La asesinaron un 23 de octubre, y desde entonces todos se preguntan: ¿Qué le pasó a Elizabeth Parker?
Venus, la protagonista, tras el reciente asesinato de su hermana, Elizabeth, se une a un grupo "cristiano", donde comienza a descubrir que varias...
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Narra: Venus
Si alguien alguna vez alguien dijo que el amor lo bastaba todo, es mentira.
Por que yo ame a Elizabeth con devoción, deje que tomara mi vida y me arrastrara a su miseria, pero no fue suficiente. Es fácil irse y dejarle al resto toda su responsabilidad, es injusto.
No sé cómo continuar, no sé donde buscar o qué pensar. No quiero aceptar que en ocasiones fue una mala persona, que merecía su muerte pero hay cosas que debo contar.
Elizabeth nunca fue alguien normal, me gustaba que no lo fuera, pero a veces, me dolía. Todo empezó cuando cumplí once años.
Hace siete años atrás:
Es mi cumpleaños.
Todos los años solemos festejarlo en el parque de diversiones pero este año Elizabeth se enfermó y tuvimos que quedarnos en casa.
—Es hora de abrir los regalos—anuncia mi padre con entusiasmo.
Corró con prisa a la mesa, solo hay un regalo, el de mi padre. Él nunca se olvida de mi cumpleaños como mi madre.
Rompo el envoltorio con prisa y encuentro una carta que dice:
''Búscame en tu habitación.''
Miro a mi padre con ingenuidad y confusión. Todos corremos hacia arriba con grandes sonrisas.
—No lo puedo creer. —escuchó decir a Elizabeth cuando ve el pequeño gatito que está arriba de mi cama.
Me impulsó hacia los brazos de mi padre con emoción. Y sin darme cuenta pasa una semana desde que nuestro gato, ''Pupi'' está en casa.
Elizabeth se comporta muy extraño conmigo desde la llegada del gato, como si estuviera celosa.
—¿Has visto a Pupi?—le pregunto a mi padre después de horas de no ver al gato.
Mi padre niega con la cabeza.
Voy hacia el jardín y encuentro al gato muerto entre mis flores favoritas. Lloro desconsoladamente e intento sacarlo de ahí, mi padre escucha mi llanto.
—¡¿Qué sucede?! —pregunta.
Él camina hacia donde señalan mis manos.
—¿Qué le pasó? —sollozo.
—Parece que alguien le cortó la cola, lo siento mucho. Vamos a conseguir otro...
—¡No quiero otro!
Estoy furiosa.
Esa noche Elizabeth se quedó conmigo cuidándome. Ella volvió a ser la misma de antes, y tiempo después me di cuenta que ella lo había asesinado porque estaba celosa.
