Capitulo 24

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La sangre se me fue a los pies cuando los vi. A ella puramente la reconocí por su apariencia en mis pesadillas, pero era mucho más filosa y hermosa que en ellos. Tenía un vestido rojo que se ajustaba a su cuerpo y no lucía como una anciana de 100 años, se veía como alguien a penas bordando los treinta. El cabello en una coleta larga hacia atrás, tan negro como lo eran sus ojos. Su brazo delgado y pálido estaba envuelto alrededor del de Loki. 

Las piernas me flaquearon y como perdí un poquito la fuerza, el brazo de Thomas alrededor de mi se hizo más fuerte y me apretó contra sí para no dejarme caer. Mi visión hasta se borró un poco cuando noté la altivez de ese hombre al que había amado tanto. El corazón se me detuvo cuando sus hermosos ojos verdes me vieron y los apartó como si hubiera visto a cualquier otra persona, como si yo no fuera nada. 

Thomas acercó sus labios a mi oído de nuevo. 

—Mantente fuerte — susurró con dulzura. No como una orden, no como una amenaza. Más bien como una suplica. Mi corazón se retorció en mi interior y observé la imagen de Loki y Linnet entrando ante todas las miradas presentes en el salón. 

Alguna copa se rompió en el suelo. Algún grito de sorpresa fue ahogado con alguna mano. Algunos murmullos comenzaron a deslizarse por el silencio que envolvía toda la zona donde los Sharpe y yo estábamos. 

Observé a Burn acercarse a nosotros y mantener sus ojos en alerta a cualquier señal de Azriel. 

El nudo en mi garganta era la cosa más horrible que podía sentir. Me hubiera caído de rodillas al suelo si Thomas no hubiera estado sosteniéndome de la forma en que lo hacía. 

Y luego, el silencio que adornaba el salón se evaporó cuando volvió a sonar la música y muchos volvieron a sus lugares desinteresadamente. Pero algunos, eran muy obvios. Mirandola. Murmurando cosas ¿Ella no estaba muerta? ¿No la mataron los Sharpe? Y con una lentitud humillante, Linnet y Loki avanzaron en medio de la gente con sus ojos puestos en Thomas. Ella le sonrió, mostrándole los blancos dientes cuando se detuvo no tal lejos de nosotros y ella observó detrás de Thomas a Robert y James. 

—Ah— ella habló con una sonrisa en los labios. Aparté la vista, al suelo. La mandíbula me temblaba. No era capaz de ver a Loki... de verlo con ella. Quería... quería golpearlo. Necesitaba hacerlo hasta que... me diera alguna explicación — yo también los extrañé. 

Robert y James gruñeron a mis espaldas y ella sonrió en respuesta, volviendo a fijar sus ojos en Thomas. 

—¿Qué estás haciendo aquí con éste traidor? — La voz de Thomas era oscura, la máscara de frialdad se instaló sobre el rostro que se me comenzaba a rebelar. Si agarre en mi cintura no disminuía por nada y yo seguía sin atreverme a ver a Loki.

—Thomas, no le digas así — ella ronroneó, observé sus largas uñas moverse sobre el brazo de Loki — él solo hizo lo creyó correcto. Y lo correcto es seguir a tu corazón ¿No?

Podía jurar que Thomas gruñó por lo bajo.

—Un traidor es un traidor, siempre.

Apreté mis dientes.

Traidor. Mi loki... Traidor.

Cerré mis ojos con fuerza, mantente fuerte. Él había suplicado, no te desmorones. Había dicho entre lineas. Y pensar en eso me hizo reaccionar. Así que de a poco muy lento subí mi mirada hasta el rostro de Linnet. Perfecto, palido y sobrenatural. Demasiado hermoso, porcelana tan bella que es filosa. Ojos negros como su cabello y labios rojos fuertes.

Ella me sonrió.

—Ah claro — dijo viéndome — tú — pestañeo un par de veces y luego sonrió con malicia —  tanto esfuerzo por nada. Mírate, aquí... Al lado de este ser.

Cinco Razones ━ Thomas Sharpe.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora