Sombras Oscuras: ¿Quién es Safwan?

CAPÍTULO 9

Al llegar la noche y recibir a la familia Alphonse en la casa Young, me siento un poco inquieta.

Nada parece ir fuera de lugar, hasta que de pronto el tema por el que tal reunión se ha hecho, es tocado.

— ¿Compromiso?

Esa pregunta no proviene de mí. Es mi hermano quién hace la pregunta, no luce contento con lo que acaba de escuchar.

Yo en mi lugar me he quedado helada.

— Exactamente, Eric. Tal cómo lo escuchas —responde mi madre con firmeza. Alrededor, la señora Rita Alphonse y el señor Ruffus lucen muy contentos sonriendo de oreja a oreja. Y mi padre luce bastante satisfecho. Por otro lado, Alastair se ve bastante tranquilo y escucha con atención—. Ésta noche nos hemos reunido para llevar a cabo el compromiso entre Alastair y Eris.

Mi corazón de pronto comienza a latir furioso. Miro a mi hermano, quién parece que va a estallar de la furia, pero se contiene y se comporta.

— Me parece que ésto no me fué comentado del todo, madre —dice Eric a regañadientes. Puedo notar cómo su mandíbula se tensa—. Disculpe, señor Alphonse por mi reacción. Es solo que ésta noticia me ha tomado completamente desprevenido —al decir ésto, Eric le echa un vistazo a nuestro padre.

— Evidentemente te tomaría por sorpresa. Solo tu madre y yo hemos hablado de ésto al respecto. Claramente ésto ya se había hablado también con la familia Alphonse.

— ¿Al menos discutieron ésto con Eris? — cuestiona mi hermano.

Me parece raro que diga eso. Por lo general en casa a nadie le importa lo que yo quiera o desee hacer. Todos siempre actúan a su propia conveniencia sin importar si eso me afecta o no. Y Eric no es muy diferente del resto que digamos. Que se moleste ahora me resulta fuera de lugar, pero al mismo tiempo me hace sentir un poco bien que se preocupe de pronto por mí.

— Eris y yo tuvimos una conversación al respecto hace poco. Ambos estamos de acuerdo con ésta unión —Alastair es quién responde con firmeza y seguridad.

Absolutamente tensa lo miro.

«¿Qué mierdas dices? Yo acepté el vínculo.¡Pero nunca nadie me dijo algo sobre un puto compromiso!»

Quiero gritar lo que pienso, pero me quedo en silencio, viéndolo con mucha atención y calma premeditada.

— ¿Qué? ¿Eris, tú estás de acuerdo con ésto? —mi hermano me mira cómo si yo estuviese loca.

Quiero negar repetidamente. Quiero decirle que no. Que no quiero eso, pero al mirar el rostro de mis padres muy serios y la mirada de todos sobre mí, solo me obligo a mantenerme quieta.

— Yo... Eso es lo que parece.

No tengo opción.

La mirada de mi hermano se oscurece al escuchar mi respuesta.

— Entiendo —luego ve a los demás y sonríe de manera un poco tensa—. Supongo que era el único que no estaba enterado de ésto. Pero ya que he escuchado a mi hermana darme su opinión al respecto, no tengo nada qué objetar. Si ella está de acuerdo con la decisión que todos en ésta mesa han tomado, no puedo oponerme.

Por primera vez en la vida me gustaría escucharle decir que no va a permitir una estupidez cómo la de ahora. Pero ya veo que no dirá nada más en contra.

De momento veo a Alastair levantarse de su asiento y acercarse a mí. Ese simple movimiento me pone tensa y en alerta. Cuando lo noto llegar delante de mí, extiende su mano en mi dirección. Dudando la tomo y me levanto también.