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Pasaron cuatro años, después de la partida de Alice a Dragonstone y de su divorció con Aemond Targaryen. A escondidas casándose con el príncipe Jacaerys Velaryon.
Antes de la partida de Alice su madre la detuvo y le dijo algo que la dejó pensando durante esos años.

—Aegon, tú y tus hermanos son los hijos legítimos del rey y tienen más derecho al tronó que la línea de bastardos de Rhaenyra—dijo la reina Alicent—Daemon va a encontrar alguna manera de matarlos, incluso a los hijos de Helaena. Un Strong dejo sin ojo a Aemond no lo olvides hija, se que era un niño, pero del niño viene el hombre, y los bastardos son monstruos por naturaleza.

Esas palabras rondaban por la mente de Alice todas las noches, ella no pudo encontrar la respuesta para su madre en ese momento, solo se quedó en silencio escuchando lo que le decía.

Mientras todos dormían Alice comenzó a soñar.

En las noches tenidas de sombras y susurros una princesa Targaryen, nacida bajo la luna de sangre, soñará con un destino oscuro que se entreteje con hilos de traición. En el santuario de sus visiones, verá la figura de aquel en quien deposita su confianza más profunda, un Aliado cercano que lleva consigo una máscara de lealtad.

En el eco de sus sueños, la princesa encontrará la tragedia que se cierne sobre ella: su propio hijo, la luz de su vida y la esperanza de su linaje, caído en manos de aquellos en quien creía encontrar protección. La hoja de traición cortará más profundo que el acero valyrio, desgarrando el tejido de su corazón y sembrando la semilla de la venganza en su alma de fuego.

Hambrienta de venganza y consumida por la ira, la princesa se convertirá en la tormenta que devora reinos. Con el fuego de sus dragones y furia de una madre desgarrada, arrastrará con todo su paso, declarando venganza en las llamas que consumen ciudades y castillos.

Alice despertó con un fuerte dolor en su vientre abultado. Jacaerys se despertó y la miro preocupado.

—¿Estas bien?—preguntó Jacaerys.

—Estoy bien—Respondió Alice—sabes que el bebé no se queda quieto.

Jacaerys asintió y le toco el vientre, el bebe que vacía en el vientre de Alice se movió otra vez cuando sintió el tacto de Jace.

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Pido una disculpa por hacer un saltó en el tiempo, pero necesitaba ponerle más acción y color al fanfic.

¿Innocent beauty? -Jacaerys Velaryon- #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora