Correrá la sangre el día que despierte el lobo [[COMPLETA]]

Una promesa

Tardaron dos días a llegar a la cabaña. Y ya se habían instalado, pero des de que llegaron ninguna de las dos hablaba. Valkyria se estaba odiando a si misma por abandonar a su familia a su suerte. Pero creía profundamente en el liderazgo de Sigurd para aplacar al pueblo pero su carácter protector no la había dejado dormir des de que partieron.

- ¿Esta ha sido tu casa durante estos años?

- La mía y la de todos ellos - dijo tocando la cabezota de uno de los lobos.

- ¿Y no te has sentido sola y con miedo?

- La ventaja de la cultura vikinga es que nos han enseñado a ser fuertes y a no temer a nada de la vida. Os he echado de menos a rabiar pero nunca me he sentido sola. Siempre estabais allí donde mirase.

- Valkyria.. des de que hemos llegado estás extraña... ¿Que te preocupa?

- Nada...

- Oh venga Valkyria, veo esa mirada... algo no salió como querías antes de irnos

- No puedo decírtelo. Si te lo digo me odiarás y querrás volver.

- Y si no me lo dices querré volver igual - dijo en alerta - No hagas eso Valkyria, siempre haces lo mismo, cargando todo el peso. Como si no pudiera soportar nada. Yo también crecí entre vikingos, ya no soy una niña

- Déjame Kaysa - dijo saliendo de la cabaña tras un portazo.

Pero ella no podía dejarlo así. Sabía que algo no había ido bien, no podía dejar de pensar en sus padres. En como los echaba de menos y en como todo podía afectarles. No era como Valkyria, ella no podía vivir entre arboles sin más. Necesitaba gente que la rodeara. 

- Quiero volver

- ¿Y casarte con ese cretino arrogante?

- No sirvo para estar aquí

- Llevas dos días te acostumbrarás y te gustará, confía en mi

- Y ¿mis padres? No puedo Valkyria tendría que haberlo pensado mejor

- Le prometí a tu padre que te cuidaría, tus padres están bien mientras tu estés bien. Si vuelves tampoco estarás con ellos, sino que te llevarán donde Lars quiera para hacerte su mujer. Y parte de los luchadores de tu padre se irán contigo pero no para defenderte ni para luchar contigo sino para rajarles la cabeza a todos los escoceses que encuentren por el camino. Y aunque no es que este ni en contra ni a favor de eso y de las guerras pero va a provocar una guerra con nuestra sangre y a el no le va a importar mandar a tanta gente a una misión suicida. ¿Has entendido porque no puedes volver? Si quieres una vida de mierda y rodeada de muerte para mucha gente allí tienes tu caballo. No voy a retenerte, no estoy aquí para hacer de niñera. 

- Pues para no querer ser una niñera me tratas como si fuera una niña.

- No es que te trate como una niña, simplemente que harías lo que fuera por papá y mamá. Aun que eso supusiera perder tu cabeza y la de todo el pueblo.

- Y ¿eso es malo? 

- Sí, por que yo no puedo perderte. Ni quiero.

- Déjame decidir a mi si vale la pena perder mi vida. Cuéntame que pasó, por favor. Necesito saberlo o la duda me comerá y volveré sin saber a que me enfrento.

- Esta noche. 

Valkyria no era alguien fácil, tampoco se lo habían puesto fácil realmente. Había cogido en su vida un rol protector a la vez que solitario. Se parecía a los lobos más de lo que ella pensaba. Tenía un carácter extraño para muchos por no haberse criado entre sabanas y cojines.