One Shots Male Reader [||][Pedidos Cerrados]

Tu atención - Spreen [M]

(HOLAA PERSONAS: perdón, ya no puedo con mi vida aaaaaaaaaaa, pero ya casi termina mi tortura, bueno, no del todo, termina el nueve de diciembre, pero se intenta ¡Gracias por tu pedido!)

Cada que lo miraba, se preguntaba si realmente era así todo el tiempo, al inicio, cuando apenas se conocían de vista, Spreen pensaba que era extraño.

Estaba más concentrado en sus cosas más que en conocer al chico que estaba curioseando el pueblo y saliendo a manos llenas de todas las tiendas que se cruzaban en su camino, sin duda, en el fondo de su mente, resonaban los lindos ojos en los cuales se reflejaban alegría y suma inocencia, algo curioso, ya que apenas si se llevaban un par de años.

De vez en cuando, ambos se acercaban para hablar de cualquier cosa, sacando conversación hasta de la manera extraña que tienen algunas gallinas para caminar por el lugar, se reían de aquello, aunque parecía que Spreen apenas quitaba su cara seria.

Spreen luego de varios meses, casi un año, para aceptar y aclarar sus sentimientos... noto un pequeño problema, sus intentos de llamar la atención de ______ románticamente, no estaban funcionando del todo, por no decir que realmente eran un fracaso.

Pasaban muchas tardes juntos, salían de aquella iglesia perteneciente al Profeta, juntos, juntos, juntos, todo aquello lo hacían juntos, incluso había veces en las que el pelinegro agarraba su mano sin dejar de caminar, a ninguno de los dos les desagradaba, pero tampoco ______ notaba las intenciones de las señales OBVIAS, que se le ponían enfrente...

—Es muy linda Dijo mientras se veía en un reflejo.

En su cabello castaño, había una flor haciendo de adorno, acomodada por Spreen, con calma y paciencia, mientras ______ admiraba lo bien que quedaba ahí, Spreen se medió infartaba por los momentos anteriores.

Nunca había hecho algo como recoger una flor, pero esa le pareció preciosa, blanca y pequeña, quedaría perfecta en el cabello castaño de su acompañante. La recogió con calma y se acercó al menor, su mano desordeno un poco sus mechones de cabello, el tallo verde tenía que quedar justo debajo para que se sostuviera por sí misma.

Su trabajo se veía tranquilo y fácil, hasta que ______ lo miro sonriente y paciente, sus ojos brillaban, lo veían con atención ante cada movimiento que se alcanzaba apreciar.

— ¿Qué pasa? —Soltó la pregunta "molesto".

—Te ves bien concentrado —Admitió como si nada.

Las manos del pelinegro empezaron a temblar por los nervios, ignoro su comentario para poder continuar con el corazón en la garganta, por la cercanía que apenas empezaba a notar.

Para muchos era obvio, para ______ era su lindo amigo pelinegro.

— ¿Podes venir un toque? —Preguntó tocando su hombro.

_______ volteo su mirada, Spreen estaba delante suyo ahora, mirando con seriedad pura.

— ¿Eh? Claro, vamos —Mientras asentía, fue jalando la manga del pelinegro.

Caminaron con suma calma mientras que ________ le iba hablando sobre cada cosa que había visto y las otras tantas que había podido comprar, alagando también entre tanto las noticias que veía diariamente, Spreen escuchaba con atención, siempre iba con prisa, de un lado a otro con rapidez... esta era una excepción, amaba ir con calma mientras caminaba con _______.

En la mente de los demás, seguía una sola pregunta, ¿Cómo era que el castaño no notaba las miradas y las palabras obvias de Spreen? No tenía sentido, incluso el pelinegro estaba frustrado, algunos amigos de _______ simplemente trataban de hacer que lo notara, mencionando cosas como... "¿No te parecen lindos esos detalles?" "¿Seguro que no son algo más?"

No recibían las respuestas que esperaban en realidad.

Todo lo que hacía, lo exponía cada vez más, y lo único que conseguía era una sonrisa acompañada de la mirada confundida de ______. Así que por eso, se lo estaba tomando con calma, sin embargo su objetivo actual era poder impresionarlo con su capilla, una de las mejores, las iluminaciones y relieves lo hacían ser perfecta a la vista.

______ empezó a soltar ruidos por la sorpresa que sentía al ver la capilla desde lejos, era una estructura enorme y de colores llamativos, la tarde más o menos soleada destacaba la iluminación grandiosa que recibía. Los ojos de ______ brillaban más de lo normal, detrás de él, Spreen frotaba sus manos por el nerviosismo que sentía.

Como siempre, ahí estaba ______ siendo una excepción al ponerlo nervioso, él nunca se ponía nervioso.

— ¡¡ES JODIDAMENTE INCREIBLE!! —Grito al entrar.

Estaba viendo hacia arriba mientras giraba sobre su cuerpo, estaba maravillado por las luces, en especial la que entraba por detrás de la cruz, era poca, pero en su mente ya lo había visto de día, con el sol alzado a su máximo.

—Estoy seguro que le encantara —

Spreen lo seguía, pues ______ iba caminando ensimismado con todo lo que veía dentro de la capilla. Spreen reserva para si el hecho de que _______ fuera el primero en verla completa.

—Y bueno, yo esperaba que te encantara a ti...

Admitió entre risas.

—Lo hace, es increíble, haces cosas increíbles.

—Al menos, ¿me aceptas una cita? — _____ dejo de caminar, y lo miro.

Se hacía una idea de a qué se refería, y le encantaba.

— ¿Cita? Así como tú y yo salir como algo más, ¿no?

Spreen asintió con calma mientras que _______ se acercaba.

—Aaah, pues, pues sí.

—Me encantaría... —dijo sonriente.

Spreen pensó que, ambas cosas salieron bien, había sido directo y dejo impresionado al chico que quiere. ¿Qué más se puede pedir?