Capitulo 37: Primer enfrentamiento a los demonios.

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No recuerdo cuando fue la ultima vez que volví a mi casa del instituto sonriendo, tampoco se si hubo una vez. Pero quiero que se repita de ahora en mas.

Ver a Heather sonreír puede ser lo mas hermoso para ver. Cuando sonreía, me era inevitable quitar mis ojos de ella.

Escucharla reír, me causaba una sensación extraña pero agradable. Era el sonido mas hermoso que alguna vez pude escuchar.

Y ni hablemos de sus ojos, de a poco esa tristeza se iba yendo. De a poco su mirada se iluminaba, y yo estaba jodidamente feliz de que eso pase. Estaba esperando este día, este momento y al fin llego.

- Veo que las cosas van marchando bien -la voz de mi padre me quita de mis pensamientos. Me encontraba con él en la sala, mirando la televisión. Aunque no se que estábamos mirando, mi mente estaba en su sonrisa, su risa y sus ojos. Mi madre estaba en la cocina con Lizzie preparando la cena, podía escuchar como le enseñaba.

- Pese a toda la mierda, hay algo bueno.

Mi padre sonríe.

- Después de la tormenta siempre sale el sol ¿no? -sonrío y asiento- Me gusta verte así, hijo. Lo mereces.

Me detengo a ver a mi padre. Lucia cansado, y triste a la vez. La sonrisa se borro de mi rostro cuando note esto.

- Papá, ¿estas bien? Luces.... mal.

Él suspira.

- Si, estoy bien. Solo estoy agotado por el trabajo -asiento un tanto inseguro. No se si eso era cierto, o no. Pero me dolía verlo así. Y no se que pasaría si me llegara a enterar que me miente. Que nos miente a todos.

Ya, Elliot. No pienses así. 

Estoy seguro de que si algo le pasa, él nos lo dirá. Nos volvimos mas unidos últimamente. 

No digo nada mas y pongo mi atención a la televisión, estaba en un noticiero y estaban hablando del avión desaparecido, no pude evitar reírme por lo bajo al recordar la hipótesis de Ben. Me acuerdo de eso, y luego su sonrisa se aparece nuevamente en mi mente.

Suspiro y pienso en ella. Mi celular vibra en mi pantalón así que lo saco, y para mi sorpresa Heather llamaba. Como si la hubiera llamado con la mente.

- Heather... -suspiro sonriendo y mi padre me mira burlón- ¿Paso algo?

- No, yo solo... ¿crees que podrás venir?

- ¿Ahora? -pregunto al ver como Lizzie pone la mesa- ¿Es muy urgente? La cena esta lista, y...

- Oh lo siento -me interrumpe- ¿Puedes venir después de cenar? Si no puedes o no quieres, lo entiendo.

- Querer voy a querer siempre. Y claro, luego de cenar voy.

- Te espero -sonrío y corto la conversación. 

Ahora tenia tres miradas burlonas en mi, mi padre, mi madre e incluso Lizzie.

- Yo no se por que papa y mama te miran así, solo los  imito -dice Lizzie con la inocencia de siempre, así que todos nos reímos. Nos sentamos en la mesa y cenamos, la misma estuvo acompañada de charlas, sonrisas y risas. Momentos así son los que amo. Donde somos una familia. Momentos así son los que mas se valoran.

Luego de la cena, avise a mis padres que me iba, así que me subo a mi motocicleta y salgo en dirección a la casa de Heather. No se por que llamó, pero siempre estaré para ella.

Llego a su casa, y estaciono la motocicleta en el garage. Estoy por tocar timbre, pero la puerta se abre antes de que lo haga. Heather estaba allí, en pijamas, como amaba verla.

Save her (2014)Where stories live. Discover now