EXTRA: TYLER

1.9K 86 30
                                    


ADVERTENCIA: el siguiente extra contiene escenas eliminadas del manuscrito original de Cómo llamarte amor 2 que se correspondería con el capítulo 28 de la novela.


JAYDEN

Conduzco lo más rápido que puedo sin ponerme en riesgo y, aun así, para cuando llego a la entrada de la casa de mis padres, ya han pasado quince minutos de la hora en que oficialmente empiezan a comer los domingos. Menos mal que le he mandado un mensaje a mi madre para avisarle cuando salía porque si no ya estaría preocupadísima por si me ha pasado algo en la carretera. Abro con mis llaves y mi madre es la primera a la que veo, delante de la mesa de comedor y con los brazos en jarras. Aprieta los labios en cuanto nuestros ojos se encuentran.

—¿Qué pasa? ¿Que el señorito tiene que venir a comer a mesa puesta? ¿Y encima haciéndose de rogar?

No puedo ponerme tonto con mi madre cuando me está echando la bronca, así que agacho la cabeza.

—Lo siento. No me he dado cuenta de la hora y al final se me ha hecho tarde.

Mi padre y Luke salen de la cocina, con un par de bandejas llenas de comida humeante.

—¡Por fin podemos comer! —exclama mi hermano—. Mi estómago estaba empezando a digerirse a sí mismo.

Pongo los ojos en blanco, pero no me meto con él... de momento. Dejo el casco de la moto sobre el sofá, aunque sé que mi madre odia que haga eso, y también la cazadora, en cuanto me la quito.

—No seáis así, por lo menos ha venido, y no parece muy desmejorado. A juzgar por la voz de moribunda de Haley cuando hemos hablado por teléfono, debo imaginar que la fiesta de anoche se os fue un poquito de las manos —insinúa mi padre, y alza una ceja burlona al mirarme, tras dejar la bandeja en el centro de la mesa.

Me acerco y beso a mi madre en la mejilla, aunque ella intenta hacerse la indignada un poco más. Mi padre corresponde a mi abrazo, dándome un par de palmaditas en el hombro, y luego Luke y yo nos pegamos en broma como forma de saludar.

—No sé de qué me hablas —aseguro a mi padre, haciéndome el inocente.

—¿No fuisteis juntos a una fiesta anoche? —replica él, y me da la sensación de que le pone toda la intención a la palabra «juntos».

Me siento y me encojo de hombros.

—Yo fui con mis amigos, ella con los suyos. Nos vimos por allí, sí, pero apenas estuve con ella —miento descaradamente.

—Entonces no sabes qué bebió para tener una resaca esta mañana que la tenga en la cama a mediodía —imagina mi madre, con una mirada inquisidora también.

—Ni idea. Pero ya no estaba en la cama, os habrá mentido para dar pena —me meto con ella, y sirvo yo mismo una cantidad generosa en mi plato.

—¿Y tú eso cómo lo sabes?

Levanto la mirada ante la pregunta de mi padre. Mierda. Soy un bocazas... y muy tonto. Noto la mirada de Luke clavada fijamente en mí, y, aun sin verlo, siento como si estuviera conteniendo la respiración. Justo como yo. Los ojos de mi padre estudian atentamente los míos, como hacía cuando me interrogaba en mi adolescencia después de que yo saliera alguna noche.

—Porque... la he llamado antes para ver si iba a venir y quería que pasara a recogerla con la moto —invento rápido.

Muy bien, Jayden. Cruzo una mirada rápida con Luke, que pone cara de haber escapado de la muerte por los pelos.

Cómo llamarte amor II: En susurros.Where stories live. Discover now