¿Qué pasa cuando el amor llega a tu vida de forma inesperada?
Dulce, amable, cariñosa, pero a la vez tan rota e insegura, llego a mi vida causando en mi lo que nunca habia sentido antes y yo cause en ella lo que siempre había deseado causar en algu...
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Sheila:
— Oh dios mio no deberíamos hacer esto.
Suelto en un chillido pero ya su boca esta subcionando en mi cuello.
Al volver a casa hace 5 años, llevamos el cuadro, en pleno aeropuerto Carol insistió en que quería verlo, así que tuvimos que sacarlo de la funda en donde se encontraba.
Un señor se nos acerco y me ofreció 5mil dólares por él, le mire confundida hasta que me paso su targeta, y era de un jodido y super famoso catador de arte.
Cosas así solo pasan en los libros, así que me emocione un montón cuando le llame y me dijo que podría exponer alguno de mis cuadros en una pequeña galería poco conocida porqué veía potencial en mi.
Ahora, cinco años después, tengo mi primera exhibición totalmente personal, algunas pinturas son abstractas, pero mi favorita es, en la que sale Ana, frente a las blancas playas de California en nuestras vacaciones de verano.
Sus manos recorren mi cuerpo y me aprieta contra la pared. Me río porque cuando la conocí, nunca me imagine terminar haciendo cosas en el armario de mi propia exhibición de arte. Y si, pense la palabra equivalente a sexo en nuestra relación sin sonrojarme.
— ¿Te hace gracia que estemos modo cosas?
— No. —Un gemido escapa de mis labios cuando su mano sube por mi muslo.
En eso la puerta se abre completamente y ambas giramos como la niña del exorcista. Sus manos siguen debajo de mi falda, y hasta que la vista de mi asistente no va a esa zona no las saca rapidamente como si recordara lo que estabamos haciendo antes de ser pillada.
— Señorita Sheila. —Carraspea mientras sube los lentes por su nariz— Su amiga, la que esta embrazada...
— ¿Carol?
— Si, si, ella, le esta buscando y quise ayudarle, también su hermanito voltio un poco de refresco en el suelo y vine por una fregona. —Entonces se vuelve un tomate.— Lamento interrumpir.
Le sonrió acomodando mi vestido y entrelazo mi mano con la de Ana.
— Ya vamos a antender a los invitados.
Ella aciente efusivamente, Ana y yo salimos aguantando risitas tontas.
Ana esta trabajando en una editorial como correctora, y escribe en sus tiempos libres en Internet, su historia trata de fantasía, la protagonista tieneel cabello rosado, y enganchan demasiado.
Kenny y Carol tuvieron una boda loca en las Vegas el año pasado y estan esperando una bebé, esperemos que saque el carácter de su padre, y no el de su madre.
Cuando mi nombre salió en el periódico por la exhibición, mi madre me envió un correo con felicitaciones, no respondí, después de muchas terapias entendí que no es mi culpa lo que ellos hicieron, y honestamente, ya no me importa volver a ellos, tal vez es egoísta por mi parte, pero es mejor así.
Saludo a las personas con mi mano, me detengo frente a mi pintura favorita de todas.
Sonrió aún mas al recordar que el imbécil que casi mata al amor de mi vida se esta pudriendo en la calle, se me ha pegado la forma de hablar de Ana.
— Hermanaaaa mayorrr.
Un Theo de 9 años corre hacia mi abrazandome, Carol viene con si cabello al natural porque le recomendaron no teñirlo por el embarazo, y eso le tiene sufriendo, Kenny le sigue regañandola por hacer líos, Ana se resbala con el refresco que voltio Theo hace rato.
Me río otra vez, porque me siento como en casa, este es mi lugar, y si pudiera pintar un momento en mi memoria para siempre, sin duda, sería el tiempo que pase con ellos.
