𝔏𝔞 𝔢𝔤𝔩𝔬𝔤𝔞 𝔡𝔢𝔩 𝔠𝔯𝔢𝔶𝔢𝔫𝔱𝔢

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Capítulo dedicado a marlouwallsxh | drarry_is_real_putos | Mariana_BooBear | nocollabytt | an_useless_person | LoverandReputation13 | Adamaris_006 | 369_863_HL | aleminBv | Pichulalarrie2

Capítulo XIV

La égloga del creyente


Cuando la luna y las estrellas desaparecieron entre las nubes blancas y el celeste de un nuevo amanecer, los cálidos rayos del sol se filtraron a través de las cortinas en la ventana de la habitación principal de aquella cabaña de arce en medio de aquel paramo de nieve y hielo que resplandecía en un manto de blanca luz.

Y ahí, entre las sabanas de la cama rodeada de hermosas plantas, un ángel de rizados cabellos reposaba su cabeza en el pecho desnudo de un ente con sangre hibrida, acariciaba el costado de su amante trazando círculos y líneas imaginarias sobre su piel acaramelada, sentía su suave respiración mover algunos de los rizos de su cabeza, sus piernas completamente entrelazadas entre sí, y ellos completamente desnudos debajo de las sabanas, expuestos ante el otro y tan seguros como nunca antes se habían sentido. Louis acariciaba gentilmente su espalda baja, su otra mano de vez en cuando se topaba con la de Harry y acariciaba suavemente sus dedos solo para sentir el agradable cosquilleo que aquel roce dejaba en sus vientres.

Al levantar la cabeza en dirección al nephilim Harry se topó con el maravilloso color azul que lo había cautivado desde el principio, una ligera sonrisa se formó en sus labios carmesí –los cuales evidenciaban la cantidad de besos que dedicó a su amante esa noche– y fue gratamente correspondido con otra sonrisa, una que se veía más hermosa de lo que debería.

–Hola, ángel.

Su voz sonó tan dulce y hermosa como de costumbre, sin embargo ésta vez Harry tan solo pudo soltar una risa nerviosa entre dientes y enterrar su cabeza en el cuello del hombre quien solo rió sintiendo peculiares aleteos en su vientre, besó castamente los cabellos rizados en medio de una resplandeciente sonrisa.

Se quedaron en silencio por un buen tiempo, fue entonces que los dedos del ángel tropezaron con unas líneas oscuras en el costado de Louis, las observó detenidamente intentando adivinar de qué se trataba aquella extraña marca en la piel del nephilim ¿era acaso una marca demoniaca? ¿Todos los demonios tenían una? Su mente navegaba en vagos recuerdos que tenía de los pergaminos celestiales que había leído hace siglos, las letras y los símbolos antiguos se vislumbraban en su memoria pero ninguno era semejante al de Louis.

–¿Qué significa esta marca?– preguntó al final en un murmuro bajo, deseando que su impaciente curiosidad no fuera inoportuna en ese momento.

Louis bajó la cabeza hasta posar su mirada en el mismo lugar que el de su pareja.

–Siempre la he tenido, no entendía el por qué, pero ahora...– hizo silencio a medida que iba hablando, una mueca de molestia pasando velozmente por sus rasgos.

La Biblia de los BastardosWhere stories live. Discover now