Capítulo dieciocho

13.8K 727 69
                                    

                                                                                 Narra:Lord

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Narra:Lord

—¿Por qué volviste?—me pregunta ella con los brazos entrecruzados.

—Por ti —digo su nombre, aunque a ella no le gusta que lo haga.

Se aleja cuando intento acercarme.

—¡No me digas así! —se cruza de brazos —.¿Por qué la haces más difícil? Es sospechoso que vuelvas, la policía ya te debe estar investigando.

—Relájate, nadie sospecha nada —la tomo de las manos con una sonrisa pícara—. ¿No me extrañaste?

—Sí —se rinde ante el enojo—. Pero Venus cada vez está más cerca de Hans, me da miedo que haga preguntas.

—¿Él sabe algo sobre nosotros?

Niega con la cabeza, entonces me acerca a ella y le digo:

—Ella no es tan inteligente como tú.

—Sabe dónde buscar —se recuesta sobre mi hombro—. Si su amiguita abre la boca, estamos jodidos.

—Creí que te encargaste bien de qué no lo hiciera.

Ella sonríe, pero sigue preocupada.

—Lo hice —responde.

Me siento a su lado, es deslumbrante verla siendo ella. Aunque dentro de un rato dejará de hacerlo.


Narra: Venus

—¿Te sientes culpable por su muerte? —le pregunto a mi madre, sentada frente a ella.

Deja de mirar el televisor y frunce el ceño.

—¿A qué viene esa pregunta?

—El pastor dijo que la falta de perdón es lo que nos enferma—balbuceo.

—Ya tuvimos mucho con la muerte de tu hermana como para que empieces con tus cosas.

Me pongo de pie y con los ojos llorosos le digo:

—Si sigues así me perderás a mi también.

Mi madre mira el cuadro que tiene de Elizabeth en su pared y en medio del silencio que hay entre ambas susurra: 

—Debiste cuidarla más.

—¿Y tú qué hiciste para cuidarla? —siento un nudo en la garganta —.¿Donde estuviste cuando comenzó a recibir amenazas?

—¡¿De que estas hablando?!

Me quedo en silencio durante unos segundos.

—¿No lo sabías? —le pregunto —. ¿Nunca te contó sobre las amenazas?

Ella niega con la cabeza mientras mantiene su mandíbula tensa, y entonces comienzo a recordar:


10 de octubre de 2023:

—No me siento bien, hoy no iré —Me acurruco en la cama.

—¿Como que no iras?—Me sacude—. ¿Y los clientes?

—Ve tú, por favor.

—Hoy no puedo—revuelve todo mi ropero en busca de ropa y la pone sobre mi cama—. ¡Levántate!, te ayudare a cambiarte. Vamos...

—¡Te dije que no me siento bien!—le gritó —. No voy a hacerlo, no puedo...

—¡Pero me dijiste que me ibas a ayudar, lo prometiste! —Elizabeth parece a punto de llorar —. ¡¿No entiendes que en esto no tenemos opción de decidir?!

—¡¿Por qué no?! —le pregunto, enojada —. ¿Tan importante es para ti empezar una nueva vida?

Elizabeth se da la vuelta, la escucho sollozar.

—No lo entenderías... —susurra, tocándose la cabeza—. Es más que solo eso.

—¡¿Por qué?! ¿qué no voy a entender?

Se da la vuelta mientras limpia sus lágrimas. Hace mucho no la veía tan desesperada.

—¿Qué sucede? —me estoy empezando a asustar.

—Hace un tiempo vengo recibiendo a amenazas de muerte, siento que me persiguen todo el tiempo—le cuesta respirar—. Estoy desesperada.

—¿Estás segura?—me acerco a ella—. Tus pastillas, ¿las tomaste?

—Venus...—me agarra del brazo—. Necesito que por favor me creas, me van a matar.

Ella corre hasta abajo de la cama y saca una caja, al abrirla me quedo con en shock durante unos cuantos segundos. Entonces, sé que dice la verdad.

Ella sabía que iba a morir, y sus palabras todavía me torturan. Si hubiera hecho algo tal vez hoy estaría con vida.

¿Qué pasó con Elizabeth Parker?Where stories live. Discover now