⋆ Episodio 7┊ . 💫 ˚

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JungKook recorría la escuela de arriba a abajo buscando al quisquilloso de TaeHyung. No es que quisiera realmente, pero el hecho de que mañana había evaluación de matemáticas le preocupaba,  necesitaba que el chico cerebrito le echara un cabo.

Como última opción entró en la biblioteca ya cansado de andar por todo el lugar. Su notable alergia a los libros se notó tras pasar las puertas y arrugar el ceño. Su mirada se suavizó y dio un largo suspiro dejando su mano posar en su cadera para acercarse al trigueño, quien casi se cubría por la mayoría de los tomos libros posados frente y alrededor de él, rodeándolo como una pequeña muralla.

—¡Hasta que al fin te encuentro!

El castaño con inmensas gafas lo miró con una ceja alzada y siguió metido en sus tareas. JungKook se sentó frente a él casi cayendo completo sobre la mesa.

—Vengo a molestarte realmente —TaeHyung ni se inmutó en mirarle, siguió ecribuendo lo que sus dedos señalaban en el libro a su lado—. Necesito que me repases para la evaluación de Matemáticas de mañana.

El chico está vez si levantó la mirada pero con total indiferencia y asintió.

—Déjame terminar las tareas y luego te ayudo.

JungKook sonrió levemente y mientras veía a TaeHyung rellenar las libretas con los contenidos de las orientaciones se dijo que iba a aprovechar el tiempo y adelantarlas también.

Tomó un libro de Geografía que no iba en lo absoluto con sus asignaturas y lo cerró, aguantando una serie de estornudos que se le avecinaron con el olor a viejo y polvareda.

TaeHyung lo miró de reojo y JungKook lo había estado cazando.

—¿Sabías qué —Y ahí iba otra vez— si estornudas tu corazón se detiene un milisegundo? Si aguantas un estornudo se te podría romper una costilla, desgarrar la carótida o sufrir daños cerebrales. —Enumeró inocente con sus largos dedos.

¡Dios!

—No, definitivamente no lo sabía —la voz de Jeon se oyó irritada.

—Pues puedes estornudar con libertad JungKook, no me importa ver tus mocos.

Y una carcajada fuerte se escuchó ese día en la biblioteca cuando JungKook no pudo evitar estrujar su rostro con notable asco.

Solo que si fue capaz de darse cuenta, de que el idiota de Kim, tenía una bonita sonrisa.

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𝐇𝐨𝐧𝐞𝐲, 𝐃𝐢𝐝 𝐘𝐨𝐮 𝐊𝐧𝐨𝐰 𝐓𝐡𝐚𝐭? • [𝐊𝐨𝐨𝐤𝐕]Where stories live. Discover now