Capitulo 13: No me iré a ninguna parte.

166K 8.5K 1K
                                    

Me encontraba en la ciudad comprando algunas cosas. Para mi, para Lizzie y para Heather. Queria sorprenderla, en cuanto termine las compras iré a su casa, y si acepta mi surgerencia le cocinare algo. Ya tenia en mis manos las bolsas del supermercado, si Heather me dejaba usar su cocina, la iba a sorprender o intentar hacerlo, con la salsa que mi abuela me enseño y que segun mi madre era sensacional. Entro a una librería y recorro el lugar, buscando algun libro que se que a Heather le gustaría. Me voy a la seccion de Juveniles, y de alli a Romance. Miro los titulos, y agarro uno que otro que me llame la atención para leer su argumento. Parece que las chicas aman a los chicos malos, cada libro que agarre había un chico malo, habia tatuajes. Bueno, supongo que las autoras saben que lo que toda chica quiere.

- El chico que se escabulle en la ventana de mi habitación -leo el titulo, para luego leer el argumento. Me gusto, y creo que a Heather le gustara, eso espero. 

Me dirijo a la caja y pago por él. Salgo de la librería y me voy a una tienda para comprar cosas dulces para Lizzie, luego me dirijo a un local y de allí compro temperas, hojas y todo lo que incluye el arte para así Heather hace lo que mas le gusta. Tenia demasiadas bolsas en mis manos, y como sabia que así iba a ser, decidí venir a la ciudad con el auto de mi madre, aprovechando que no lo iba a usar. Guardo todo en el baúl y me encamino hacia la casa de Heather. Realmente no se como mantener mis sentimientos lejos de ella, cuando una persona no quiere esto, lo que hace es alejarse, pero yo no quiero ni puedo alejarme de ella. No puedo dejarla sola luego de habérselo prometido, y no estoy con ella por obligación, al contrario, estoy por gusto.

Llego a la casa de Heather y aparco el auto, saco las bolsas y me dirijo a la puerta principal. Toco timbre y espero. Por favor que no me saque corriendo. Hablo para mis adentros, y luego de unos segundos mas, Heather abre la puerta luciendo en pijamas aun, sonrío al verla cómoda. Se veía hermosa. Sus ojos estaban sorpresivos, suspira y niega con la cabeza al ver todas las bolsas que tenia en mis manos.

- Dime que no es lo que estoy pensando -sonrío.

- Créeme que no puedes perderte mi salsa -hablo orgullosamente y ella me estudia con la mirada- Siempre y cuando me invites a pasar.

Pasan unos segundos de miradas conectadas, cuando se corre a un lado invitándome a pasar. Sonrío.

- ¿Realmente me estas dejando pasar?

- Tengo tiempo de cerrarte la puerta en la cara. Así que antes de que cambie de decisión, pasa -suspira- Tres... dos...

- Ya, ya -me río y paso. La casa de Heather era muy hogareña y pequeña. Al entrar te chocabas con la sala, las paredes de la misma eran de un color amarillo pálido, los sillones eran verde oliva y todo estaba sutilmente decorado con algún que otro cuadro familia o de algún artista. A la izquierda de la sala estaba la escalera, y mas allá de la escalera supongo que estaba la cocina- ¿Me guías a la cocina? -pregunto y asiente caminando hacia la derecha. Entramos a una pequeña cocina de paredes blancas. Dejo las bolsas sobre la mesa redonda y saco lo necesario para la salsa mientras que Heather se sienta. No lo había notado, pero llevaba pantuflas de conejo, sonrío al verlo. 

- ¿Tienes hambre? 

- No realmente.

- Pues cuando sientas el delicioso olor, créeme que te agarrara -sonrío orgulloso y ella se limita a asentir.

- Esta bien. Correré el riesgo -sonrío y comienzo a picar la cebolla en una madera que Heather me había dado.

- Hay un regalo para ti en las bolsas.

