Jin es un omega que vende su cuerpo por dinero y trata de sobrevivir por su bebé, una noche desafortunada es mordido en el cuello por un Alfa desconocido, desesperado, decide terminar con su vida pero recibe ayuda de un joven medico llamado Jeon Jun...
Han pasado cuatro meses, Jin está en el bar, justo en la barra, oculta sus ojeras con maquillaje y su cansancio con una sonrisa falsa, él bebe duerme en casa.
Ha sobrevivido como puede, él bebe duerme en el bar o en los brazos de la anciana Hui, porque nadie más quiere tocarlo, como la anciana le dijo, todos rechazan a Jin y a su hijo, piensan que, si los tocan, sus hijos tendrán omegas, como una maldición.
También recibe miradas frías, nadie le ayuda, así que de vez en cuando va al bar y arrastra hombres por algo de dinero, antes de eso solía ser guardia de una tienda de víveres, salía con alfas y pocas muy pocas veces vendía su cuerpo, pero desde el "incidente" y después del bebe, no tenía otra opción que acostarse con Alfas o betas para sobrevivir.
Tenía aun dolor del parto, pero tenía más dolor cuando no había dinero para pañales, medicinas o comida para el pequeño.
Jin se había vuelto un muñeco que solo trabajaba sin vivir realmente, y en algunas ocasiones, cuando él bebe lloraba sin parar, miraba el cuchillo en la cocina y pensaba en matarlo para luego matarse el mismo.
Pero también habían momentos felices, el bebe ya balbuceaba palabras diciendo "Pa" o al menos así le interpretaba el omega, su rostro estaba cambiando, se parecía cada vez más a él, y eso le aliviaba, no quería que el pequeño se viera como su padre, porque le odiaba, Jin lo odiaba a ese "bastardo".
"Tal vez no fue malo que fueses omega, si fueses un Alfa serias una bestia sin sentimientos"
le habla en la cama, después de tener un cliente violento, acomoda su cabello y le da de comer.
"No me duele, cuando los Alfas me pegan no duele tanto, pero cuando ellos hablan cosas malas, eso sí que me lastima, tienes que ser un niño grande y fuerte para proteger a papá de esos idiotas"
Le dice acariciando su cabello oscuro y suspira al ver que no hay nada en sitio donde guarda la comida.
No le importa mucho pues él bebe come de él, ¿Pero ¿cómo será cuando ya no lo haga?, él bebe pedirá comida sólida, ni siquiera le ha puesto un nombre, Jin se hunde cada vez más en un abismo que lo traga entero, sus recuerdos dolorosos, un amor desastroso y una persona que ahora depende de él, sin dejar de lado la presión que todos a su alrededor ejercen sobre el
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Esta tarde ha ido particularmente mal, Seokjin baja la cabeza suspirando mordiendo su labio inferior, había hombres en el bar, pero eran violentos y pagaban poco, sinceramente no quería arriesgarse a tanto, además había dejado al bebe solo en la casa, el rezaba por que estuviese bien, la anciana se había negado a cuidare debido a su cansancio y los vecinos respondieron con un "Debiste matarlo", Jin maldijo en voz alta golpeando una banca en el parque.
