⋆ Episodio 16┊ . 💫 ˚

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—Tomar zumo de plátano con miel es una de las mejores maneras de curar las resacas.

JungKook le había extendido un vaso con dicha bebida al castaño grenchudo acabado de levantar. Había tenido que traer a un Kim borracho y casi inconsciente a su casa, y para más detalles dormir en el incómodo sofá junto a Yeontan, quien no había dejado de molestarlo en la noche con su afición de dormir pegado a su cara, justo en la almohada.

TaeHyung recibió el vaso con un surco en su frente y un ojo cerrado, aguantando el dolor de cabeza que solo le hacía jadear, las punzadas estaban acribillandole lentamente.

—Gracias —Y bebió entre muecas el batido.

Jeon lo miró, aguantando el crujido interior y silencioso de un corazón decepcionado. Sin embargo, su cara no expresaba más que la neutralidad, conteniendo la necesidad de decirle que no valía la pena, que debería de olvidar esa idea, aunque un sentimiento no fuera lo suficientemente fácil de dejar a un lado. Mas ¿Quién era él para negarle a TaeHyung sus sentimientos? Él también creía estar enamorado, de la persona equivocada por supuesto.

—¿Sucede algo? —Escuchó nuevamente la voz del castaño, quien lo hizo salir de su discusión mental.

Encontró sus ojos observarle cansados, con el rastro de sueño regalándole unas bolsas bajo los ojos y un rostro más hinchado. Tenía espuma de batido en la comisura de los labios.

Suspiró, sentándose en el borde de la cama.

—¿Es la primera vez que tomas alcohol?

Las mejillas de TaeHyung se sonrojaron y JungKook tuvo un repentino desfallecimiento por su hermoso rostro aún acabado de despertar con ese notable carmesí. Aventuró un dedo para acabar de retirar esa espumilla tierna y molesta a la vez.

Kim miró hacia otra dirección.

—Sí, yo... quería comprobar el famoso mito de que el alcohol te mantiene caliente. ¿Sabías que en la realidad los licores dan sensación de calor? Pero el alcohol baja la temperatura del cuerpo, con lo que realmente es peligroso beber alcohol cuando hace mucho frío. Lo mismo pasa con el café-

—No me mientas Tae.

El chico lo miró desconcertado. JungKook tenía un rostro notablemente tajante.

—N-no —tartamudeó— no te estoy mintiendo.

—Anoche, dijiste que te gusta Jimin. Asumí que él es la causa.

Las mejillas acumularon más calor del debido y casi quiso llorar de la vergüenza. Apretó las sábanas entre sus largos y delicados dedos y sus ojos se cristalizaron.

—No se lo cuentes a nadie JungKook por favor. No quiero que nadie se entere de que... —Tragó fuerte— de que soy homosexual.

Y Jeon lo comprendió. Ahí en su posesión tenía la mayor arma contra Kim, su mayor miedo era su sexualidad. El pelinegro mordió su lengua, buscando que decir. Miró los dedos ajenos arrugarse con fuerza.

—Tae, no tienes porqué sentirte apenado por eso. Yo... también soy gay.

Los ojitos acuosos pasaron a observar los suyos. Jeon sintió repentinas ganas de abrazarlo y poder consolarlo. Vamos que estaban en pleno siglo XXI, la sexualidad no era un lío. Al menos, no para alguien como JungKook.

—A ti también te gustan... ¿Los hombres?

JungKook sonrió leve, intentando detener el pequeño nervio que surgió en sus cuerdas vocales cuando vio los ojos castaños de TaeHyung abrirse pareciendo canicas mieles. Se veía mucho más atractivo sin sus lentes.

—Sí Tae, me gustan los hombres.

—¿Y eso es malo? Ósea ¿lo sientes malo?

JungKook le miró de lado, la comisura de su labio se elevó mientras achicaba la mirada.

—¿El dios del saber me está haciendo una pregunta? —TaeHyung mordió su labio incómodo.

—Las respuestas no salen en internet. Al menos, no las morales.

—Vale...

<<¿Y serían buenas respuestas las que yo tuviera que darte?>>

—No es malo. No mientras te guste la persona correcta.

—¿Sabías que el diez porciento de la población no siente atracción por ningún género, ni masculino, ni femenino, es decir, es asexuada? Además según los estudios sentir atracción hacia una persona dura máximo cuatro meses, si el tiempo excede, ya estás enamorado.

—No, no lo sabía. No sabía nada de eso —respondió calmado mirando como el castaño jugaba con sus dedos, más relajado.

Sus ojos volvieron a mirar al pelinegro y retuvo la respiración momentáneamente.

—¿JungKook...?

—Dime.

—¿Sabías que las decepciones amorosas duelen como una quemadura?

JungKook sonrió tomándole una de sus manos.

<<¿Resulta irónico que te lo diga JungKook?>>

—Lo sé Tae, lo sé...

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𝐇𝐨𝐧𝐞𝐲, 𝐃𝐢𝐝 𝐘𝐨𝐮 𝐊𝐧𝐨𝐰 𝐓𝐡𝐚𝐭? • [𝐊𝐨𝐨𝐤𝐕]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora