita asintió mientras seguía aferrada al animal. Y susurro un "Amalie"

— Lamento como Audrey te hizo sentir — La niña fijó sus orbes brillantes en el chico frente a ella.

—Estoy muy orgullosa de quien es mi familia, incluso de mi abuela — Soltó la niña intentando demostrar valentía ante las burlas de aquella princesa.

— Tu familia es impresionante — El niño dijo sincero y dedicándole una sonrisa a su acompañante.

— No soy rara— Susurro la niña y el lobo permitió al niño acercarse a tomar la mano de la niña.

— Claro que no, tienes felinos enormes de amigos, incluso un oso, yo diría que eres muy increíble — El niño se sonrojadas mejillas expreso hacia la niña que sonreía abiertamente.

— Aprendí mucho de la tía Gisel— susurro la niña.

— ¿Sabes que aprendí a hacer? — La chiquita movió sus dedos con delicadeza y el pequeño árbol creció rápidamente convirtiéndose en un roble.

— Promete que no le dirás a mi papá, mi abuela dejo muchos diarios y los leí — El pequeño príncipe abrió la boca impresionado y asintió.

— En verdad eres increíble, seamos amigos — Grito el niño tomando ambas manos de la niña que no podía ocultar su rostro de emoción.

— Papá y tu papá no son tan amigos, pero, tu podrías ir a Andalasia y conocerás a Mia, Azul, Mati, amarás a Mati— El niño abrazo a la niña y ella correspondió emocionada el abrazo.

— Hagamos esto — La niña habló hacia su nuevo amigo que asintió, colocando su mano en su corazón.

— Seremos amigos a pesar de todo, y nos buscaremos aún y cuando nuestros padres no puedan ser aliados, soy Amalie, Marjorie es mi primer nombre, casi no lo uso, aún que tú puedes decirme Jo — La niña expreso y el niño asintió.