- ¿Un regalo?

- Dos en realidad.

- No es mi cumpleaños -me giro para verla y así indicarle donde estaban sus regalos.

- Los regalos no solo se dan en ocasiones especiales -sonrío y vuelvo a darme vuelta escuchando el ruido de las bolsas.

- Un kit para pintar -dice.

- ¿Te gusta? Me has dicho que te gusta pintar, así que...

- Gracias -sonrío y vuelve a buscar- Oh...

Me giro a verla, tenia el libro en sus manos. Leía el titulo una y otra vez como si estuviera en otro idioma.

- ¿Ya lo tienes? 

- No...

- ¿Entonces? 

- ¿Como lo has hecho? -frunzo el ceño, obviamente no entendiéndola- Quise este libro desde que llego a la ciudad, pero no podía comprarlo -cuando escucho decir eso una gran sonrisa se dibuja en mi rostro. El Elliot interior estaba dando saltos ya que el exterior no podía hacer eso adelante de una chica- Realmente te lo agradezco.

- No es nada. Me pone contento haber acertado -sonrío- Si quieres puedes empezar ahora, tengo tiempo aquí -asiente y sale disparada de la cocina dirigiéndose a la sala, nuevamente me hace sonreír. Hice algo bueno y eso significaba mucho para mi. Vuelvo a concentrarme en la preparación de mi salsa.

Heather había leído 10 capítulos ya, estaba emocionada con su libro y yo amaba verla así.

La mesa estaba lista, y Heather estaba esperando por los tallarines con salsa. Le entrego el plato y espera a que yo me siente para empezar a comer. Espero su aprobación, come y siente el gusto. Me mira y yo a ella.

- Se sincera conmigo.

Sonríe y amaba cuando lo hacia.

- Esto esta genial -sonrío- En serio, me gusta....

- Muchas gracias -sonrío triunfante probando ahora yo. Heather estaba realmente disfrutando del almuerzo. Me pregunto cuando fue la ultima vez que se alimento bien por ultima vez, comía con ganas, como si lo necesitara en verdad, y así era. Yo estaba feliz porque lo estuviera haciendo, solo espero que el cargo de culpa no llegue. Así que mejor distraigo su mente.

- ¿Que tal el libro hasta ahora? -sonríe.

- Hermoso. No me va a fallar -sonrío. Y frunce el ceño, no por favor la culpa no- ¿Iras a la fiesta?

- Probablemente ¿Quieres venir? -niega con la cabeza- ¿Quieres que me quede y veamos una película? -niega con la cabeza- Esta bien.

Heather vuelve a fruncir el ceño y se lleva las manos al estomago. Sabia lo que estaba pasando. Cierra los ojos como si intentara calmarse y vuelve a abrirlos.

- Heather todo esta bien -acerco mi silla a ella con cuidado, pero aun así se sobresalta.

- No me toques.

- No lo haré. Pero todo esta bien -suspiro. Sus ojos estaban llenos de lagrimas- Se lo que estas pensando, y no es necesario que lo hagas. 

- Necesito hacerlo -me mira, odiaba verla llorar.

- No. Tu crees que lo necesitas porque te acostumbraste a hacerlo y tu cuerpo se adapto a eso. No lo necesitas -le alcanzo su vaso con agua- Ten, bebe un poco -agarra el vaso de forma temblorosa y lo lleva a sus labios secos. Da un trago y suspira- Respira profundo, y si quieres llorar hazlo. Yo estoy aquí, y no me iré a ninguna parte -me mira a los ojos, y deseo que me pida que la abrazara. Pero no lo iba a hacer.

- Gracias -susurra y sonrío.

Hola :) Aca les dejo un nuevo capitulo, y espero que les guste. Me pidieron que les deje fotos de los otros personajes, y lo ire haciendo :) Tambien les ire dedicando un capitulo a cada una, si? Garcias por su apoyo de siempre ♥

Save her (2014)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora