Mi Pareja Perfecta IV

Hogar, dulce hogar.

Martina E.:

−Si, ha estado todo tranquilo en realidad. Ehm no −Miento mirando a Sandy dar saltitos y jugar con su pelota.

¡Es tan linda!

−Genial −Escucho. −Lo pasé muy bien

Si, estoy hablando por celular con Ángela

−Si, estuvo divertido, dormí hasta el mediodía −Bostezo. −... y creo que seguiré durmiendo− el envejecimiento precoz me consume.

−Jugaré un rato −Susurra− carajos viene mi hermana, esto no es bueno. Adiós Tina, besos. – Dice.

Ángela G.:

''Beso en una nalga'' pienso.

−Catalina, voy a jugar. −Digo a la defensiva antes de que me invite a ser plástica, con sus amigos plásticos.

− ¡Ya empezaste a aislarte nuevamente!

−Y me volveré a ir −Anuncio. − ¡Me entregarán mis llaves muy pronto! − ¡Estoy feliz por eso! ¡Invitaré a todos! Aunque es un apartamento y quizás los vecinos reclamen...

¡Mi primera multa por ruidos molestos! ¡Qué emoción!

Sonrío.

−Veo que estás feliz. −Dice con una expresión no muy conforme.

−Catita −Me pongo de pie y la abrazo capturando sus brazos y levantándola en el aire. −Puedes ir cuando quieras− Beso su mejilla y me voy al sofá, doy un saltito de emoción y tomo el control. −Adiós. −Canturreo. −O únete, si no adiós.

−Genial. No gracias, me voy con los chicos −Se va.

−Adiós −repito no muy pendiente.

Disfruto mi sábado jugando y pensando todo lo que me llevaré a mi nuevo hogar. Chateo con Tina y juego, creo que sin darnos cuenta nos hemos vuelto tan increíblemente cercanas, más de lo que nunca pensé. Es decir, ¡tenía que evitarla!... y ahora le escribo hasta en el baño.

Es genial que luego de habernos separado laboralmente las cosas sigan bien, ya esperaba que todo decreciera, o quizá, que haya quedado en unos polvazos y adiós.

Sonrío pervertidamente mirando a la pantalla. ''Me alegro de que Tina quisiera más de este producto''', bromeo internamente, ''porque me encanta repetir...''

Me recuesto en el sofá y cierro los ojos rememorando la última fiesta.