Extra#3 Ana y Sheila en un mundo paralelo.

519 44 2
                                    

Sheila:

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Sheila:

Naci como un angel, se supone que los angeles son puros, inocentes, no hay maldad en ellos, pero no todos los angeles son asi.

Por lo que cuando infringi una norma, me hecharon del cielo.

Recuerdo una conversacion con mi madre, mucho antes de que fingiera que no tiene una hija.

—  ¿Por qué los huracanes llevan nombres de personas?

—  Alguna vez lo descubriras por tu propia cuenta cariño.

Dejo un beso en mi frente y se dispuso a seguir cocinando, ella fue la mejor madre, hasta que no pudo defender a su hija para mantener su reputacion en los cielos intacta.

Yo cometi el mayor pecado de los angeles, me fije en un demonio, y ensima una chica, una chica demonio.

Digamos que rompi dos reglas en una, aunque en el fondo nunca sentí hacer algo incorrecto.

Cuando paso por delante de una vidriera en la tierra sonrio viendo mis alas en mi espalda, los humanos no pueden verlas, pero yo, y cualquier otro ser sobrenatural si que pueden verlos.

No he perdido la costumbre de llevar ropa blanca, pero mucho mas a mi estilo, los jeans se ajustan en mi cintura mientras una blusa sencilla cubre mis pechos.

Ni siquiera me acerque a esa chica, solo le estaba mirando y tal vez le haya expresado a una amiga que me parecia curiosa, dicha amiga me delato.

Suspiro quitando esos pensamientos de mi mente, hace un mes que paso, y todos los dias a la misma hora la veo, de lejos, sentada en el borde del techo del teatro del parque de la avenida principal.

Nadie parece preocuparle que una chica de unos 18 años parezca que esta a punto de suicidarse, es que ningun humano puede verla. Y por supuesto que 18 es solo la edad que aparenta.

Ana:

Ella piensa que no la veo, pero siempre a la misma hora pasa por aqui, es un angel, pero no un simple angel.

Es un angel caido, sus alas estan ligeramente rosa, lo que la hace mas interesante.

Cuando un angel es expulsado de los cielos sus alas de vuelven negras, como las de un demonio.

¿De donde pensaban que salimos originalmente?

Los angeles y los demonios fueron cortados con la misma tigera, pero ellos se niegan a admitir que sus fallos se volvieron mucho mas fuertes.

Cuando esta pasando por el frente del teatro, para llegar a la cafeteria donde trabaja me dejo caer desde el techo.
El viento golpea mi rostro con brusquedad, lo que lo hace mucho mas emocionante, cuando estoy a punto de tocar el suelo, me desvanezco y uso mis habilidades para aparecer de pie justo detras de ella.

Pincho con mi uña de color rojo su hombro, da un saltito dejando caer las llaves de la cafeteria, me rio antes de recogerlas y dejarlas en la palma de su mano.

Sus mejillas se ponen rojas, no me pierdo que me observa de arriba a abajo sin mucho disimulo, ya me hago unas ideas de porque los señores aburridos la botaron del reino magico y celestial de los cielos.

—  Me llamo Ana, y creo que es obvio que soy un demonio, aunque esos de alli. — Señalo con mi cabeza a unos humanos—  Deben pensar que soy una chica con una diadema de cuernitos, a lo Star.

—  ¿Star?

—  Star vs las fuerzas del mal. —  Me mira confundida, es realmente genial que no este huyendo de mi por ser un demonio—  Algun dia te lo enseñare; ¿tu nombre?

—  Sheila, y soy un angel caido.

Sheila:

Aveces nos encontramos, en la cafeteria, en el cine, en cualquier sitio donde podamos ser nosotras mismas, aunque tampoco hay muchos impedimientos, ya que ninguna de las dos tiene nada que perder.

Aunque no hemos hecho cosas, de ese tipo de cosas que segun los libros te hacen mover el piso y cuestionarte tu existencia.

Suspiro terminando de contar la caja, cierro bien todo antes de apagar las luces y salir de donde trabajo.

He venido tantas veces aqui, que pudiera hacer el recorrido de memoria, realmente extraño usar mis alas, caminar deja mis pies adoloridos, y no me dan las cuentas para tomar taxis todos los dias.

—  Hola.

Grito cuando se aparece delante de mi, siempre hace lo mismo.

—  Te he dicho mil veces que no aparezcas de la nada.

Se encoje de hombros, le gusta ir de rojo, el diminuto vestido se adhiere a sus curvas como una segunda piel. El cabello negro le cae por los hombros.

—  Nos conocemos hace meses.

Aciento, y por algun motivo no parece raro que estemos hablando en medio de un callejon oscuro.

Igual se que ella esta bloqueando nuestra percepsion, no se que nivel tenga, pero no es una novata.

—  Y bueno, los demonios no nos enamoramos—  Es la primera vez que le veo nerviosa en todos estos meses— Pero esto es lo mas cercano a amor que sentire alguna vez en mi vida.

Se que me puse roja, porque sigo sin explicarme como ella se fijo en mi.

Yo puedo asegurar que estoy enamorada, no es necesario que lo diga, por lo que en cambio sacando el demonio que llevo dentro la agarro del cuello y estampo mi boca sobre la suya.

Una oleada de llamas crecen a nuestro alrededor, la oleada de aire y vapor hacen que nuestro cabello se eleve, sus manos aprietan mi cintura, y un sonido no permitido en mi lugar de nacimiento escapa de mi boca.

Tenemos un beso intenso, con necesidad, no es suave ni delicado, pero ninguna de las dos necesitamos eso.

Entonces, cuando su boca estuvo fuera de la mia, y su rostro descanso en mi hombro, lo comprendí, comprendi el porque los huracanes siempre llevan nombres de personas.

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
She is my Girlfriend ©On viuen les histories. Descobreix ara