¿Qué pasa cuando el amor llega a tu vida de forma inesperada?
Dulce, amable, cariñosa, pero a la vez tan rota e insegura, llego a mi vida causando en mi lo que nunca habia sentido antes y yo cause en ella lo que siempre había deseado causar en algu...
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
Sheila:
— ¡Chicas bajen! Ya llego la limusina.
— ¿Limusina? — Gimo terminando de aplicar el gloss en mis labios.
— Fue idea del amigo de Hope.
Ana responde sonriendo y terminando de colocar la corona en su cabeza.
— ¡Ustedes primero! —Hope golpea la puerta de la habitación de Ana con sus manos y me veo por ultima vez al espejo.
— ¿Lista? Aún puedes hecharte atrás.
— No voy a hecharme atras.
Me lanza un beso provocando rubor en mis mejillas y salimos de la habitación. Agradezco que la casa de Ana sea grande porque estos vestidos son gigantes.
Ana avanzo escaleras abajo, con su vestido rojo y los tacones del mismo color. Sus labios en un tono mate lucen mas provocativos que de costumbre. La corona sobre su cabeza le da el aspecto de la realeza.
Su madre esta derramando algunas lágrimas y su tía graba con el móvil y hace fotos.
— Vamos princesa. —Ana me espera en la parte de abajo de la escalera y me sonrojo tanto que siento mi cuello caliente, ¿Me dijo princesa? Nunca antes me había dicho así.
Ana:
Esta en la parte de arriba de la escalera, mi mano extendida esperando a que baje.
La repazo desde los pies a la cabeza.
Lleva unas plataformas amarradas con tiritas hasta sus rodillas, el vestido azul claro con escote en V llega hasta sus tobillos en una falda abierta, si esto fuera Disney, ella fuera Cenicienta. Mi princesa.
Una gargantilla plateada adorna su cuello, el cabello suelto cae hacía atras sostenido solamente en el frente por la tiara.
Su mano se desliza en la mia lentamente y le sonrió, ella me devuelve el gesto. Baja los escalones restantes quedando a mi lado.
Nos miramos a los ojos y no hace falta hablar para transmitir un monton de cosas, es como estar en una burbuja.
— Ponganse para una foto. —Shei rompe el contacto visual y pasa su brazo por detrás de mi poniendo su mano en mi cintura, yo hago lo mismo y juntamos nuestros rostros.
Mi madre nos toma la foto y luego nos hace posar de forma independiente. Nos apartarmos del medio para que Dexter se pare debajo de la escalera.
Lleva un traje súper formal, una corbata llena de colores y una corona sobre su cabeza de esas gigantes que usan los reyes.
Hope avanza a pasos firmes por la escalera, sus vestido lleno de volantes de todos los tonos de colores posibles se mueven por el viento que entra por la puerta. Sus plataformas son transparentes al igual que la tiara que lleva en la cabeza, es totalmente transparente salvo por las piedritas de diversos colores que tiene incrustadas en los bordes.
Dexter deja un beso un sus nudillos una vez estan sus manos juntas. Los someten a la misma sección de fotos.
— ¡Los abrigos! —En el local hay calefacción, pero es mejor llevar un abrigo pot si acaso, no quiero llevar a mi novia (Que bien sienta decir esa palabra) a urgencias por una hipotermia.
Son de pelusas, el de Shei Negro, el mio rojo y el de Hope blanco. Esta de mas decir que los sacamos del closed de esta última. Es como el armario de Hanna Montana, puede haber cualquier cosa allá dentro.
Avanzamos hacia la limusina y saludo con la mano al conductor.
— Es mi hermano, se llama Joshua, así nos ahorrabamos ese dinero.
Sheila le saluda y nos montamos, vamos conversando todo el trayecto, vale, lo admito, Dexter es un buen chico y no tenía que ser una mama oso sobre Hope, pero en mi defensa es mi única prima pequeña y hay que cuidarla esta chiquita.
Una vez en la entrada del lugar puedo ver otras limusinas, chicas con vestidos gigantes, y los chicos en trajes perfectos. Me alegra ver que se siga tomando en serio esta tradición.
Hope y Dexter salen, una vez han avanzado por la alfombra roja, bajo yo primero y le extiendo mi mano a Shei.
— ¿Princesa?
Ella suelta una risita y entrelazamos nuestros dedos. Avanzamos resiviendo algunas miradas ingredulas de antiguos compañeros y algunos aplausos.
Una vez dentro, justo como lo habíamos planeado un globo lleno de confeti blanco estalla.
Sheila:
Doy un respingo cuando el globo estalla en el techo y comienzan a caer confetis y globos. Comienza a sonar una canción, en español, por lo cual no entiendo nada y estoy desconcertada.
Ana aprieta su mano sobre la mía y le veo sonreír.
— Feliz cumpleaños amor.
Mis ojos se aguan y un coro de gente grita "Feliz cumpleaños Sheila" suelto risitas nerviosas y entonces Ana suelta mi mano.
Hemos avanzado de alguna forma hasta el centro de la pista, la canción sigue sonando, varias personas estan a nuestro alrededor y alcanzo ver a Hope grabando con el móvil antes de volver mis ojos a los de mi hermosa novia.
— Shei, se que odias ser el centro de atención, pero quería hacer esto especial. —Se remueve en su lugar y suelta una respiración por los labios— Sheila, ¿Quieres ser mi novia?
Abre la palma de su mano donde hay un anillo de gatito, literalmente es la patita de un gato.
— Si quiero.
A nuestro alrededor comienzan a gritar y solo siento un poco de pena, probablemente no tenga un momento así otra vez en mi vida como para preocuparme lo que piensen otras personas.
Ana presiona sus labios sobre los mios unos segundos, la gente comienza a dispersarse y yo solo puedo pensar en cuando adoro a la chica entre mis brazos.
