Eran largos los pasillos
del calendario,
a veces oscuros,
y siempre descalzo.Ya se ve por la ventana
la bandada de pájaros emigrar.Son las doce
con las campanas de la iglesia.Cae la arena al pozo.
Sigo siendo el mismo niño,
pero con complejo de retrovisor.De verso libre,
de lengua larga,
de palabras mudas,
de alma desgarrada.Hecho de nubes,
echo de menos,
y es que lo que tuve
se escapa entre mis dedos.