Capítulo 11

7.7K 903 592
                                    

Narra TN __

Hitoka se quedó en shock ante lo que veía, no estoy segura si fue por mi busto o porque tenía un brasier de pandas. Creo que fueron ambas.

– Esto es un sueño... Esto es un sueño... Un chico no se puede convertir en chica... Un chico no tiene pechos... Biológicamente eso es imposible... – empezó a decir sin control la pobre Hitoka.

– ¿¡Hitoka, pero qué estás haciendo aquí!? – empezó a regañar Kiyoko – ¡Te dije que te quedaras a ayudar a hacer la cena junto con las demás chicas y que no me buscaras!

La chica no dio señales de que estuviera respirando o al menos estar consiente de lo que sucedía. Podría jurar que sus dientes estaban castañeteando por el shock.

– Hitoka, ¿me escuchas? – le empecé a mover su cabeza cuidadosamente – ¿Hitoka? No me obligues a hacerlo.

– Hitoka, por favor reacciona – dijo Kiyoko.

De repente, Kiyoko aplaudió cerca del oído de Hitoka. Esta reaccionó y empezó a observarme de arriba a bajo. Se quedó boquiabierta.

– Hitoka, te lo explicaré con calma ¿está bien?.

– Sí... – dijo más tranquila y sin quitarme la mirada – ¿Qué está pasando?.

Yo la miré con indiferencia y me puse la playera de la pijama de mi hermano.

* Bueno, tarde o temprano alguien me iba a descubrir. Era demasiado bueno como para ser verdad. Al menos no fue un chico el que me vio con mi brasier de pandas. *

– Hitoka, espera un momento aquí ¿está bien? tengo que ponerle sus cintas de la nariz a TN__.

– ¿TN__? – repitió Hitoka mientras me analizaba con la mirada – ¿Acaso no eras TA__?

– Larga historia, por lo mientras me presentaré. Me llamo TN__ TA__ y soy la hermana de TA__. Lo demás te lo explicará Kiyoko. Un gusto.

Le extendí la mano e Hitoka me la respondió.

– Igualmente...

Kiyoko me empezó a poner las cintas de mi nariz y me dijo que no se me ocurriera quitármelas, ya que si me las quitaba, lo más seguro es que me empezara a gotear sangre en la nariz.

– TN__ – dijo Kiyoko muy seria – Es mejor que te vayas a cenar y dejes tus cosas en la habitación de los chicos. Yo me encargo de esto. Tiene que saberlo el entrenador Ukai y el profesor Takeda.

– Lo entiendo – me puse el suéter de Karasuno para que no se me notara la forma femenina de mi cuerpo, ya que el suéter me quedaba grande y pues lo ocultaba perfectamente. Me llevé la bolsa negra – Yo le comento sobre lo sucedido, hasta luego.

Me retiré de aquel lugar y caminé hasta la habitación de los chicos. Al parecer aún no había llegado nadie, así que dejé mis cosas y me retiré de aquel lugar.

Ahora estaba caminando afuera y me dirigía a la cafetería.

Era muy tranquila la atmósfera en esa escuela. Me tranquilizó mucho. Éramos yo, el pasillo de abajo, el viento chocando contra mi rostro, Hinata corriendo directo hacia mí... Espera... ¿Qué?.

Antes de que pudiera reaccionar. Hinata se tropezó y aterrizó sobre mí, haciendo que nos cayéramos ambos al duro pavimento.

– ¡Lo siento mucho, TA__! – dijo Hinata con unas leves lágrimas en los ojos – Pero él me va a matar si me atrapa.

– ¿A quién te refieres... ?

– ¡¡¡¡HINATA!!!!

Me asomé y me di cuenta que algo se acercaba a gran velocidad, pero luego me di cuenta que no era un algo... Si no que era Kageyama el que se acercaba.

¿¡Una infiltrada en Karasuno!? [Temporada 1]Onde as histórias ganham vida. Descobre agora