Capitulo 5: Un pequeño acuerdo.

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La hora del almuerzo llego. Me senté en la misma mesa que ayer, con las mismas personas. Todos eran alegres, y graciosos. Parecían ser buenas personas.

Toda esta alegría, y diversión se apago cuando mis ojos la encontraron, sentada sola, alejada de todos, perdida en su mundo. Era todo de color y luego venia Heather, sentada alli en su grisáceo mundo, eso me entristecía. Nunca me gusto ver así de solas a las personas, todos tienen su razón para huir de todos, pero aun no sabia la razón de Heather y sea cual sea, realmente quiero darle color a toda esa oscuridad. Hago una mueca en su dirección, tocaba su comida con algo de rechazo.

- No disimulas mucho eh -Andrew me sonríe en cuanto lo miro, y le devuelvo la sonrisa. Solo él se percato a quien miraba, los demás estaban hablando animadamente de la fiesta del sábado.

- No dejo de preguntarme por que es así, y por que me llama tanto la atención -suspiro.

- Bueno, no tengo la respuesta a eso. Pero quizá pueda pasarte algunos datos de ella -lo miro- Si, se algunas cosas. Las que todos sabemos y quizá eso te ayude a acercarte -se encoge de hombros- ¿Aun quieres hacerlo? -le asiento y sonríe- Ve a hablarle, hay tiempo para que te cuente algunas cosas.

- Me va a mandar al demonio con tan solo una mirada -Andrew se ríe, y observo a Heather, la noto algo vulnerable ahora. - Ya vengo -me asiente y me levanto de la mesa. Solo Ayleen nota mis movimientos, y frunce el ceño cuando estoy frente a Heather.

- ¿Cuando te cansaras de mis rechazos? -sin levantar la vista de su comida me pregunta eso. Le sonrío y me siento frente a ella con mi bandeja de comida.

- Si insisto en hablarte... ¿Eso te da una respuesta? -me mira por primera vez que llegue a los ojos.

- Si, y no me gusta esa respuesta -me río y frunce el ceño- Eres raro -volví a reír, pero esta vez irónicamente. Como diciendo "si yo soy raro ¿Que hay de ti?" Me mira y una vez mas frunce el ceño.

- ¿Que es lo que me hace raro?

Suspira y mira a su alrededor - Que estés aquí, que me hables, que te me acerques. Provoco rechazo, y tu solo insistes en hablarme.

- ¿Eso me hace raro? Yo no lo veo así. Me veo como un valiente - ¿Acaba de sonreír? ¿O hizo una mueca? Bueno, no lo se. Pero sus labios se curvaron cuando lo dije. Observo su plato y noto que había tocado muy poco su comida, pero no le digo nada, estoy seguro que si algo le digo saltara con eso de que la deje en paz. Y con ella tengo que ir despacio y evitar algunas cosas, por ahora- ¿Sabes lo que es raro? -rompo el silencio y ella me mira esperando a que le diga lo raro- Que no me estés ladrando cual perro para que me vaya -esta vez podría jurar que sonrió, y eso me hizo sonreír mas.

- Estoy a tiempo de hacerlo.

- Oh, no hay problema con ello. Aun me tendrás allí molestándote -le dedico una sonrisa y ella solo me mira fijamente. En serio que era hermosa, como ya dije una vez, había belleza rara en ella y eso era lindo y mis ojos estaban encantados de verla. Pero también me causaba algo de tristeza sus ojos tristes, cansados y algo hinchados. Así como me causaba tristeza ver sus cortes en las muñecas que nuevamente se hicieron algo visibles, las oculto detrás de unas pulseras, pero estas no cumplieron bien su trabajo de cubrir sus heridas. Moría por decirle que no haga eso, besar sus heridas y sacarla de la oscuridad, pero con eso una vez tendría como respuesta el "aléjate de mi" y no quiero su furia y enojo en mi. Quiero su confianza, y ahora parecía mas tranquila que en la mañana, hasta me había sonreído y eso es algo bueno, supongo.

- ¿Iras a la fiesta? -por primera vez ella rompe el silencio y eso me toma por sorpresa, tardo en contestar y ella me mira con el ceño fruncido una vez mas, como si estuviera loco o algo.

Save her (2014)Where stories live. Discover now