EXTRA: NAVIDAD

2.5K 89 118
                                    

ADVERTENCIA: Este extra contiene escenas recortadas del manuscrito original de Cómo llamarte amor en susurros que tendrían lugar entre el capítulo 21 y 22 de la novela.


HALEY

Hannah tira de mi brazo y me hace caer sentada de nuevo sobre el colchón de la cama de mi habitación de Sacramento, de donde acabo de levantarme hace un segundo para ir a coger mis botas y ponérmelas con el objetivo de completar mi look para la cena de Nochebuena.

—¿Y cómo besa? —pregunta en voz baja, con una expresión pícara.

Lleva toda la tarde en casa conmigo, pero solo en la última hora hemos podido cotillear a gusto, encerradas en mi habitación. Y no para de pedir todos los detalles de lo que ha pasado con Jayden en los últimos días, aunque ya los haya escuchado más de una vez antes de este momento.

Me esfuerzo inútilmente porque no asome mi sonrisa más tonta.

—Superbien, tía.

Veo que también sonríe, tan emocionada como si toda esta historia le estuviera sucediendo a ella.

—Será porque ha ensayado mucho...

La verdad es que no me incomoda escuchar eso. Inexplicablemente, pensar ahora en Jayden estando con otras chicas antes de estar conmigo me molesta mucho menos de lo que lo hacía antes de que pasara nada entre nosotros. Desde que nos besamos en ese mercadillo navideño y tras vivir los días posteriores a eso con él, hay una certeza que no me permite sentir celos en absoluto: hace tiempo que soy la única chica a la que Jayden Sparks quiere besar.

—Pues mejor para mí, ¿no?

—Joder, tía, me encantaría poder volver atrás en el tiempo y decirle a la Haley de quince años que tenga un poco de paciencia, que solo tiene que esperar cuatro años para besar a ese bombón.

—Cállate —le pido, aunque se me escapa una risita.

—Estoy muy contenta por ti, Haley. Me parece que hacéis muy buena pareja.

Sonrío de medio lado y niego con la cabeza.

—Aún no somos pareja ni nada que se le parezca. Somos solo... amigos que se besan.

Tengo que morderme la sonrisa para controlarla un poquito, cuando recuerdo cómo él dijo exactamente eso.

—Ya. Amigos que se besan —repite Hannah, como con desprecio—. Llámalo como quieras. Pero resuélveme una duda que me inquieta... ¿por qué narices no sois ya amigos que se acuestan?

—Hannah, nos dimos el primer beso hace menos de una semana.

—¿Y? ¿Tienes una regla de las cinco citas o alguna mierda así ahora, o qué?

Me levanto para ir a por mis botas. No es que no lo haya pensado. No es que no lo pensara —y mucho— mientras nos besábamos en el suelo de mi salón hace dos noches. Me gusta mucho Jayden. Todo mi cuerpo se enciende de golpe, como una maldita cerilla, cada vez que me toca. Pero no sé si estoy preparada para eso aún. El sexo pasó para mí de ser poco emocionante a ser jodidamente adictivo y, al final, después de todo lo que pasó con Daryl, el sexo terminó siendo algo que muchas veces me hacía sentir sucia, utilizada y humillada. Algo en lo que nunca tuve el control. Eres una auténtica guarra en la cama. Aún recuerdo lo que dijo aquel tío al que Daryl dio una paliza. Supongo que todos los tíos de esa fraternidad hablarán así de mí. Excepto Cole, claro, o eso quiero pensar. ¿Y si Jayden termina pensando lo mismo y no le gusta? ¿Y si doy un paso más con él y eso me devuelve de golpe todos los malos recuerdos y estropea esto que estamos empezando? Tengo miedo de lo que pueda llegar a sentir o de cómo pueda llegar a reaccionar cuando él me toque de esa manera.

Cómo llamarte amor II: En susurros.Where stories live. Discover now