Capítulo#16

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Ana:

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Ana:

Suspiro, y vuelvo a suspirar, y suspiro por tercera vez, no quiero entrar a la cocina a hablar con mi madre, y si me regaña? O si me bota a la calle? Y a Sheila? Tengo 18 años, creo que podría trabajar en algún lugar, pero no creo que me alcance ni para vivir. O como volveré a la universidad? Estoy pensando demasiado, vuelvo a suspirar.

— Te vas a descinflar como el señor globo Ana.

— No recuerdes al señor globo, aún duele tía.

— Recuerdo a la pequeña niña con coletas llorando fuera de la guardería porque un niño había pinchado su globo, te veías tan adorable abrazando lo que quedó del pobre contra tu pecho entre tus manitos.

— Fue un día traumático para mi.

— Que dramática.

Da unas palmaditas en mi cabello mientras sube las escaleras hablando por teléfono sobre algo de su trabajo.

— Allá vamos.— Me adentro a la cocina, realmente estoy nerviosa— Quiero contarte algo.

— Dime cariño. —Limpia sus manos en una toalla antes de sentarse frente a mi en la mesa— ¿Que pasó?

Pone un mechón de cabello detrás de mi oreja y me sonríe.

— Creo... —Comienzo pero realmente no puedo hablar bien— creo que me gusta alguien.

— Oh, no me esperaba eso. ¿Lo conociste en la universidad?

— Algo así. —Murmuró apretando mis manos bajo la mesa contra mis muslos. — Es un poco mayor que yo.

Fruncio el seño y me miro como insitandome a continuar.

— Sólo 2 años mayor. —Puse dos dedos en mi mano derecha mientras decía el numero para que quedara más claro.

— ¿Y porque no me dijiste antes? Son novios?

Niego con mi cabeza.

— Quería hablar contigo en persona, y no, no somos pareja, al menos no por ahora.

— ¿Cres que se volvera algo serio?

Digo que si con la cabeza, debo continuar hablando antes de perder mi escasa valentía.

— Mami hay algo más que debo contarte. —Me mira esperando a que continúe— Presisamente no me gusta un él, me gusta ella.

Enfatizo la palabra señalando hacia arriba, justo encima de la cocina queda la habitación de Hope donde está Sheila en este momento.

— ¿Te gusta Sheila ? — No parece realmente sorprendida y al menos no se ve molesta.

— Si. —Murmuró tan bajo que dudo que me escuche.

— ¿Estas segura? Tal vez estas confundida cariño.

Me puse de pie poniendo mis dos manos en la mesa, en el silencio de la casa se sintió realmente alto el sonido.

— Lo lamento. —Miro mis manos sobre la mesa y sacudo mi cabeza, debo enfocarme— Realmente me gusta mamá, no estoy confundida, al principio si, estaba muy confundida y asustada, pero pasamos tiempo juntas, la extraño cuando estamos separadas el día entero por cuestiones de la escuela o su trabajo, me he encontrado viendola por horas sin darme cuenta, nos hemos besado, muchas veces.

Eso último lo murmuró como si fuera ilegal besarme con alguien, no es hasta que mi madre pone sus manos en mis mejillas que noto que estoy llorando.

— Tranquila cariño, sólo quería estar segura de lo que sentías, todo está bien. —Paso sus manos a mi alrededor y comenzó a acariciarme el cabello.— Si eso es lo q quieres te apoyaré, y se que tu padre lo hará también, ya tienes 18 años, eres lo suficiente mayor para tomar estas decisiones, y me alegro que aún así decidas contarmelo y saber mi opinión, eso demuestra lo buena hija que eres —Presiona sus labios sobre mi frente y me sonrie— ¿ Entonces no vas a dormir con Hope?

Suelto una risa limpiando las lágrimas que quedan en mi rostro mientras niego con la cabeza.

—Gracias mami, por apoyarme, y lo confiar en mi.

— Gracias a ti cariño, mi pollito está creciendo y dejando el nido.—Sus ojos se cristalizan y vuelvo a abrazarla.

— Siempre seré tu niña pequeña.

— Siempre. —Aprieta mis mejillas y vuelve a besar mi frente. — Ya puedes salir de atrás de la pared Lauren, puedo escuchar tu llanto desde hace un rato.

Mi tía sale pareciendo realmente culpable, ella es hermana de mamá, el parecido es realmente notable aunque la tía es unos años menor.

— Yo también te apoyo. —Pasa sus brazos a mi alrededor desde atrás— Estas convirtiendote en una gran mujer. Y nos alegra a todos que confíes en nosotros para contarnos tus cosas, te hizo bien irte a Carolina, pareces mucho más feliz.

— Lo estoy.

Y es verdad, en los pocos meses que llevo allá conocí cosas de mi misma que no sabía que me gustaban, hice amigos, me divertí y sobre todo no fui manipulada por un idiota, cuando estas en una relación siempre intentas verle el lado bueno a todo, pero una vez sales de ella, te das cuenta que tal vez no todas las desiciones que tomaste fueron correctas. Estar con Sheila me enseñó que mi otra relación tal vez no era lo mejor para mi, mi familia siempre lo supo, pero nunca me presionaron a terminarla porque sabían que debía darme cuenta sola.

Veo a Sheila bajar con una de las chaquetas coloridas de Hope, al igual que unas botas de agua y guantes.

— Vamos a jugar en la nieve!

Hope baja con una palita azul que usábamos a los 5 años para fingir estar en la playa mientras jugábamos con la nieve, y sonrió, realmente lo hago viendo lo mucho que amo a todas las personas de esta casa, lo mucho que las extrañe, pero aún así no me arrepiento de todo el tiempo que he pasado con Sheila lejos de ellos, y ahora que tengo ambas cosas, soy la persona más feliz del mundo.

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She is my Girlfriend ©Where stories live. Discover now