CAPÍTULO 22 Parte:1

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Al despertar me remuevo en mi lugar.

Por unos segundos me doy el tiempo de ver todo a mi alrededor y derrotada me siento en la cama.

«¡¿Cama?!»

Toco las gruesas mantas y me percato de que efectivamente estoy en la cama. Estaba completamente cubierta.

Miro mi ropa y me doy cuenta también de que ya no es la misma con la que salí ayer. La otra estaba húmeda por culpa de la nieve. Ahora llevo una completamente distinta y abrigada.

«Ha sido él

En la noche me desmayé. No hay manera de que yo haya llegado a la cama por mi cuenta y mucho menos el hecho de haberme cambiado la ropa.

«Ésto es una locura.»

Me dejo caer nuevamente sobre la cama y suelto un largo suspiro.

Repaso en mi mente todo lo sucedido el día anterior. Y solo con recordarlo todo, quiero gritar de frustración.

«Fuí demasiado lejos. Ésta vez fué demasiado, incluso para mí.»

¿Qué se supone que debo hacer ahora?

¿Cómo debo actuar?

Él debe estar furioso conmigo.

Sé que hice las cosas muy mal ayer. Me dejé llevar por mis malos pensamientos y mi miedo irracional.

¿Qué debo hacer?

«Lo principal es dejar de torturar tus pensamientos. Mientras más lo hagas, peor vas a reaccionar y eso es lo que se debe evitar.»

Suelto otro suspiro y decido levantarme.

Llego hacia la puerta y sin ilusionarme, giro la perilla; me sorprendo cuando ésta gira por completo y abre.

Pensé que él me dejaría encerrada aquí por el resto de mis días.

«Él no iba dejarte encerrada. Eres tú quién se está haciendo ideas absurdas.»

Abro la puerta y salgo.

Primero voy al baño y luego de allí bajo las escaleras.

Enorme es mi asombro cuando veo hacia la puerta de la entrada de la cabaña y está abierta.

Puedo ver hacia afuera.

Todo se ve muy blanco y puro, debido a la luz del día iluminando el claro cubierto de nieve pulcra y sin mancha alguna.

Titubeo demasiado al acercarme a la puerta y asomarme a ver hacia afuera.

Ni loca pretendo correr hacia afuera.

No sé si es una trampa de Safwan. Y tampoco quiero molestarlo más de lo que lo hice en la noche. Prefiero evitarme el drama en éstos momentos.

Al guíar mi mirada hacia afuera, escucho un sonido, por lo que mi vista se posa en el lugar de dónde proviene dicho sonido.

Por unos segundos me cuesta procesar lo que ven mis ojos.

Safwan está allí afuera, cortando leña.

No lleva camisa, solo un pantalón que se ajusta perfecto y sutil a sus piernas torneadas y a sus caderas. Y también sus botas de cuero. De resto, su torso desnudo queda expuesto perfectamente a la vista. Su piel se ve demasiado clara y tersa. Al observarlo moverse, noto sus músculos tensarse. Por un momento él me da la espalda y siento que mi respiración falla.

«Bueno... Si van a darme la espalda, que sea una como esa.»

-Idiota -digo en voz baja para mí misma y me cubro el rostro con una mano-. Deja de pensar tonterías, Eris-me reprendo. Pero luego vuelvo mi mirada sobre Safwan aún de espaldas-. Oh, Dios. ¿Por qué me haces ésto? -susurro-. ¿Qué clase de insana tentación es ésta?

Sombras Oscuras: ¿Quién es Safwan?Where stories live. Discover now